El actual gobierno actual autonombrado la “Cuarta Transformación” se está volviendo una dictadura, un ejemplo muy claro de lo que digo, es el ataque en contra de los científicos; hace unos días, trascendió en los medios de comunicación la noticia de las denuncias hechas por la FGR en contra de 31 científicos e investigadores, académicos, y personal administrativo, pertenecientes al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), para aprehenderlos por delitos como delincuencia organizada, operación con recursos de procedencia ilícita y peculado. Por lo que se ve en nuestro país aplica: estar con la 4T o estar en su contra.
El Conacyt es un organismo público descentralizado del gobierno federal. Es la institución dedicada a promover el avance de la investigación científica, así como la innovación, el desarrollo y la modernización tecnológica de nuestro país. El trabajo de este organismo es la de estimular el trabajo científico, establecer políticas públicas en ciencia, tecnología e innovación, así como en las ciencias sociales. A través de este organismo se otorgan más de 85 mil becas, recursos para más de 30 mil investigadores que forman parte del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y que pertenecen a diversas instituciones del país.
Estas acciones tomadas por López Obrador en contra de la comunidad científica no tienen razón de ser, aunque el presidente remarque que los miembros tenían demasiada influencia sobre los gobiernos anteriores “Fue una especie de chantaje y había que darles estos fondos (...) Y cuando eso desapareció, esa extravagancia, esos lujos, ese desperdicio, se quejaron de que no estamos invirtiendo en ciencia, que no nos importa la innovación tecnológica”, pero eso es sólo una forma de justificar ante los creyentes de la 4T que la lucha contra la corrupción sigue a todos los niveles.
Esta persecución encarnizada en contra de la ciencia ha borrado del radar a la guerra contra el narcotráfico, problema que aqueja cada vez más a la sociedad, pues diario nos damos cuenta de algún enfrentamiento, una masacre o algún delito relacionado con este crimen en algún estado de nuestro país. El objetivo cambió y ahora los investigadores son más buscados que los sicarios, aunque son comparables (según el presidente) en los crímenes que cometen, mismo que son considerados graves y sin opción a fianza
Para el presidente, los científicos son peor que los narcotraficantes, de alto peligro que deben ser encarcelados en penales de máxima seguridad, mientras que los sicarios continúan libres y provocando terror en cada estado de nuestro país, a muchos se les olvida que, a personajes como Ovidio Guzmán, prefiere soltarlos, y perseguir a los divulgadores de la ciencia en México.
Este organismo descentralizado recibe una cantidad importante de recursos, mismos que el régimen autoritario de la “cuarta transformación” no está dispuesto a seguirles dando, prefiere destinarlos a sus caprichos, a las obras faraónicas y continuar con su campaña de compra de votos a través de los programas asistenciales.
De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, el anexo 12 correspondiente a Ciencia, Tecnología e Innovación, de no ser modificado, el aumento al Ramo 38 concerniente al Conacyt en términos reales es solo de un 7 por ciento. Pero, por ejemplo, en el caso de las universidades y en general todo el sistema público, prácticamente se queda igual, sólo se recupera la inflación, sobre todo las universidades estatales, tan solo crecen en 0.05%.
Existe un problema muy grave en estas instituciones, pues en los últimos 20 años la matrícula había crecido el doble, pero luego de la pandemia el ciclo 2020-2021 la matricula decrece, esto también es un reflejo de este rezago en inversión, pero, además, la desaparición de los Fondos de Concurso, instrumentos que permitían a las instituciones públicas presentar proyectos y obtener recursos para equipamiento o infraestructura. Hasta ahora no están los recursos que respondan a las necesidades.
Que no quepa duda de que los mexicanos nos enfrentamos a un gobierno autoritario, a una dictadura de la 4T. Las amenazas, la persecución, siguen siendo parte vital en la forma de gobernar de López Obrador; los académicos y científicos son los que ahora se ven amenazados, pero no son los primeros ni los únicos, en este proceso han pasado ya organizaciones, políticos, activistas, maestros, entre otros.
Por eso hoy cobra vigencia el llamado que hizo nuestra organización hace algún tiempo, a través del ingeniero Aquiles Córdova Morán, nuestro secretario general, a todos los intelectuales, investigadores, científicos, de este país, para que nos uniéramos al pueblo organizado, para luchar y defendernos, porque tarde o temprano llegaría la “justicia de la 4T”.
Pues ha llegado el momento de que los intelectuales, de la mano con el pueblo, formemos un frente para que dirigir a nuestro país a uno más justo, con avance tecnológico y científico que garantice una mejor calidad de vida para todos, priorizando la educación y el conocimiento como arma para la transformación.
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