La pobreza aumenta en Yucatán, empeorando la vida de miles de yucatecos y sin que el panista Mauricio Vidal intente resolver las necesidades más apremiantes.
El diciembre pasado, el gobernador de Yucatán envió al Congreso del Estado su proyecto de paquete fiscal para el 2022 y, a pesar de haberse comprometido a atender demandas, el presupuesto dejó fuera las necesidades del pueblo organizado en Yucatán, como recurso para la de dotación de insumos agropecuarios -fertilizante, semilla para siembra, herbicidas, implementos, azúcar, por mencionar algunos-, terrenos para vivienda, regularización de colonias en los municipios de Mérida, Kanasín y Valladolid, mejoramiento de vivienda, agua potable, electrificación y la oficialización de la preparatoria de nueva creación “Felipe Carrillo Puerto”, en Kanasín.
Cabe destacar que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) señala que el incremento de la pobreza en la península yucateca se incrementó en 32 municipios de los 106 que conforman el estado, aumentando un 16 por ciento en toda la entidad.
A pesar de que el Movimiento Antorchista en Yucatán informó al gobernador de la situación en la que viven miles de familias, las autoridades hacen caso omiso: “encargados de dar solución ‘argumentan’ que no hay recursos o simplemente no dan la cara y los funcionarios menores que nos han atendido, aunque de palabra muestran ‘preocupación’, en los hechos, tampoco hacen nada”; declaró Aleida Ramírez Huerta, dirigente del antorchismo en el estado.
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