El Yerbaniz, pequeño ejido perteneciente al municipio de Aramberri, Nuevo León, fue un feliz afortunado al resultar ganador de un premio de 20 millones de pesos en la mundialmente famosa "rifa del avión presidencial”; fue un fabuloso premio pues debemos recordar que en la famosa rifa se repartieron cien premios de 20 millones de pesos cada uno para sumar 2000 millones de pesos en premios; la rifa fue celebrada en el edificio "El Moro” de la Lotería Nacional en septiembre del año pasado.
Fue la escuela que alberga a niños de kínder y primaria la feliz beneficiaria. Todo el ejido se regocijaba por tan novedoso acontecimiento y su alegría contagiaba al municipio y a todo el estado, al grado de que algunos noticieros de prestigio enviaron corresponsales hasta la comunidad a cubrir la nota. De la noche a la mañana, El Yerbaniz brincó del anonimato a la fama nacional.
Si el premio se hubiera entregado, la escuela hubiera tenido recursos para mejorar toda su infraestructura, podría haber habilitado el servicio de internet tan demandado en comunidades serranas, habría tenido hasta para mejorar el camino que los comunica con la cabecera municipal o para resolver otras necesidades que sus habitantes considerasen de urgente solución.
La algarabía se ha acabado, las aguas han recobrado su nivel normal y ya nadie habla de la rifa del avión presidencial ni del premio que los afortunados del Yerbaniz obtuvieron; la escuela sigue igual. Han pasado cuatro meses y no se sabe para cuándo entregarán el famoso premio o al menos, no encontré ninguna nota donde igual, con bombo y platillo, se haga entrega del premio a los representantes escolares.
Un amigo de Aramberri me comentó que la decepción corre por el municipio, pues muchos simpatizantes del partido Morena y un buen número de fanáticos del señor López Obrador, presumieron hasta el cansancio el premio de la rifa, al grado de que muchos otros que no simpatizaban, comenzaron a creer que con morena iban a cambiar las cosas a favor de los marginados del municipio, pero que al pasar los meses y no mirar que se haga entrega del premio, hasta algunos de los fanáticos comienzan a dudar de la honestidad de su presidente y la mayoría en general se sienten burlados porque aunque no eran beneficiarios directos del premio, creyeron que el premio se iba a entregar pues dicen que cuando alguien gana un premio en la lotería, con su boleto en mano puede solicitar que se le haga entrega, pero en el caso de la rifa del avión no se sabe cómo ni dónde se puede pedir el premio.
La cosa parece simple pero no lo es. El Yerbaniz es muy pequeño para pensar que los sucesos que acontezcan en ese lugar puedan impactar en la geografía nacional. No, el Yerbaniz puede parecerles insignificante y resultarles fácil incumplir con entregarles su premio, pero el hecho de no entregárselos no es tan simple porque es un botón de muestra del mal funcionamiento del aparato gubernamental en la escena nacional. No olvidemos que incluso, padres de familia de una escuela de Veracruz acusaron al delegado del bienestar de haberles quitado su cachito premiado. Y en cuanto a entrega de premios los anuncios de los medios solamente refieren que se entregó a escuelas, pero no se dice qué escuelas cobraron el premio ni mucho menos en qué se invirtió el recurso.
Tomando en cuenta que los que nos gobiernan, antes de ser gobierno formaron un fideicomiso para ayudar a los damnificados por el último sismo ocurrido en la ciudad de México cuyos recursos millonarios no se supo a dónde fueron a parar, es legítimo dudar del buen manejo que se le esté dando al asunto de la rifa del avión. Si en el caso del sismo no hay explicación, ni tampoco lo hay en el caso de la rifa, igual que en otros casos de corrupción que se han hecho públicos y que no se aclaran debidamente, también es legítimo dudar de limpieza de sus actos y de la honestidad de sus protagonistas; de no haber aclaración puntual en el caso del premio del Yerbaniz, estamos entonces ante un caso de corrupción escandaloso por partida doble. En primer lugar, porque evidencia la falsedad de la consigna de los dirigentes de morena que prometieron luchar contra la corrupción cuando son ellos sus principales promotores; en segundo lugar, evidencia su falsedad porque durante su campaña dijeron primero los pobres y resulta que los pobres son los principales afectados por sus acciones corruptas.
Espero que haya acciones verídicas como la construcción de una escuela digna que sustituya su aula de madera y que mejore en general el aspecto de la escuela de la comunidad y no una publicación como las que hacen los fanáticos de morena quienes se consuelan diciendo "los del PRIAN robaban más” mientras sus líderes siguen haciendo de las suyas. La verdad, no creo que ocurra el milagro.
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