MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Los migrantes muertos en el gobierno de AMLO

image

Andrés Manuel López Obrador llegó el pasado viernes 31 de marzo a Ciudad Juárez, Chihuahua, lugar de la terrible tragedia sucedida el martes 27 del mismo mes, en el Instituto Nacional de Migración de México (INM), en el que murieron por quemaduras y asfixia 39 migrantes y 27 más resultaron con lesiones graves, por lo que aún se debaten entre la vida y la muerte.

Como nos enteramos, a través de los medios de comunicación, no llegó a investigar, ni a proponer sanciones con procedimientos judiciales contra los funcionarios responsables que forman parte de sus gabinete, como su hermano y paisano, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien tiene a su cargo el INM, a algún funcionario de alto nivel de este instituto o anunciar, siquiera, el retiro de sus cargos mientras se hacen las investigaciones. No, de ninguna manera, llegó a esa ciudad para tratar asuntos relacionados con los programas sociales, con los beneficiarios del Bienestar, su fuerte, para calmar y continuar manipulando a la población empobrecida.

Dicho evento se realizó a puerta cerrada en el gimnasio del Colegio de Bachilleres, sin acceso a los medios de comunicación, sólo con la presencia de Juan Carlos Loera de la Rosa, delegado de Bienestar en la entidad y las personas que trabajan en esta dependencia del Banco Bienestar y los Siervos de la Nación, entre otros empleados de Morena. 

En tiempos normales, es decir, en la campaña electoral de 18 años en la que AMLO fue candidato, más los que lleva en campaña como presidente, es una más de las violaciones que comete, pero ahora con un escenario desgarrador, de sufrimiento para las familias qué obligadamente tienen que cruzar el territorio nacional para llegar a los Estados Unidos, en busca del sueño americano, igual que como muchos de nuestros paisanos.

Ni la muerte ni la hospitalización de los lesionados graves, sensibilizó al escurridizo y demagogo presidente, por el contrario, como vio en sus mañaneras, culpó a los migrantes del incendio ocurrido en la Oficina del Instituto Nacional de Migración. Manipulador como es, dijo: “Me ha dolido mucho, me ha dañado, este acontecimiento me partió el alma”, pero rechazó escuchar la petición de justicia de los migrantes que intentaron acercarse a él.

Tras el arresto de 71 migrantes en las calles de Ciudad Juárez, los mantuvieron encarcelados para ser deportados a su país de origen. Con el transcurrir de los días, se ha aclarado que la inconformidad y el incendio inició como protesta de uno los migrantes presos, en su desesperación, por la falta atenciones humanitarias por parte del INM, al no contar con alimentos, agua, camas, y un solo baño para todos quienes permanecían encerrados en el galerón de migración. 

La desesperación creció y se agregó la ineficiencia del personal de migración que a la hora del incendio se alejó en lugar de abrir las puertas para que salieran las personas, provocando la muerte por fuego y por asfixia. Se podría concluir que el incendio fue provocado por los migrantes y rematado por el personal del Instituto de Migración. 

Sin embargo, la tragedia muestra la ciega obediencia del gobierno de la 4T, encabezada por López Obrador, al gobierno de los Estados Unidos en lo referente a migración. De acuerdo con el documento: Estadísticas Migratorias, Síntesis 2022, durante ese año ingresaron a México cerca de 40 millones de personas nacionales y extranjeras, que representa un incremento de 54.9 por ciento de arribos al país, que debe recibir en los estados fronterizos en lo que concluyen sus trámites para ser aceptados en el país del norte, siendo Quintana Roo, la entidad con más ingresos, con 15 millones 590 mil personas.

Ante esta situación, el gobierno, especialmente la Secretaría de Gobernación debería contar con las condiciones necesarias para brindarles protección y ayuda a los migrantes, y evitar desenlaces como el ocurrido. 

Pero en lugar de ello, su titular, Adán Augusto López se lava las manos culpando a empleados de último nivel como siempre, para no cargar con la tragedia que mancha su candidatura a la presidencia de la república. Y el mismo López Obrador  prefirió realizar el evento con los empleados de Bienestar en lugar atender los reclamos de los migrantes. Quienes no se aplican la ley no sólo no son iguales sino peores que los corruptos y conservadores del pasado.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más