En Morelos cerramos una semana más con noticias nada alentadoras respecto a la pandemia, llegamos a 658 muertes por covid-19, lo más preocupante es que en los últimos cinco días se acumularon 221 muertes, es decir el 30 por ciento de lo que se ha acumulado en los tres meses que llevamos de confinamiento. Si a esto agregamos que el índice de mortalidad se ha incrementado al 49 por ciento, es decir de cada dos pacientes que entran a los hospitales uno muere. Así, por donde quiera que se le vea, la situación por la pandemia se nos presenta de manera desgarradora, verdaderamente trágica, de la que no escapa tampoco el personal médico, pues ya cobró la vida de 21 elementos, como consecuencia de la falta de equipo seguro que reduzca al mínimo los contagios.
Por su parte, las autoridades de salud declaran que existen camas disponibles para atender pacientes; sin embargo, mientas la CDMX tienen 2.01 camas por cada mil habitantes, Morelos apenas tiene 0.80 o sea ni una cama; además señalan que hay cupo suficiente para atender enfermos, pero da la casualidad que los enfermos no alcanzan a llegar a la etapa de emergencia porque se mueren antes de ser atendidos. Cabe recordar que Morelos es uno de los estados que permanece en semáforo rojo, para ser exactos en "alerta máxima", según palabras del Secretario de Salud Cantú Cuevas; los datos ya mencionados no dejan lugar a dudas de que el término empleado no resulta exagerado pero las acciones del gobierno van en sentido contrario, contra toda lógica y sentido común. Veamos.
En primer lugar, lo que más preocupa y desconcierta, es que, a pesar de estar en la etapa máxima de contagios, justo cuando las medidas de confinamiento debieran ser más estrictas, ahora es cuando hay mayor movilidad de personas en la calle, lo que trae como consecuencia el aumento natural de contagios y muertes. En este sentido es revelador que a partir del 1 de junio, fecha en que el presidente de la república inició sus giras por el país, a pesar de que el subsecretario de salud Hugo López-Gatell continuaba con sus recomendaciones de permanecer en casa, el mal ejemplo lo puso el propio jefe del ejecutivo, así que la gente hizo exactamente lo mismo, no se quedó en casa y los resultados están a la vista, a tres semanas del reinicio de las giras presidenciales se incrementó considerablemente la movilidad, con el consiguiente aumento de contagios y muertes por covid-19. Sin embargo, en el fondo, la verdadera explicación de por qué la gente sale de sus hogares no es tan difícil dar con ella: busca trabajo, algún empleo para hacerse llegar de algún ingreso económico y mitigar así la necesidad de alimento, para cubrir gastos de luz, agua, renta, etc., máxime que el Gobierno federal y estatal se han negado en redondo a implementar un programa de alimentación que resuelva en alguna forma las carencias de millones de mexicanos, producto de las medidas que ellos mismos han decretado. Por consiguiente, la gente sale por necesidad de llevar el pan de cada día a su familia.
En segundo lugar, lo más grave de todo es que lo peor de la pandemia aún no llega, la misma OMS (Organización Mundial de la Salud) lo ha dicho, lo cual quiere decir que debemos esperar más aumentos de muertes y contagios del virus letal; y, como consecuencia natural, la crisis económica, el aumento del desempleo y la pobreza. En ese tenor declaraciones de miembros del Consejo Coordinador Empresarial de Morelos sostienen que cerca del 62 por ciento de los negocios podrían cerrar definitivamente por falta de financiamiento para subsistir, lo que prueba que no será sencillo ni rápido salir de esta crisis, pues muchos de los trabajadores que perdieron su empleo ya no lo recuperarán y caerán en las filas del ejército de desempleados; de igual manera el líder de los comerciantes tolerados mejor conocidos como ambulantes del centro histórico, se lamentan de que el ayuntamiento de Cuernavaca les está prohibiendo que salgan a vender, lo que afecta a cerca de 700 en el centro y probablemente unos tres mil de toda la ciudad, mismos que se ven obligados a salir a las calles a ofrecer sus productos, o de lo contrario no tendrán que llevarles de comer a sus familias.
De manera oficial el gobierno que encabeza Cuauhtémoc Blanco, dice que no es tiempo de reabrir la economía, sin embargo, por la vía del hecho el movimiento en las calles está dado y es incontenible. Y no podía ser de otra manera sin un seguro de empleo, sin apoyos alimenticios de forma periódica que satisfagan el hambre, sin empleo fijo al jefe de familia no le queda otra alternativa que salir a la calle. El panorama en este sentido tampoco es tan claro, simplemente no se ve la luz al final del túnel, los analistas en economía mencionan que la recuperación económica no será tan rápida, que esto apenas inicia y no se nota que desde el gobierno federal se trace una alternativa viable para los millones de pobres.
Ante este panorama, ¿Qué debemos hacer los mexicanos? El llamado está hecho, la unidad de todos los sectores progresistas ahora es más necesario que nunca para cambiar el rumbo del país, los mexicanos de bien debemos unirnos en un solo frente y no dejar que los gobernantes nos sigan mintiendo ni regateando los apoyos a los más necesitados. Cuando no hay control de la pandemia, cuando se hunde la economía y aumenta el desempleo y la pobreza, cuando el aumento de la violencia está a la orden del día y el desafío del crimen organizado es un problema serio, cuando, en fin, la gente no tiene para comer y los programas estrella del gobierno morenista nomás no surten efecto, en estas difíciles sinsustancias por las que atraviesa nuestro país se impone la necesidad de mirar por el bien común de la nación entera. Hacemos un llamado a que juntos; construyamos un nuevo proyecto de país que sea la punta de la lanza del México del futuro, uno que contemple de manera prioritaria empleo para todos y salarios dignos; una política fiscal progresiva en la que pague más quien gane más; finalmente, reorientar el gasto social para resolver los grandes problemas de educación, salud y vivienda, etc. A eso convoca Antorcha, manos a la obra.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario