El pasado 22 de enero, con presencia de los medios de comunicación y del presidente de la república en la conferencia mañanera que se llevó a cabo en Querétaro, el gobernador, Mauricio Kuri, realizó de manera muy breve lo que según él ha hecho en el estado.
Dijo que en materia de seguridad, Querétaro es un estado donde se vive en paz, en orden y prosperidad. Ocupamos el número 24 con la menor tasa de homicidios (8 por cada 100 habitantes) y el 25 con menor número de feminicidios.
Gracias a la paz que vivimos, podemos construir el bien común; somos el segundo estado más competitivo del país: el año pasado se generaron más de 32 mil empleos superando la expectativa de 25 mil que se tenía a principios del 2023.
Hoy estamos en periodo electoral; por eso están trabajando, pensando en la gente, en su estado y en su país.
Somos la séptima entidad con mayor ingreso del país. Está de acuerdo con el empleo formal bien pagado, pues es la mejor forma de progreso.
Kuri mencionó que como gobernador se propuso complementar los programas sociales federales, por ejemplo: tarjeta contigo, tarifa preferente para el transporte público, tarjeta Unidos, becas a los estudiantes para que puedan estudiar en el extranjero.
Salió de la pobreza casi un cuarto de millón de personas. Se está lanzando la tarjeta de “Salud contigo”, que da acceso a los hospitales del estado, a todas las personas que no estén afiliados a un sistema médico.
Se anuncia que con el apoyo federal se va a resolver el problema del suministro de agua para los próximos años y para las futuras generaciones con la construcción del “Sistema Batán-Agua para Todos”.
Estas fueron las palabras que expresó Mauricio Kuri González ante el Ejecutivo federal, agradeciendo todo el apoyo recibido. Ese día se firmó el compromiso de colaboración para la construcción del Acueducto III.
¡Qué fácil es para los gobernantes decir que todo lo que están haciendo, es para que a todos los ciudadanos nos vaya bien! Pero la realidad dice otra cosa.
En Querétaro las cosas no están bien como asegura Kuri; la inseguridad ha incrementado también en el estado; de acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe) 2023, aplicada por el INEGI, Querétaro es el tercer estado con la tasa más alta de incidencia delictiva, con 35.8 delitos por cada 100 habitantes.
El 75.4 % de la población de 18 años y más, refirió que la inseguridad y la delincuencia son los problemas más importantes que aquejan hoy en día a su entidad federativa, seguido de la corrupción con 41 % y la mala atención en centros de salud y hospitales públicos con 37.4 %. Encuesta Nacional de Calidad e impacto Gubernamental (Encig).
La inseguridad en nuestro estado se mantiene a la alza, en los primeros ocho meses del año 2023, ocurrieron 129 homicidios, representó un incremento de 26.4 % respecto a los 102 reportados en el mismo periodo de 2022, reveló la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Con estos datos se demuestra que si bien es cierto que no somos de los estados más inseguros, tampoco se puede afirmar que podemos vivir en paz y sin preocupaciones. Si bien es cierto que se han impulsado los programas asistencialistas, para supuestamente reducir los niveles de pobreza.
Estos se instrumentan con fines electoreros; no es verdad que haya preocupación por atacar la pobreza, sólo se limita a beneficiar a unos cuantos porque las cantidades que invierten no son suficientes para abatir la necesidad real.
Sólo por dar un ejemplo: el transporte público, las tarjetas que tanto menciona, son el mecanismo que utiliza el estado para controlar el servicio, pues ya no se permite el pago en efectivo; todo el recurso debe ir a la Agencia de Movilidad del estado, ellos lo manejan.
Pero eso es lo de menos: de qué nos sirve, si el servicio aún no ha mejorado lo suficiente; siguen faltando más unidades. La frecuencia de las unidades es el principal problema.
En la inmensa mayoría de las rutas, los precios preferenciales de las tarjetas antes mencionadas sólo son para algunos sectores de la población como personas de la tercera edad, discapacitados o estudiantes; no es para todos en general.
El servicio médico es deficiente: ¿de qué sirven las tarjetitas de salud, si lo que hacen falta son más médicos, más y mejores instalaciones que brinden un servicio digno a la población, entrega de medicamentos a los pacientes?
Con el tema del agua, había compromisos de las anteriores administraciones de llevarla a las comunidades, pueblos y colonias marginadas; sin embargo, sigue sin solución.
Hoy estamos en periodo electoral; por eso están trabajando, pensando en la gente, en su estado y en su país. En estos momentos, les aflora el amor a su patria y con el apoyo federal, ahora sí va a haber agua.
Debería decirnos el gobernador en dónde se redujo la pobreza, porque no queda claro que 250 mil queretanos hayan subido a otro nivel.
También dice que está de acuerdo con que haya empleos bien pagados, y la pregunta es ¿por qué no exige a las empresas que mejoren los salarios a sus trabajadores?
La mayoría de los obreros ganan en promedio de mil 200 y a los que mejor les va mil 500 semanales. Eso es un salario miserable que no alcanza para satisfacer las necesidades de una familia.
¿Por qué no se elaboran leyes que obliguen a los empresarios a incrementarlos, de acuerdo a los tiempos que estamos viviendo? Esto y más podríamos opinar al mensaje del señor gobernador, pero por falta de espacio, no lo podemos hacer.
Ya no más mentiras: los acuerdos y las buenas relaciones entre gobiernos deben servir para el bien de los ciudadanos, si hubiera verdadera preocupación de las autoridades, no estaríamos así.
Los mexicanos y los queretanos merecemos más respeto y otro tipo de gobernantes, no los que tenemos.
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