Erich Fromm en su libro Tener o ser (1976) decía: "la gran promesa de un progreso ilimitado (la promesa de dominar la naturaleza, de abundancia material, de la mayor felicidad para el mayor número de personas, y de libertad personal sin amenazas) ha sostenido la esperanza y la fe de la gente desde el inicio de la época industrial”.
El sueño de ser los amos independientes de nuestras vidas terminó cuando empezamos a comprender que todos éramos engranes de una máquina burocrática, y que nuestros pensamientos, sentimientos y gustos los manipulaban el gobierno, los industriales y los medios de comunicación para las masas que ellos controlan. "En conclusión desde 1976 este psicólogo social, psicoanalista, filósofo y humanista alemán, ya nos planteaba la gran desilusión social en la que todos soñamos desde tiempos remotos de mejorar las condiciones de vida, donde el ser humano no solo cubra sus necesidades básicas como la famosa pirámide de Maslow nos plantea, en este libro queda claro que desde siempre el capitalismo ha sido una promesa de mejora en la que todos trabajamos, producimos en exceso y a nadie le falta nada, pero he ahí el error cuando descubrimos que la producción no era socialista, que todo era regido por el egoísmo de unos cuantos y más aún que este mismo egoísmo nos gobernaba, llegan al poder con promesas de cambio, llenan al pueblo de fe, esperanza y regalos baratos, pero cuando logran su objetivo las calles continúan con baches, las colonias sin agua o electrificaciones, las comunidades cercanas, en condiciones más reprobables, inclusive incomunicadas, ya sea por el acceso o la señal (actualmente los teléfonos resultan un gran medio de comunicación). Y la realidad le da la razón, a este gran pensador, nada más debemos ser observadores de nuestra realidad histórica en el mundo en nuestro país y más bajo la óptica de nuestras regiones.
En Matehuala, San Luis Potosí, cuando uno visita San Antonio de los Castil puede observar la pobreza, desde la entrada pura terracería, sin centros de salud, las escuelas en el abandono, casas de lámina, sin agua potable, como protegerse de la enfermedad si el pueblo vive en pobreza ancestral.
Debemos hacer algo en consecuencia a la pobreza del pueblo, y sólo el Movimiento Antorchista, al ver las condiciones deplorables en la que tienen a la ciudadanía va a la presidencia del municipio, en compañía de manifestantes hartos de no ser tomados en cuenta y nunca encontramos al presidente municipal Alejandro Jano Segovia, solo aceptan las peticiones, pero sin respuestas, como tirarlas en un bote de basura. Nada para la gente, desde el Gobierno federal, estatales y municipales acaban con el presupuesto.
Como bien lo explica Erich Fromm en el libro ya antes mencionado: "el egoísmo se relaciona no sólo con mi conducta, sino con mi carácter, significa que lo deseo todo para mí, que poseer y no compartir me da placer; que debo ser avaro, porque mi meta es tener, y que más soy cuanto más tengo; que debo sentir antagonismo a todos mis semejantes, a los que deseo engañar, a mis competidores a los que deseo destruir, a mis obreros a los que deseo explotar, nunca puedo quedar satisfecho, porque mis deseos no tienen límite; debo envidiar a los que tienen más, y temer a los que tienen menos; pero debo reprimir estos sentimientos para presentarme (ante los otros y ante mí mismo) como el individuo sonriente, sincero, amable que todos simulan ser". En pocas palabras ante tan reflexiva explicación egoísmo es lo único que su conducta puede expresar al pueblo, mientras él tenga para ser trasladado en ambulancia por una emergencia, tenga comida e inclusive para una botella de agua digna (que muchos carecen) lo que pase con el pueblo, con su gente a la que él les prometió un mejor gobierno y solo les ha entregado inseguridad, hambre, cero infraestructura, en si lo demás no importa, primero su bienestar y después el pueblo. Tal cual es la forma de pensar de los gobernantes mexicanos.
¿Cuál es la solución que propongo ante tal abandono, y egoísmo, del actual presidente de la República?, qué debemos hacer, todos los que sufrimos el hambre y la desigualdad. Organizarnos, unirnos con Antorcha, o nos quedaremos solos ante la pobreza. Vamos a exigir a una sola voz que sea justo el reparto del presupuesto para el pueblo, vamos a organizarnos entre más, la pobreza duele menos. Antorcha es nuestra única opción, no lo olvidemos nunca.
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