Frente a la impunidad y el valemadrismo del gobierno de Guerrero y del Gobierno federal, que no han dado resultados en la detención de los asesinos de los líderes antorchistas, Conrado N., y Mercedes N., y su pequeño hijo, es que Antorcha Nacional ha dado inicio a la movilización en todo el país, después de más de un mes que se cometió tan aberrante asesinato, que a la fecha parece que se pretende ser guardado en los archivos del olvido, en una situación que no habremos de permitir.
Como se recordará, la tarde del 12 de abril fueron asesinados nuestros queridos compañeros Conrado y Mercedes, ambos integrantes del Comité Estatal del Movimiento Antorchista en Guerrero, y su pequeño hijo, quien aún no cumplía los seis años.
De acuerdo con el reporte de la autopsia, fueron golpeados en la cabeza hasta la muerte. Y ha transcurrido un mes desde que se cometió el triple asesinato, pero nadie en el Gobierno del estado de Guerrero ni en su aparato de justicia ha hecho esfuerzos serios para saber quiénes son los asesinos y, desde luego, tampoco para capturarlos ni encarcelarlos.
Cabe destacar que desde que nos enteramos del crimen, el Comité Ejecutivo de nuestra organización pidió, de manera respetuosa, una reunión con la gobernadora constitucional Evelyn Salgado Pineda, para exigir justicia.
Sin embargo, la reunión no se ha realizado y algunas acciones por parte de los funcionarios estatales indican que tampoco se está contemplando de manera seria. Por ejemplo, los líderes antorchistas de Veracruz, Oaxaca, Tlaxcala, Guerrero y Puebla, así como nuestro vocero nacional, han acudido varias veces a reuniones con algunos funcionarios guerrerenses y gente de la justicia del estado, esperando que ellos tengan ya algunas respuestas a nuestra petición de justicia, pero no encontramos nada, salvo largos discursos de “estamos trabajando” que no ayudan en estos momentos y que cada día son menos efectivos, porque pierden su valor. Decir no es hacer. Y hay momentos en que la ciudadanía espera hechos y no dichos.
Entonces, nuestra petición de una reunión con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda es justa por una razón, nuestros compañeros fueron asesinados, no nos los regresarán vivos y, por lo tanto, lo único que pedimos es una investigación seria y urgente para encontrar y castigar a los autores intelectuales y materiales del asesinato.
¿Estamos mal? No lo creo. Todos los ciudadanos de un estado tienen el derecho de pedir audiencia con los funcionarios que gobiernan y estos tienen la obligación de atenderlo y, sobre todo, de solucionar sus problemas.
Por lo tanto, es necesario informar al pueblo de México que a nivel nacional, esta semana comenzaremos la difusión de cientos de miles de volantes en cada estado para exigir justicia, lo mismo haremos en las redes sociales y en las conferencias de prensa que realizaremos en cada capital, para informar a la ciudadanía sobre el problema.
Deben enterarse los mexicanos que los compañeros de Guerrero desde hace tiempo están exigiendo hacer una movilización en Chilpancingo: “pero la habíamos pospuesto debido a las pláticas que teníamos con gente del gobierno estatal”.
Es necesario advertir que frente a tan creciente inoperatividad gubernamental y evidente impunidad, desde ahora, todos los antorchistas de la nación iremos a la marcha en Guerrero para exigir justicia. Vamos miles y miles a gritar nuestra exigencia de justicia. También en la Ciudad de México, frente al Palacio Nacional, nos movilizaremos con miles para pedirle al presidente del país justicia ante este crimen.
La demanda principal es que encarcelen a los asesinos, además de que se denunciará la falta de disposición del Gobierno morenista que encabeza Evelyn Salgado Pineda, para entablar un diálogo y tener la certeza de que se vinculará y castigará a los responsables del crimen contra la familia de jóvenes antorchistas.
A partir del 25 de mayo, los antorchistas nos manifestaremos frente a Palacio Nacional en la misma hora de la conferencia mañanera del presidente, para solicitar ser escuchados; asimismo, realizaremos cadenas humanas en las capitales de los estados y una megamarcha el próximo 6 de junio en Chilpancingo, en la que participaremos antorchistas de todo el país para exigir justicia.
Es necesario lanzar un llamado a todos los mexicanos, víctimas de la violencia y la impunidad, para que conformemos un gran bloque que nos permita encontrar justicia pronta y expedita, sin normalizar la violencia y protestando por la pacificación de México.
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