Hechos valen más que mil palabras. Reza el refrán, y en estos duros momentos que vivimos los mexicanos por los efectos de la pandemia del coronavirus de la cual se suman más de un millón de contagiados y más de 110 mil muertes en nuestro país, por el mal manejo de la política de salud por parte del gobierno de Morena, por los desastrosos problemas económicos en México de los cuales cerramos este año con una caída del -8% del Producto Interno Bruto (PIB), y entre otras calamidades, el desempleo que suman a los 12 millones de parados; ante la falta de respuesta de los distintos niveles de gobierno a las necesidades apremiantes de la población, los integrantes del Movimiento Antorchista hemos salido a las calles dar auxilio y apoyo a los sectores más vulnerables.
Cuando se impuso la medida de "quédate en casa&rdquo, para evitar los riesgos de contagio de la covid-19 los antorchistas de todo el país, nos vimos obligados a salir en defensa de millones de familias que se quedaron sin empleo y sin sustento para llevar el pan a la casa, y exigimos a los tres niveles de gobierno, un plan alimentario para atender el sustento de las familias que no contaban con lo indispensable para sobrevivir, de igual manera, solicitamos a las diversas instancias de salud, se atendiera a los enfermos –con problemas de cáncer, diabetes, renales o del corazón– ante la falta de atención médica en los diversos centros hospitalarios, porque se daba prioridad a los enfermos del coronavirus.
En todo momento, los antorchistas con hechos, hemos estado al frente enarbolando de las demandas y necesidades de la gente, a diferencia de varios gobernantes en diversas entidades del país, que se escondieron y no dieron la cara a los reclamos de sus conciudadanos, entre estos gobernantes, el mandatario del estado de Tabasco Adán Augusto López Hernández, que ha dejado prácticamente en el abandono a sus paisanos, que llevan semanas con el agua hasta el cuello, derivado de las inundaciones en su tierra; que les afectó sus viviendas, sus cosechas, animales y les destruyó sus muebles, y lo más grave, es que se quedaron sin sustento para llevar el alimento a sus hogares, ante la imposibilidad de ir a trabajar. El propio mandatario de la nación Andrés Manuel López Obrador en las pocas ocasiones que ha ido a aquella entidad –de la que es nativo- para ver la situación en que sobreviven sus paisanos, sólo ha sido para burlarse y cínicamente decir, que fue decisión de su gobierno desfogar el agua de las presas de Tabasco para que el agua se fuera hacia las zonas más pobres de aquel lugar, "a confesión de parte, relevo de prueba”; es decir al Gobierno federal poco le importa la suerte de los tabasqueños.
Por la difícil situación de precariedad y de abandono en que sobreviven cientos de miles de tabasqueños, el Movimiento Antorchista convocó a una campaña nacional de acopio de víveres –alimentos no perecederos, agua, medicinas y material de limpieza– ropa y calzado, para entregarlo a las familias tabasqueñas en desgracia. Los antorchistas potosinos también estamos participando en la colecta de víveres, entregándolos en el centro de acopio ubicado en la Casa de Estudiantes José Martí, ubicada en la calle Plan de Guadalupe No. 245, Barrio de Santiago. Y este domingo se convocó a la ciudadanía potosina a participar de esta noble causa, de tal manera que se citó a los voluntarios de esta campaña de recolección en la Plaza de Armas, para que informaran de su loable actividad. En este evento festivo, donde asistió el diputado federal, Lenin Campos Córdova y dirigente estatal antorchista, destacó la cooperación y solidaridad de mis compañeros, y lo celebraron con una presentación de los grupos culturales de Antorcha en la plaza principal.
Felicito a mis compañeros antorchistas por esta actividad altruista y de solidaridad y por su alegría y emoción que les ponen a sus actividades, siempre a favor de los más desprotegidos.
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