El Artículo 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos dictamina que: "Toda familia tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y decorosa. La ley establecerá los instrumentos y apoyos necesarios a fin de alcanzar tal objetivo”.
Pero la realidad es muy distinta. En México, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), hay cerca 38.4 por ciento de la población sin una vivienda adecuada y, cerca del 55 por ciento de la población trabajadora no es formal, por tanto, no cuenta con la ayuda de los institutos estatales de vivienda para algún financiamiento, por lo que están excluidos de las políticas gubernamentales. El gobierno de la autodenominada Cuarta Transformación (4T) eliminó los subsidios establecido a la vivienda para que fueran más asequibles, por lo que afectó su adquisición para las familias de menores ingresos.
En Tabasco miles de familias se han quedado sin hogar, debido a las fuertes lluvias que han azotado el sur del país, esto implica el problema de vivienda, que se ha agraviado de manera exponencial, pues son más de 360 mil familias las que se han visto afectadas por los recientes huracanes e inundaciones y aún se vuelve mayor el problema cuando a capricho del presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, se elimina el Fondo Nacional para Atender los Desastres Naturales (Fonden), cuya función era precisamente apoyar a los estados en la atención y recuperación de los efectos que produzca un fenómeno natural. Entre ellos las viviendas perdidas.
Pero esta situación de falta de hogar podría pensarse que sólo sucede en Tabasco, y no es así. En Michoacán, que en los últimos años no ha sufrido desgracias de este tipo, el panorama de falta de vivienda en las masas más pobres de la sociedad, se asemeja con el panorama nacional; son cientos las familias sin una casa habitación y que por años permanecieron en el abandono, sin programas sociales del gobierno estatal o federal que permitieran el rescate de las antes mencionadas.
En el municipio de Morelia, donde se gobierna al contentillo y con políticas muy semejantes a las empleadas por el gobierno de la república y que a lo largo de dos años de administración se ha mostrado insensible y represor a las demandas del pueblo, el alcalde de este municipio, se ha negado a darle resolución a las súplicas de los morelianos que por años han solicitado mejoramiento en las colonias populares de la ciudad, que incluye servicios públicos como agua potable, electrificación y pavimentación, sin darle menos importancia la falta de vivienda que es una de las más sentidas por los morelianos.
Por eso creo conveniente hablar de un problema de invasión que sucede en un predio de cuatro hectáreas ubicado en las faldas del Cerro del Quinceo, el cual desde hace más de veinte años, mediante un comodato otorgado por el gobernador en turno y del cual es poseedor el Movimiento Antorchista se emitió que estaría destinado para la construcción de una unidad deportiva que brindará servicio a cientos de familias de las colonias aledañas, y que servirá como centro de recreación y esparcimiento para miles de familias; con estas obras se impulsará la práctica del deporte a jóvenes y niños, pues sabemos que la práctica del deporte promueve el desarrollo integral de los jóvenes, los aleja de las drogas, de los malos vicios y los impulsa a ser mejor personas.
Debido a los bajos salarios que reciben los mexicanos ante un sistema laboral donde carecen de lo indispensable, el problema de acceder a tener una vivienda digna y decorosa se ha agravado significativamente en los últimos años; viviendas muy pequeñas, construidas por grandes constructoras a muy altos precios ha ocasionado que los predios queden en abandono total, pues son muy pocos los ciudadanos que pueden acceder a dar el pago inicial, derivado de ello otro problema se genera: la necesidad de los más pobres por tener un techo donde albergar a sus familia y los pocos bienes que han tenido a lo largo de su vida, "paracaidistas” o "invasores&rdquo, así han llamado a los mexicanos que buscan tener una vivienda digna y decorosa, y cuya condición, se ha hecho blanco para aquellos "líderes” que han visto la manera de aprovecharse de la situación.
Precisamente esta situación se está viviendo en el predio del cerro del Quinceo, por lo tanto, el Movimiento Antorchista en el estado de Michoacán pide la pronta intervención por parte de las autoridades correspondientes para solucionar este conflicto del cual todos sabemos no tendrá un buen final puesto que podría desencadenar un enfrentamiento de la misma clase desposeída, algo que ya se está haciendo costumbre pagar los platos rotos por culpa de la insensibilidad de otros, cuyo objetivo es la ambición, es por el bien de todos. Vale.
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