La alimentación, es uno de los aspectos fundamentales y que más cuidan aquellos que se preparan para realizar actividades físicas de alto impacto como es la práctica de algún deporte; la nutrición es uno de los pilares de los que depende el rendimiento atlético, tan es así que las dietas y limitaciones de alimentos deben llevarse al pie de la letra.
Eso lo sabe bien el equipo de cocineras y cocineros antorchistas que acuden, desde hace más de 20 años a las diferentes ediciones de las Espartaqueadas Deportivas Nacionales; hombres y mujeres que sin nigún tipo de pago más que la gratitud de los deportistas trabajan largas jornadas elaborando los alimentos de todos los participantes, pues para que los equipos se encuentren listos para iniciar sus competiciones a las seis u ocho de la mañana, deben levantarse a las cuatro y comenzar a preparar todo lo necesario, terminando muchas veces sus jornadas hasta pasando la media noche; son, pues, quienes se encuentran detrás de cada uno de los triunfos que la delegación michoacana obtiene en estas justas deportivas.
Tan es así, que ellas mismas se ven como unas deportistas más “yo también vengo a participar, igual que si fuera deportista” dice doña Chepa, una mujer que ha manifestado sentirse satisfecha al venir a hacer de comer para todos los “muchachos”, como ella les dice, pues menciona además que cada día deben preparar desayuno, comida y cena para entre 400 y 500 personas.
En esta edición deportiva, la celebración del Día de las Madres las sorprendió lejos de sus hogares, no así del cariño de los jóvenes que son atendidos por ellas durante una semana entera; en agradecimiento a ese esfuerzo y compromiso, los jóvenes decidieron sorpenderlas con una serenta para recordarles que su esfuerzo vale, y vale mucho. “Nos agarraron dormidas”, dijo doña Mary, “pero nos sentimos muy felices, porque aunque no estamos con la familia aquí nos hicieron sentir como si estuvieramos con nuestros hijos, porque nosotros siempre lo hemos dicho, nosotros, con mucho amor les preparamos la comida; los queremos como si fueran nuestros hijos, y por eso yo vengo con mucho gusto, sin que me paguen”, mencionó.
El cariño, el sacrificio, la abnegación, el amor y el esfuerzo tienen siempre sus recompensas, y en esta ocasión, no fue diferente, pues todo lo que hay detrás de la preparación y atención hacía los deportistas, rindió hoy sus frutos, al colocar, entre los primeros lugares, de diferentes disciplinas y categorías a los equipos michoacanos y al encontrarnos en esta situación, resuenan las palabras de doña Mary: “que coman bien, para que ganen muchas medallas”.
Hoy Tecomatlán despidió a la primera delegación michoacana que logró llevarse a casa lugares en las disciplan de básquetbol, voleibol y atletismo; un primer contingente que dio todo de sí, que se enfrentó a juegos que fueron casi de infarto, en los que a cada segundo el marcador cambiaba y ponía a los presentes con los nervios de punta, pero donde el temple y carácter de los atletas para sobreponerse y apostarse en la cancha para conseguir el triunfo logró que Michoacán continuara sumando puntos para escalar en las posiciones de los primeros lugares de la tabla general y dejar el nombre de la tierra purépecha, en alto.
Partió de la Atenas de la Mixteca el primer contingente, pero al igual que sucede en las carreras de relevos, pasan la estafeta a la segunda delegación que ya viene en camino y que continuará, el día de mañana, la carrera de los deportistas en la que cocineras, equipos de apoyo, árbitros y mucha más gente son fundamentales.
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