Puebla. El clima de inestabilidad política en el municipio de Ocoyucan es permanente.Pese a las diversas y retiradas denuncias que han hechos los pobladores ante las Secretaría General de Gobierno (SGG), que encabeza Diódoro Carrasco Altamirano, y al Congreso Local, particularmente a la Junta de Gobierno, solicitando la destitución del presidente municipal, Francisco Simarrón Ocotoxtle, la situación continúa estancada ante el nulo actuar de las autoridades estatales.
Los principales motivos por los que la población ha solicitado, desde hace ya más de un año, que Simarrón Ocotoxtle sea removido del cargo son desvío de recurso, obras fantasma, nepotismo, enriquecimiento ilícito, despidos injustificados y represión contra sus opositores.A esto, se suma la voz de los estudiantes y docentes, quienes también resultan afectados por la mala administración del edil.
De acuerdo con la regidora de educación, Socorro Montes Mones, en el municipio no se ha apoyado al sector educativo, y las escuelas continúan en rezago ante la falta de incentivos y acciones concretas que permitan desarrollar las condiciones materiales para brindar a los estudiantes una mejor educación.
Montes Mones criticó la intención del munícipe de pretender construir una universidad en la cabecera municipal "cuando las pocas escuelas hay presentan gran deterioro y requieren de apoyo inmediato.Primero se debe fortalecer la educación en las escuelas existentes, equiparlas con lo que les hace falta, y posteriormente ampliar la cadena educativa".
En el municipio existen ocho preescolares, siete primarias, cinco secundarias técnicas, cinco telesecundarias y cuatro bachilleratos.Todas las instituciones presentan carencias que van desde remodelación de aulas hasta construcción de módulos sanitarios, salones y servicios básicos.
De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), tan sólo en la junta auxiliar de Santa María Malacatepec, de los tres mil 885 habitantes, el 18.5 por ciento de la población mayor de 15 años es analfabeta; el 60.2 cuenta con educación básica trunca; y el 5.2 de la población entre 6 y 14 años no asiste a la escuela.
Las escuelas en total abandono
El Bachillerato General Oficial "Francisco Villa" sólo cuenta con tres aulas, lo que ha impedido que la matrícula actual de 114 estudiantes incremente.A esto se suma que los salones presentan desperfectos, como cuarteaduras en techo y paredes; en temporada de lluvias la filtración del agua se vuelve un problema primordial; sin embargo, ni en la pasada administración, encabezada por José Cuatle Varela (2011-2014), ni en lo que va de la actual que comenzó en 2014, se ha apoyado a la escuela "con ese tipo de nimiedades", explicó el director de la institución educativa, Adán Luna.
Ante la falta de infraestructura, los alumnos toman clases en una bodega que ocupan como aula provisional, misma que, cuando era propiedad del Comisariado Ejidal, se ocupada como almacén de maíz.
Adán Luna agregó que han solicitado apoyo a Simarrón Ocotoxtle, empero, la respuesta ha sido nula.Dentro de las demandas de este bachillerato destaca la construcción de una barda perimetral, módulo sanitario, la construcción de un aula y equipo de cómputo.
Otro caso similar es la Escuela Secundaria Técnica No 110, donde 207 alumnos son azotados con el desdén gubernamental y carecen de laboratorio de ciencias, aulas, y energía eléctrica, entre otras cosas.
La institución cuenta con taller de computación, aunque el equipo es insuficiente, pues tiene sólo 15 computadoras para 50 alumnos, es decir, en promedio son tres los alumnos que los que tienen que hacer uso del equipo al mismo tiempo; aquí también existen aulas deterioradas a las que no se les ha dado mantenimiento, y el techado de la plaza cívica parece ser una demanda que no será atendida.
A principio del año en curso, la institución intentó ingresar al ayuntamiento la solicitud de apoyo para que se les dotara de instrumentos para la banda de guerra oficial: 12 cornetas, 12 cajas y dos aviones; pero el presidente municipal se negó a recibir el oficio, por lo que después de varios intentos, y ante la negativa constante, la regidora de educación fue quien les recibió la petición.
"El 15 de febrero se entregó el oficio.Pasaron varios días y no había respuesta alguna; todos los días asistía a las oficinas del presidente pero nunca lo encontraba, aunque en ocasiones lo veía entrar o salir.Su secretaria aseguraba que estaba muy ocupado atendiendo otros problemas y que, por tanto, no me podía recibir.Tuvieron que sumarse a la gestión los padres de familia y los alumnos; ya no iba sola.Acudíamos todos juntos todos los días, de lunes a viernes, y al cabo de dos meses, el ayuntamiento entregó tan sólo la mitad de lo solicitado por la escuela.Tuvieron que pasar tres meses más de gestión intensa para que pudiera completar el total de los instrumentos.A la par, se había solicitado un trasformador para dotar de energía eléctrica a la escuela y el techado de la plaza, pero nos dijeron que con los instrumentos ya nos habían apoyado mucho", relató Ana Silvia Báez Rendón, docentes de la Técnica No.110.
Cuando la institución solicitó apoyo para cubrir el sueldo de los cinco docentes que trabajan en esta secundaria, la administración municipal aseguró que no dispone de recursos suficientes; en contraste, el edil percibe un sueldo mensual de 80 mil pesos, y su esposa Jovita Romero Morales, quien funge presidenta del patronato del Sistema Municipal para el DIF, percibe 45 mil pesos mensuales por su "participación voluntaria".
En el año 2014, Francisco Simarrón prestó dinero del erario, en por lo menos dos veces, al regidor de Gobernación, César Cólotl Montes.La primera ocasión que recibió dinero de las participaciones federales que correspondían ese año, fue el dos de abril de ese año a través de un cheque del banco BBVA Bancomer, con número de folio 59342249, a nombre de César Cólotl Montes por la cantidad de 250 mil pesos, mientras que el segundo préstamo se realizó a los pocos días, prueba de ello es el documento bancario de BBVA Bancomer fechado el 8 de abril de 2014 con el folio 46651954, a nombre, nuevamente, de César Cólotl Montes.
Mientras tanto, los padres de familia de la Técnica No 110, son quienes a través de cooperaciones pagan el sueldo de tres docentes, y el de los otros dos se cubre con los ingresos de la cooperativa escolar.
Estudiantes se suman a la lucha
En el más de un año que lleva la lucha de Ocoyucan, los pobladores han diversas y constantes denuncias públicas para dar a conocer a la ciudadanía la negligencias de la actual administración estatal –de extracción panista,para intervenir y resolver el conflicto.Sin embargo, las autoridades no se inmutan.Los vecinos han realizado cadenas humanas frente a Casa Aguayo, sede de la Secretaría General de Gobierno y del Congreso Local.En este último recinto, se bloqueó una vez la denuncia pacífica de los pobladores; el 26 de febrero un destacamento de la policía municipal impidió que un grupo de manifestantes de Ocoyucan llegara al Congreso de Puebla, en donde realizarían una cadena humana para exigir la destitución de Simarrón Ocotoxtle.La valla de policías se apostó sobre la calle 5 Poniente, impidiendo el tránsito de vehículos y personas entre las calles 3 Sur y 16 de Septiembre.
Sin embargo, este tipo de acciones de denuncia no han sido exclusivas de los pobladores, los estudiantes también han denunciado públicamente el abandono a la educación en Ocoyucan.A mediados del mes de marzo, alumnos de varias escuelas de Ocoyucan se manifestaron frente a la Secretaría General de Gobierno de Puebla para denunciar el abandono al sector educativo por parte de la actual administración municipal, que encabeza el edil Francisco Simarrón Ocotoxtle.
Los estudiantes denunciaron que en las escuelas carecen de las condiciones adecuadas para que los jóvenes puedan desarrollar sus actividades académicas, culturales, deportivas y cívicas.Explicaron que ante la falta de apoyo por parte del gobierno municipal y demás dependencias responsables como la Secretaría de Educación Pública y el Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (CAPCEE), los propios alumnos han tenido que impulsar y desarrollar actividades económicas para solventar algunos gastos.
"Desde que llegó Francisco Simarrón, le hemos solicitado apoyo para la educación pero no nos ha apoyado en nada, ni siquiera ha sido gestor, por el contrario, se queda con el recurso público a través del elevado salario que tiene él y su esposa", explicó Adela Lara Garista, estudiante del Bachillerato "Francisco Villa".
"En Ocoyucan no se le apuesta a la educación.Hay mucho atraso social, y eso sólo se resuelve invirtiéndole a la educación, pero en Ocoyucan no pasa eso, el presidente municipal no hace ninguna labor en beneficio de la educación".
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