El problema que enfrentan los estudiantes de Amozoc, Puebla, no es nuevo. Es largo ya el historial negro de las autoridades de este municipio. Como todos sabemos, los estudiantes no solo de Amozoc, sino de todo el estado poblano han manifestado, en primer lugar, la necesidad de resolver los problemas más sensibles que los aquejan y, en segundo, han repudiado el nivel de prepotencia que ostenta el presidente municipal.
Han sido más de nueve ocasiones, en las que los estudiantes adheridos a la FNERRR, encabezados por Jesús Alejo, líder en el seccional, e Isolda Morán, líder estatal, han protestado en contra de las políticas erróneas del gobierno morenista de Amozoc que encabeza Mario de la Rosa.
En todos nuestros desfiles de protesta, el Ayuntamiento ha mostrado oídos sordos ante nuestra petición principal; la donación del terreno para la construcción del bachillerato 283, petición que, por su naturaleza, es urgente, pues hablamos de la preparación académica de nuestros jóvenes.
La actitud que presenta De la Rosa no es casual, pues esta personalidad de necedad, prepotencia, insensibilidad e ignorancia destaca en las autoridades y funcionarios públicos que se alinean con la 4T. Ya no es directriz general resolver, ahora es negar el trato y diálogo con organizaciones; es decir, estas personas se cierran completamente a escuchar las peticiones de aquellos ciudadanos, y en este caso la FNERRR que, por razones urgentes y necesarias, hace uso de sus derechos constitucionales de organización, manifestación y petición.
Si no tienen la mínima intención, las autoridades morenistas, de entablar diálogo y analizar las demandas más urgentes de los protestantes, esto es lamentable, pues actualmente el país vive una crisis económica en la que la educación no prescinde de esta desigualdad.
Nos encontramos con una educación en la que nuestras escuelas se enfrentan a la carencia de aulas, módulos sanitarios, servicios básicos, techados, espacios de recreación cultural y deportivo, y en el peor de los casos, la falta de escuelas. Así es en Amozoc, no hablamos de la escasa infraestructura que presentan las escuelas, aquí lamentamos que los jóvenes no tienen edificios. Hace falta, pues, un terreno para construir la institución educativa. Esta es la realidad académica que presenta nuestro país.
Quisiera ocuparme más sobre el nulo liderazgo que tiene el edil, pero también creo necesario, y urgente, opinar acerca del papel que juega el alumnado, el magisterio y la ciudadanía en general para terminar con esta desigualdad que impera en nuestro país, he aquí el comentario del revolucionario que aplicó al marxismo con tremenda majestuosidad. “No queremos una enseñanza mecánica, pero necesitamos desarrollar, perfeccionar la memoria de cada estudiante dándole hechos esenciales, porque el […] aprendizaje sería una vaciedad, quedaría reducido a una fachada vacía, el […] estudiante no sería más que un fanfarrón, si no comprendiese y asimilase todos los conocimientos adquiridos. No sólo deben ustedes asimilarlos, sino asimilarlos en forma crítica, con el fin de no amontonar en el cerebro un fárrago inútil, sino de enriquecerlo con el conocimiento de todos los hechos, sin los cuales no es posible ser hombre culto en la época en que vivimos. El […] alumno que se vanagloriase de serlo, simplemente por haber recibido conclusiones ya establecidas, sin haber realizado un trabajo muy serio, difícil y grande, sin analizar los hechos frente a los que está obligado a adoptar tina actitud crítica, sería un […] alumno lamentable. Nada podría ser tan funesto como una actitud tan superficial. Si sé que sé poco, me esforzaré por saber más, pero si un […] joven dice que es […] alumno que no tiene necesidad de conocimientos sólidos, jamás saldrá de él nada que se parezca a un […] estudiante revolucionario”. Esto lo dijo V. I. Lenin en su “Discurso en la I sesión del III Congreso de Juventudes Comunistas de Rusia”.
Sintetizando a Lenin, no podemos cambiar la pésima educación de los jóvenes si no hacemos un estudio profundo de la realidad. Necesitamos estudiar en serio, estudiar de a de veras, es urgente analizar la situación concreta de la realidad, en una palabra; conocer sus leyes de funcionamiento. Pero ¿quién nos va a dotar de cierto conocimiento? ¿Quién nos dirá, con certeza, las acciones a ejecutar? Solo hay una respuesta, jóvenes estudiantes, el único movimiento estudiantil que trazará las líneas de acción es, en efecto, la FNERRR. Solo nuestro movimiento puede hacer un análisis profundo de la realidad concreta.
Bien. A estas alturas la FNERRR ha sido tajante con su postura, no podemos quedarnos como una estatua sin vida, necesitamos pensar en movimiento, y lo que ahora urge y debemos hacer, es mantener nuestra lucha intensa. Nadie puede negar la necesidad que se vive en Amozoc, nadie lo puede ocultar. La necesidad existe y solo nosotros le podemos dar solución, pero ¿de qué manera? Es urgente que todos los estudiantes a nivel nacional se enteren de la arbitrariedad que se pasea por las calles de Amozoc, es urgente que la población de toda la nación sepa que, así como Mario La Rosa le niega el diálogo y la posibilidad de resolver las necesidades al estudiantado que él representa, así hay cientos de alcaldes, a los largo y ancho del país, que gobiernan municipios e impiden el desarrollo de los futuros pilares de la nación.
Por esta vía, invito abiertamente a toda la población que tenga la iniciativa de participar en estos movimientos estudiantiles, cuya única finalidad es luchar intensamente por terminar con la pobreza educativa en impera en nuestro país. ¿Acaso no les gustaría tener un sistema educativo completamente gratuito, en el que tengan que evitar el pago de pasajes y cuenten con comedores alimenticios? ¿No esto una verdadera educación de calidad? Esto es lo que quiere la FNERRR, por esto es el motivo de nuestra existencia como organización estudiantil.
Finalmente, la FNERRR le quiere recordar a De La Rosa que, en próximos días, estaremos en una nueva manifestación y que no vamos a desistir hasta entablar un diálogo con propuestas de solución. Urge que los alumnos del bachillerato 283 cuente con instalaciones adecuadas para su desarrollo académico. ¿Estamos en el entendido, señor presidente?
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