El primero de julio se cumple dos años del triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador y su 4T, ¿qué tenemos que celebrar los mexicanos? ¿cuáles son los resultados del gobierno de la cuarta transformación?
Un breve recuento de los datos duros de la economía mexicana nos permitirá ver con toda claridad en qué sentido avanza la misma; veamos: según la información generada por el Instituto Nacional de Geografía, Informática y Estadística (Inegi), considerando el período de 18 meses que abarca la administración federal a cargo del licenciado Andrés Manuel López Obrador, desde diciembre de 2018 a la fecha la economía decreció en -1.7 por ciento.
El PIB (Producto Interno Bruto) que mide la suma de bienes producidos en el país en un año, según los datos aportados por el Inegi, nos informa que se acumulan 4 trimestres consecutivos de contracción, durante el segundo y tercer trimestre del año 2019 el PIB se mantuvo en números rojos que corresponden al -0.2 por ciento, el cuarto trimestre del mismo año sufrió una caída del -0.6 por ciento y para el primer trimestre de este 2020 ya vamos en -1.2 por ciento; al respecto Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México acotó que desde 1993 no se habían experimentado tasas negativas en cuatro trimestres consecutivos, de acuerdo con la información proporcionada por El Economista.com de fecha 26 de mayo del presente año. En términos anuales se observa una contracción del 2.2 por ciento al comparar el primer trimestre del 2020 con el mismo periodo del año 2019; por su parte el Banco Mundial pronostica para México una caída del PIB de -7.5 por ciento.
El Inegi también nos informa que prevé que la pobreza en nuestro país se incrementará un 4.8 por ciento, es decir que a los pobres que ya existen se sumarán otros más, serán 16 de cada 100 mexicanos que pasarán a engrosar las filas de los pobres en México.
Respecto a los datos del desempleo, las cifras oficiales no dejan lugar a dudas, para el mes de enero de este año la tasa de desempleo ya alcanzaba el 3.7 por ciento; el Inegi revela que 12.5 millones de personas perdieron su empleo en abril, al inicio del confinamiento causado por la pandemia de covid-19; sin considerar las cifras del subempleo y el comercio informal que arroja una cifra mucho mayor de mexicanos desempleados.
En cuanto a la seguridad, López Obrador dijo respecto de los hechos sucedidos en Guanajuato, el asesinato de 24 jóvenes hacinados en un anexo y la matanza de otras cinco personas en otro hecho días después en el mismo estado, que "... no hemos podido controlar los enfrentamientos." No hay combate real a la inseguridad que azota al país entero.
Finalmente, en cuanto a la salud de los mexicanos, en enero de 2020 se canceló el Seguro Popular y entró en funciones el INSABI, supuestamente para mejorar y darle una real alternativa al pueblo pobre en materia de salud, pero ahora todos sabemos que no sólo no mejoró, sino que se dejó en total desamparo a las familias pobres. En relación con la pandemia nuestro sistema de salud se ha visto totalmente rebasado, ni siquiera cuentan con equipos de protección los médicos, enfermeras y personal de los hospitales, en general no hay un plan de atención médica para garantizar la salud de los mexicanos, las cifras de contagios se elevan a más de 252 mil personas y el número de muertes por coronavirus asciende a más de treinta mil, ya ocupamos el quinto lugar en el mundo por el número de fallecidos, sólo superados por Estados unidos, Brasil, Reino Unido e Italia, esto es sin considerar que hay un número indeterminado de contagios y muertes que no se registran como coronavirus sino por otras enfermedades, debido a que no se les aplican las pruebas necesarias para determinar la enfermedad o, porque, sencillamente no acuden a los hospitales y se atienden en su casa los enfermos.
La mayor tragedia de los mexicanos es que el Presidente de México ha desestimado la gravedad de la pandemia, primero invitaba a no quedarse en casa, a salir a los restaurantes; el presidente no usa cubrebocas y no respeta la sana distancia; llegó a decir que sólo era cuestión de comer frijoles y tortillas que no era necesario tanto consumismo, seguramente para justificar la falta de apoyos alimenticios; se apresuró a llamar al regreso a la "nueva normalidad" a pesar de que estábamos en el pico de la pandemia y de que el número de muertos y contagios se incrementaba vertiginosamente como sigue ocurriendo hasta la fecha; no hay un plan de apoyo a las familias más vulnerables ni un plan de apoyo al empleo para los desempleados; ahora, dice que aquí no pasa nada, que es una exageración del conservadurismo, que no se puede decir que sea tan grave el número de muertos pues no se compara la población total de España o Francia con la de México; dice que vamos bien, que no debemos preocuparnos.
Es una relación sucinta de los hechos más destacados del tiempo que lleva gobernando Andrés Manuel López Obrador y su 4T, respaldados con datos oficiales, que los puede negar con la sencilla artimaña de que tiene "otros datos" pero la realidad no se puede ocultar, la realidad es objetiva, transcurre independientemente de que se quiera o no.
La verdad es que el país va a la deriva, la economía decrece, no hay alguna estrategia para enfrentar al crimen organizado, no hay plan para atender la salud de los mexicanos, no hay plan para crear fuentes empleo y acabar con las altas tasas de desempleo. En los distintos rubros no se ve "el final del túnel", por el contrario, se acentúan los aspectos negativos de la crisis económica que inició mucho tiempo antes de la pandemia, así como la crisis sanitaria originada por covid-19 y la crisis política. En estas circunstancias se nos dice que el presidente y su partido Morena festejan el segundo aniversario de su triunfo electoral, ¿pero y los mexicanos podemos presumir de algo?, ¿podemos festejar en medio de esta terrible crisis económica y humanitaria?
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