Muchos son los problemas sociales que tienen que enfrentar los tacambarenses y pocas son las soluciones reales que da el estado.En los días que corren, la inseguridad, el desempleo, la marginación y los virus del dengue y covid-19 han incrementado, alejando con ellos las oportunidades reales de vivir plenamente en la sociedad, a esto se suma la incapacidad de los gobiernos local y federal a solucionar los problemas sociales de sus gobernados.
Al día de hoy los habitantes de Tacámbaro tienen que enfrentar la doble tragedia de ser pobres y padecer enfermedades como el dengue y covid-19.Ahora hay más enfermedad.En las dos últimas semanas en las colonias La Antorcha, La Golondrina en sus tres etapas, Los Llanos, El Aile, Centro, Joya de Cuinio, El Ejido J.Alcaraz y Los Zapotes de Tacámbaro, se han registrado muchos casos de enfermos por de dengue, en las dos últimas semanas alrededor de la casa donde vive su servidor, hubo más de 20 casos y familias completas que padecieron esta enfermedad.Lo asombroso de esta situación es que la mayoría de las personas no se atienden medicamente, entre ellas se platican y comparten remedios caseros, tratamientos con yerbas y remedios caseros para tomar y bañarse con esa agua para disminuir la comezón generada por el sarpullido.Este año esta situación en la región fue muy dura, a principios del periodo de lluvias se registraron brotes de dengue en Etúcuaro, donde incluso murió un niño de dos años, en La Nueva Jerusalén, Puruarán y Pedernales entre otras comunidades y de manera tardía ahora aquí en la cabera municipal.
En años anteriores se veía al personal de la Secretaría de Salud, visitando hogares, instalando trampas para los mosquitos, fumigando, etc., este año no hubo nada de eso, todo lo que se ha hecho para atender este problema es hasta ahora, en la parte crítica y final de la enfermedad, por otro lado se calcula que entre medicamento, análisis de laboratorio y consulta se gastan mil doscientos pesos, por enfermo, no todas las familias tienen dinero para pagarlos y por eso han tenido que dejar las enfermedad pase sin atenderse o tratándose con recetas caseras.
Aparentemente la pandemia ha avanzada lentamente, sin embargo, no se ha detenido en ningún municipio.En Tacámbaro van 210 casos confirmados y 32 fallecidos, en Turicato llegó a 35 casos de enfermos y el municipio de Madero continuó igual con 43, el hecho de que sean pocos no significa que no haya Covid-19 o que no se propague, sino que estas cifras oficiales están marcadas por la negativa de las personas a ir a los hospitales a diagnosticarse y atenderse clínicamente.
Durante la semana se dio a conocer que Dr.Ricardo Rico Montes, doctor general que trabajaba en el Hospital general de Tacámbaro "María Zendejas" murió contagiado por Covid-19, pero que además sin que el director general le autorizara atenderse, se dice que lo obligaron a seguir trabajando hasta el final, el hospital tiene 30 camas de las cuales 5 son para atender a pacientes covid y de éstas sólo dos tienen respiradores.
Hasta donde se sabe el hospital general "María Zendejas" no es un hospital para Covid, al director general le enviaron un oficio con la indicación de que atendieran a los contagiados, pero el trabajo lo están haciendo en muy malas condiciones, tienen cinco camas, pero sin divisiones, se sabe que tienen a un enfermo grave de Covid-19 a un lado de uno no confirmado, pero además solo se tienen dos respiradores.El doctor Rico murió por Coronavirus, en parte debido a que, en el hospital, le negaron el permiso para retirarse del trabajo mientras se atendía, con el argumento de que habría que esperar el resultado de su prueba, cuando llegó ya no se puedo hacer mucho y el doctor era un doctor general de 42 años de edad que atendía a los enfermos de coronavirus.Por si fuera poco, el personal que queda laborando no cuenta con los materiales e insumos necesarios para la correcta atención médica, o lo poco que tienen es desechable y de muy mala calidad.Esta situación es del conocimiento de las autoridades correspondientes y no han tenido mucho menos solución.
A esta situación se viene a sumar que el gobierno municipal de Tacámbaro está negando el apoyo económico a través de una beca para nueve maestros que trabajan en la escuela primaria "Rafael Ramírez" y escuela secundaria "Manuel Serrano Vallejo", ojo.Se trata de una beca mensual de 2,800 pesos y no de un salario quincenal de 4,500, lo niegan con el argumento de que "no hay consenso".
La situación económica de las familias en la región sigue siendo muy complicada, si hay trabajo, pero no se han recuperado completamente las ventas, uno de los vendedores de boletos de autobús en Villa Madero, dice que poco a poco se ha ido recuperando la venta de boletos, que la gente ya empieza a salir pero que todavía son muy bajas.Las ventas de mezcal, se han ido recuperando, pero todavía son bajas, en la resina continúa el problema de que se compra poca y muy barata.En Tacámbaro, la situación es similar, ya para estos días terminó el corte de jitomate, ahora hay trabajo en la zarzamora y el aguacate, pero en lugares como la cabecera municipal, la tenencia Paso de Morelos o la tenencia Chupio, se ve todo muy escueto, no sale la gente, compran poco, se ve en las bolsas que cargan con mandado.
Es impresionante el grado de insensibilidad de los gobiernos locales y el gobierno de México, para dejar que sus gobernados vivan y mueran entre la enfermedad y la pobreza, que gran tragedia. El pueblo está conmocionado e inconforme y tal parece que se están reuniendo las condiciones objetivas para una revolución social del pueblo de México, una revolución que luche por la verdadera libertad y la justicia social, por empleos con salarios bien remunerados y una reorientación social del gasto público, destinado a un programa nacional de entrega de alimentos, medicamentos, internet gratuito y las obras más sentidas de los pueblos y colonias.
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