En el Movimiento Antorchista estamos convencidos de que es sumamente necesario que nuestra niñez y juventud tengan acceso a una educación de calidad que los forje como hombres preparados, sensibles y humanistas que se interesen en construir una sociedad más justa para todos.
Desde la década de los años ochenta, como organización social, iniciamos trabajo en las colonias populares del país y, desde entonces, nos propusimos explicar pacientemente a los colonos los propósitos de nuestro movimiento, a la par de recoger sus principales problemas en la comunidad para que, a través de la gestoría y la lucha, lográramos mejorar sus condiciones de vida.
La esclavitud aún no ha sido abolida en su totalidad, pues su versión moderna afecta a más de cincuenta millones de personas según las últimas estimaciones mundiales.
La mayoría de las personas más pobres del mundo son mujeres, que viven en constante discriminación y se encuentran en constante riesgo de sufrir exclusión y violencia en sus diferentes modalidades. Constantemente sufren de manera desproporcionada las prácticas laborales discriminatorias y no gozan de igualdad en servicios como acceso a la salud, a la educación o la justicia.
La narrativa de los últimos meses que se registra en diferentes medios de comunicación afines al régimen, se ufana en afirmar que el segundo piso de la Cuarta Transformación avanza “a toda máquina” y advierten que el modelo republicano de austeridad y que la economía moral está dando resultado y que así, el país se encamina a terminar con la pobreza en la que vivimos millones de mexicanos.