El antorchismo del municipio de Chalco recientemente se vio reprimido por el gobierno municipal que ha hecho oídos sordos para no resolver demandas esenciales para los habitantes de ese lugar.
El presidente municipal de Chalco, Juan Manuel Carbajal, militante del PRI, firmó en abril del 2016 un pliego petitorio que le entregó una comitiva de antorchistas encabezados por su dirigente Dalila Rodríguez. En dicho pliego el presidente se comprometía a resolver demandas tales como: obras de drenaje, agua potable, electrificaciones y pavimentaciones en 32 comunidades.
Un año después los chalquenses siguen olvidados por su presidente municipal, parce que no valen ni la palabra ni la firma de Carbajal pu3w no muestran avance ni del diez por ciento las obras que se comprometió a realizar. Como la red de drenaje para las colonias Margarita Morán y Jorge Obispo y la remodelación de módulos sanitarios para 600 alumnos de la primaria Benito Juárez.
Y es que al gobierno municipal de Chalco parece no importarle dotar de servicios a comunidades que se encuentran fuera del límite urbano, pero que mantenerlas así es por demás infrahumano. Sus gobernados también le piden al alcalde Carbajal el equipamiento del Centro de Desarrollo Comunitario de Tres Marías, el desazolve de drenaje en colonias que prácticamente desaparecen bajo las inundaciones debido a las intensas lluvias de la temporada.
A todo lo anterior se suman 26 pavimentaciones, 14 encementados; agua y drenaje para tres colonias; electrificación para 14 comunidades, construcción de una lechería, alarmas vecinales y reparación de luminarias; construcción de canchas de usos múltiples en cuatro comunidades, rehabilitación de dos espacios públicos, remodelación de módulos sanitarios, construcción de aulas, techumbres y la entrega de pintura e impermeabilizante.
Si todas estas obras y servicios hacen falta en Chalco, la pregunta obvia es: ¿qué está haciendo Juan Manuel Carbajal por su municipio y sus gobernados?
Cuando Carbajal llegó a la presidencia municipal, no tenía ninguna trayectoria exitosa en la política; es más, no tenía ni una pizca de conocimiento para poder gobernar un municipio como Chalco. Ahora es incapaz de reconocer que no ha logrado absolutamente ningún progreso para el municipio, por lo que para justificar su existencia, se adjudica logros de obras que no son trabajo de él. Tal es el caso del parque Jardines, que es una gestión de la diputada federal antorchista por el distrito XXII, quien logró que la Cámara de Diputados etiquetara recursos federales pues la construcción de este parque.
Este presidente inepto no sólo no cumple con su palabra y presume con sombrero ajeno, también es un represor que está en contra de toda libertad de expresión o mejor dicho está en contra de todo aquel que lo haga quedar mal: con la fuerza pública retiró a varios de niños bailarines que se manifestaban en la explanada municipal de manera pacifica y donde solicitaban módulos sanitarios para sus escuelas.
La represión no acabó ahí, días después un maestro y dos abogados antorchistas fueron detenidos y privados de su libertad por más de cuatro horas por andar difundiendo un volante en donde explicaban la nula solución de demandas de su presidente municipal Juan Manuel Carbajal.
Tras una campaña de denuncia vía redes sociales por parte del antorchismo nacional y tras movilizar a cientos de antorchistas para exigir la liberación de los detenidos, estos fueron puestos en libertad por parte del gobierno municipal no sin antes volver a probar su represión pues exigían se pagará una fianza por un delito que nunca cometieron.
Así, pues, en Chalco: represión política ante la nula solución de demandas.
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