El pasado mes de septiembre se anunció por parte del corporativo Uber, que esta iniciaría su operación en la entidad, hecho que provocó reacciones positivas y negativas por parte de la población. El gremio de los taxistas mostró preocupación ante la competencia que se antojaba en su perjuicio, mientras que los usuarios consideraban positiva la llegada de este servicio, con lo que crearían nuevas fuentes de empleo, así mismo el viaje sería más cómodo, rápido y en autos modernos, como sucedía en otras entidades del país.
Luis de Uriarte, director de Comunicación de Uber México y Caribe, explicó así el método de trabajo del corporativo: "lo que hacemos es que a quienes desean ser choferes de la empresa los convertimos en socios y reciben 75 por ciento del costo de los viajes y, por usar la aplicación, pagan a la empresa 25 por ciento".
Ante tal hecho –cómo se esperaba- los concesionarios del servicio de taxis iniciaron una serie de acciones de denuncia ante autoridades de tránsito para detener el considerado atropello y afectaciones a sus ingresos, que según han informado se han reducido hasta en un 50 %, con lo que el descontento social que se vive en Zacatecas ha alcanzado a este sector, donde incluso se han presentado ya algunos enfrentamientos, hasta el momento verbales y que se espera no lleguen a mayores problemas.
Los trasportistas concesionarios y por tanto regulados por el estado, consideran que es urgente legislar para regular el servicio de transporte de Uber, para que estos últimos tengan los mismos derechos y obligaciones y para ello deben concursar para lograr una concesión y operar de manera regular, lo que garantizará también seguridad para los usuarios y para los conductores de unidades de la novedosa empresa.
En ése contexto, el Movimiento Independiente de Taxistas, presentó un amparo contra la Ley de Tránsito del estado, con la finalidad de que se regule e incluya a Uber a la figura jurídica y han pedido la intervención de la LXII legislatura para que creen reglamentos con los que se pongan límites a la operación ilegal de la empresa en el estado, ya que es mayor el incremento de unidades Uber que operan en la demarcación, lo que ha generado indicios de enfrentamientos entre conductores de unidades de servicio público y la nueva empresa moderna en cuanto a tecnología y vehículos en servicio y que según los mismo taxistas si está afectando ya a sus ingresos.
Está por demás decir que el servicio del taxi tradicional se caracterizó por el uso de unidades motrices pequeñas, económicas en su mantenimiento y con bajo consumo de combustible, sin embargo, las tarifas aplicadas han sido muy altas en comparación de entidades vecinas en Zacatecas, se ha criticado que el banderazo es de 10 pesos; es decir, apenas abordas la unidad y ya debes esa cantidad, lo que ocasionaba un servicio caro. La otra queja recurrente fue durante mucho tiempo que operadores no usaban el taxímetro, sin embargo, con el citado dispositivo o sin él, el usuario debe aún desembolsar una importante suma para pagar por el servicio prestado.
En respuesta a la competencia con la empresa de servicio de transporte privado Uber, taxistas de la entidad asisten a cursos de capacitación como parte de una estrategia para mejorar el servicio, la atención al cliente, además de mejorar la limpieza y restaurar las unidades. Posteriormente usarán una aplicación diseñada por egresados del Instituto Politécnico Nacional (IPN), para modernizar el servicio que ofrecen y volverlo competitivo, tratando de emular el sistema que ofrece su competencia: Uber.
Por eso, la llegada de la empresa francesa a Zacatecas sigue causando revuelo entre la población que usa la tecnología para este propósito, que según su página de internet lleva ya "mil millones de conexiones y la cifra sigue aumentando".
Aunque el servicio del taxi tradicional no desaparecerá, lo cierto es que la empresa Uber llegó, se expande y se quedará en Zacatecas como ha ocurrido con tiendas departamentales extranjeras, a las que en su momento la gente se ha opuso a su instalación, pero nada ha podido hacerse para evitarlas debido a que el mismo gobierno promueve su llegada ofreciendo para ello mano de obra a bajo costo, terrenos apropiados y con servicios, bien comunicados y todo lo necesario para que las empresas exploten todo recurso disponible a cambio de empleos mal pagados, pero necesarios para la entidad receptora. Este es el caso de Zacatecas y la instalación de Uber no será la excepción.
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