Hoy, 6 de junio de 2023, el Movimiento Antorchista Nacional movilizará a miles de antorchistas de todo el país para conmemorar, en la ciudad de Chilpancingo, Guerrero, el día de los “Mártires antorchistas”. Casi siempre este evento lo realizamos en Tecomatlán. ¿Por qué ahora no? Vamos a Guerrero a exigir, una vez más, justicia ante el asesinato de dos líderes antorchistas, Conrado Hernández y Mercedes Martínez, y de su pequeño hijo. Los tres fueron asesinados la tarde del 12 de abril de 2023, a las afueras de Chilpancingo.
Desde el mismo día del crimen, nuestra organización exigió una investigación seria sobre el triple asesinato para que, de manera rápida, se encontrara a los autores intelectuales y materiales. En ese sentido, comenzamos con las reuniones necesarias ante el gobierno del estado, con la fiscal del estado y con la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, para pedirle rapidez en la investigación del crimen. No pedimos nada más que lo que cualquier mexicano con víctimas de homicidio o cualquier crimen puede pedir. Tampoco pedimos más que lo que la justicia del estado debe otorgarle a cada familiar o amigo de las víctimas. Es decir, una vez que han asesinado a nuestros compañeros, exigimos justicia. Y nada más.
Estamos seguros de que el crimen no fue una casualidad del destino, ni una equivocación de los sicarios. No, claro que no. Lo escribió en su primer artículo sobre el problema el coordinador de la Dirección Nacional del Movimiento Antorchista, Omar Carreón Abud: a Conrado y a Mercedes los mataron por antorchistas. Los autores intelectuales del crimen quieren aterrorizar al antorchismo guerrerense, como el que se ha impuesto en estados completos. No queremos más muertos, pero sí exigimos justicia ante este inhumano asesinato de dos jóvenes y un niño que no tenía ni seis años.
Por eso, una representación del antorchismo nacional, de todos los estados del país y de la Ciudad de México, acude a Guerrero. Vamos a pedir justicia. Vamos a exigir justicia. Vamos a exigir cárcel para los sicarios. No seremos un número más en la larga lista de asesinatos en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, que ha superado, con mucho, a todos los presidentes que lo antecedieron. Desde que tomó el poder se han asesinado a sangre fría, y contado (porque hay miles o decenas de miles que no se cuentan porque están “desaparecidos”), a más de 156 mil 136 personas.
Ante estas cifras, el presidente se burla y dice: “Ahora nos dicen ‘qué barbaridad’, el gobierno de ahora es el gobierno que tiene más homicidios”. No dice que “tiene otros datos”. No, claro que no. No se puede ocultar la muerte, el crimen, las masacres, los pueblos tomados por los jefes de los sicarios, los millones de mexicanos aterrorizados ante grupos criminales a los que el gobierno no les hace ni cosquillas.
¿Qué dice Antorcha? Es hora de que el pueblo inicie una lucha para exigir justicia. Es hora de que el gobierno diga si puede o no puede darnos seguridad. Si no puede, que renuncie, como dijo un político hace años. Después, cuando el proletariado tome el poder del país, sabrá cómo resolver definitivamente el problema: acabando con la pobreza, porque habrá trabajo para todos. Mientras tanto, a luchar por justicia en Guerrero. Nos vemos en Chilpancingo. Que nadie falte, porque: “Por todos los caídos, nosotros estamos de pie”.
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