La producción de maíz en nuestro país, representa históricamente un alimento considerado básico en la dieta de los pueblos indígenas antes de la conquista de nuestro territorio por los españoles y hasta la fecha por la sociedad mexicana; además, es considerado estratégico porque contribuye en el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria en el consumo humano, tanto del maíz blanco como el amarillo; de ambos se obtienen subproductos importantes en la producción industrial en la actualidad, tales como la producción de harinas, aceites, jarabes, así como el bioetanol.
1 Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), en 2022, la producción nacional de maíz amarillo, de 3 millones 183 mil toneladas, fue 20% menor a la demanda para consumo humano, autoconsumo e industria almidonera (que ascendió a 4 millones 17 mil toneladas).
Es importante conocer los rendimientos por tonelada estimados por el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas que reportan rendimientos estancados desde 2017 en México, y que “no permite el uso de la biotecnología, ni brinda apoyos suficientes más allá de los destinados al fertilizante y a los programas asistencialistas”, el rendimiento en México fue de 3.8 ton./ha. En el 2021, el 35 por ciento por debajo del promedio mundial de maíz que fue de 5.9 ton/ha. Precisa que las importaciones de maíz para 2022 fueron de 45 millones 741 000 ton. Que representaron el 44% para consumo humano y 56 por ciento para consumo no humano. De esta situación México importa maíz transgénico para el ganado y para la producción de agroalimentos.
El periódico Milenio, en su nota del 28 de marzo de 2023 informó que las importaciones de maíz en México rompieron récord en el primer bimestre de 2023, 21.6 por ciento más que lo registrado el año anterior (pasaron de 2 mil 893 ton. a 3 mil 519 ton. mientras que la producción descendió 18 por ciento en la superficie cosechada).
El diario El Economista, con fecha 21 de mayo de 2023, publicó que si el Gobierno federal deja que la caída de los precios del maíz y trigo causen la quiebra de los productores en los estados con agricultura comercial, se generará un efecto dominó que afecta a las economías de esas entidades, dado que ésta tiene una connotacióneconómica, política y social.
Recordemos que productores de maíz y trigo de Sinaloa, Sonora, Baja California iniciaron una serie de manifestaciones para fijar un precio de garantía de 7 000 pesos/ton. de maíz y 8000 pesos/ton. de trigo. De esta problemática como solución pactada entre autoridades federal (Segalmex) y estatal (Secretaría de Agricultura y Ganadería del Gobierno del Estado) con los productores de hasta 10 hectáreas y hasta 50 hectáreas, ante la ola de protestas en el estado de Sinaloa logran definir un precio de garantía de 6 965 pesos la tonelada de maíz, ante esto el gobierno federal pide, desde Palacio Nacional, a los grandes comercializadores “lo que yo quiero es que se sometan. No les vamos a pedir favores a los grandes compradores”; aunado a esto, pide a la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro a cancelar la importación de maíz si los grandes compradores pagan a 4000 pesos la tonelada de maíz imponiéndose un arancel de 4000 pesos para que terminen pagando un total de 8000 pesos la tonelada.
Derivado de esta problemática en torno a la producción y comercialización de maíz que afecta a los productores mexicanos, es conveniente reflexionar en qué medida es conveniente prohibir la importación de granos sobre todo cuando se mantienen tratados comerciales (T-MEC) con los grandes productores de Estados Unidos sobre maíz genéticamente modificado. En este tratado se establecen obligaciones comerciales con los socios y se prohíben las restricciones a la importación, ya que estas, no están basados en la ciencia y amenazan con perturbar las exportaciones estadounidenses, esto es violar a capricho lo establecido en un tratado internacional, aunado a esto recordemos que se tiene abierta una controversia por cuestiones energéticas a la que se sumó Canadá, asegurando que México no debe favorecer a las empresas estatales de electricidad y petróleo frente a la competencia estadounidense.
AP News, el 2 de junio de 2023 publicó que México emitió un decreto para prohibir la importación de maíz modificado genéticamente para consumo humano y posteriormente para consumo animal y de uso industrial para la alimentación humana, el secretario de agricultura estadounidense Tom Vilsack se manifiesta en desacuerdo y ejercerán sus derechos desde el T-MEC.
Por su parte, la Secretaría de Economía dijo que la transición se dará gradual y sosteniblemente fortaleciendo la competitividad y la productividad del campo mexicano en pleno respeto a los compromisos internacionales suscritos por México.
El actual gobierno de la 4T, en aras de su proyecto de nación en el que asegura favorecer a los que menos tienen y a fortalecer al campo mexicano debe mostrar tener un proyecto claro para beneficiarlo, sacarlo del atraso creando las condiciones propicias para su producción, capitalizarlo y mejorar la competitividad, todo esto está ausente en sus políticas públicas del actual gobierno, por el contrario lo ignora e improvisa en sus acciones, se olvida de la infraestructura que requiere este sector para atender la demanda interna de alimentos.
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