Una burla más del presidente, el domingo 19 de julio, salió a decir que rinde el pésame a las familias de los muertos por el coronavirus; además, vuelve a recetarnos un decálogo de compromisos de su gobierno para afrontar la pandemia de covid-19.
Los efectos de la pandemia han sido, son devastadores, los hemos sufrido durante los últimos cuatro meses del año, se han recrudecido especialmente en contra de los mexicanos más pobres.Los registramos en el número de muertos, que ya suman casi cuarenta mil fallecidos; en el número de contagios; en el número de pacientes que no han sido atendidos por no contar con un sistema de salud que garantice la atención médica de los mexicanos; en el incremento cada vez mayor de nuevos pobres y desempleados y en el número de empresas pequeñas y medianas que han cerrado sus puertas, derivado de la crisis económica y sanitaria.Hasta ahora, estos efectos, estos hechos, han sido ignorados o desestimados por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, los terribles efectos de la crisis que atraviesa nuestro país han sido minimizados simplemente porque así pretende ocultar su fracaso en materia de salud y economía; no falta el aderezo peculiar de su gestión, una serie de absurdos y mentiras, como "ya vamos domando la pandemia", "ya se ve el final del túnel", dijo de la pandemia que "nos viene como anillo al dedo", en un decálogo anterior nos recomienda comer frijoles y tortillas, etc.
Es una burla siniestra, debido a que si contáramos con un sistema de salud básico para atender a la población, hubiera sido posible evitar algunas muertes, pero justamente en este año desapareció el Seguro Popular, hay desabasto de medicamentos, los enfermos de cáncer y otras enfermedades crónico degenerativas ya no cuentan con medicamentos, el Gobierno federal suspendió el abasto de los medicamentos; además no se tomaron las medidas de confinamiento y la sana distancia sino hasta mucho tiempo después, además el mismo presidente en forma irresponsable incito a la población a no quedarse en casa, a salir y "comer en fondas y restaurantes", se canceló el confinamiento en el pico de la pandemia, causando un incremento súbito de muertes y contagios; ahora, nos viene a decir que va darle mayor importancia a la medicina preventiva, además en otro de los puntos de su decálogo dice que va a realizar una campaña permanente para hablar de la importancia de la comida nutritiva y el grave daño que causa el consumo de productos chatarra, así como mejorar el sistema de salud pública con más y mejores médicos, enfermeras y otros trabajadores, pero son puras promesas, los hechos son totalmente contrarios a sus buenos deseos, basta un botón de muestra: todos hemos sido testigos de los reclamos de los trabajadores de la salud ante la falta de equipos de protección.
Dice el presidente en su decálogo que continuara gobernando sin permitir la corrupción, ya tiene a Emilio Lozoya en México como prueba de ello, pero y la nueva corrupción por qué no la combate, por qué no toma las mismas medidas en el caso Bartlett y otros funcionarios de Morena, a quienes se les han descubierto corruptelas multimillonarias; a estos, a los de su partido, se apresta sin el menor recato, a defenderlos y decir que no se les pueda juzgar dos veces por el mismo delito.
Seguimos con su decálogo, dice que atenderá las demandas de empleo, que garantizará buenos salarios y el bienestar del pueblo de México.Demagogia pura, la realidad contradice al presidente, lo que viene sucediendo es todo lo contrario, a saber: no se garantiza la salud de los mexicanos, no hay presupuesto para clínicas, hospitales, medicamentos, médicos ni enfermeras, a los que hay ni siquiera se les dota de equipo de protección; en cuanto a la generación de empleos es falso pues ya van 12 millones de empleos perdidos; de los salarios ni se diga, todos sabemos que son de los más bajos, los trabajadores mexicanos son de los más mal pagados en el mundo.
Nos podemos ir punto por punto del decálogo y podremos ver su inconsistencia y falsedad, pero eso salta a la vista.Al final la realidad se impone, no se la puede ocultar, tenía que salir tarde o temprano, los resultados de la estrategia del gobierno son harto conocidos, la verdad es que la estrategia del gobierno en materia de salud ha sido un fracaso.
Ahí están todos los rubros que el mismo presidente enumera: salud, alimentación, empleos, salarios y apoyos económicos, en todos ellos los resultados son negativos.No hay plan gubernamental para hacerle frente a esas necesidades de la población.No se garantiza el derecho de los mexicanos a la salud, la alimentación y el empleo.
El Movimiento Antorchista Nacional demandó desde el inicio de la pandemia un plan nacional de distribución de alimentos, pero fue olímpicamente ignorado, jamás se le dio respuesta, no se han atendido las necesidades de los más desprotegidos del país.
Por el contrario, el presidente ha denostado a la organización de los pobres de México, acusándola de intermediaria y de querer "moches", la ha calumniado acusándola de corrupta, sin que jamás haya presentado pruebas en su contra.
Recientemente, el gobernador de Puebla Miguel Barbosa, se atrevió a incriminar a la dirigente antorchista Rosario Sánchez Hernández, acusarla de robo agravado y amenaza con encarcelarla, manipulando los hechos, acusándola de robo de despensas, lo cual es totalmente falso.Lo únicamente cierto es que ella al igual que otros líderes antorchistas lo que hacen es encabezar la demanda de gente humilde, la demanda de despensas, apoyos alimenticios y otras.
Los antorchistas de Jalisco sabemos que se trata de una calumnia y de una nueva amenaza de represión, manifestamos nuestro repudio a tales amenazas y le decimos al gobernador de Puebla y al mismo presidente de la república que no permitiremos que se consuma una injusticia sobre nuestros compañeros, nos movilizaremos en su apoyo.
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