En Othón P. Blanco, Quintana Roo la pobreza es una realidad que se puede apreciar en las colonias marginadas y comunidades rurales, en donde los efectos de la desigualdad social se agudizan, situación que representa un gran reto y que le toca sortear a la actual alcaldesa Yensunni Martínez Hernández, de quien, por nuestra parte, percibimos su recta intención y la voluntad política de avanzar en la atención de las principales problemáticas del municipio, pero esto no es automático, se requiere de su compromiso y de que se concreten las acciones necesarias para atender las demandas urgentes de la población más vulnerable. Cabe recordar que la anterior administración municipal fue un fracaso, toda vez que el ex edil Otoniel Segovia Martínez, demostró desaciertos no sólo en el mal manejo de los recursos económicos, sino también en las obras inconclusas y de mala calidad, en el pésimo desempeño de los servicios públicos y en el abandono a los sectores más vulnerables.
En este contexto, el Movimiento Antorchista en Quintana Roo se caracteriza por luchar de forma organizada junto al pueblo trabajador para combatir la pobreza y la desigualdad social imperante, la cual creció de manera alarmante en los últimos años debido, principalmente, a la falta de atención de las autoridades en los diferentes niveles de gobierno, sean del partido que sean. Pues bien, al inicio de la actual administración municipal, la organización social entregó una solicitud por escrito, en donde se enlistan las necesidades básicas de las colonias antorchistas que han sido marginadas por las diferentes administraciones.
Como muestra de voluntad política, destaco, positivamente, que hace un par de semanas la presidenta municipal de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez, atendió personalmente a representantes del Movimiento Antorchista de este municipio, quienes le plantearon las necesidades de los othonenses organizados en Antorcha; por su parte la alcaldesa pidió que se tuviera “paciencia y confianza” que, aunque no hay recursos suficientes en el erario para atender debidamente las necesidades planteadas, se tiene la voluntad política y la intención de buscar en coordinación con la organización, las mejores formas para solucionar paulatinamente estas demandas, y que esta atención sea en marco de la ley.
Es necesario precisar que ninguna de las demandas que se plantearon ante el Ayuntamiento de Othón P. Blanco son un capricho de los antorchistas, mucho menos son obras para beneficio particular de unos cuantos, ya que son demandas colectivas, elementales e indispensables para que puedan vivir dignamente los habitantes; son demandas para el progreso de las colonias y comunidades del municipio que por años han sido olvidadas y que luchan a lado del antorchismo para conseguir lo elemental para vivir; porque, es un hecho evidente que desde que llegó Antorcha a Quintana Roo, se ha venido organizando una lucha constante a nivel municipal y estatal para mejorar las condiciones de los que menos tienen.
Así que, si alguna vez llegasen a oír que nuestras manifestaciones son para solicitar “moches”, dinero o canonjías para beneficio de los líderes, tengan por seguro que son calumnias, son acusaciones sin pruebas para perjudicar la legitimidad de la lucha de miles de quintanarroenses que a lo largo de los años se han beneficiado con los resultados de ésta y son testigos fieles de lo que aquí digo. En este sentido, quiero comentar que desde el inició de la administración municipal, los antorchistas hemos sido pacientes y prudentes, ya que sabemos de las dificultades económicas por las que está atravesando el municipio, el estado y el país en general, sin embargo, es cierto que el Ayuntamiento tiene que tomar medidas y emprender acciones concretas, porque el tiempo pasa y las necesidades de la ciudadanía son cada vez más complicadas.
Resultado de la reunión con la alcaldesa Martínez Hernández, fue el compromiso de hacer lo posible para que se implementen programas sociales que lleguen a las colonias y comunidades en donde más se necesite, asimismo, se comprometió a realizar una visita a las colonias antorchistas para constatar personalmente las carencias existentes y hacer un plan de trabajo para ver la factibilidad de la regularización de éstas y otras colonias, a fin de que nuestros compañeros puedan tener certeza jurídica de su patrimonio.
Por último, aprovecho este espacio para hacerle un llamado respetuoso a la alcaldesa, para que gire las instrucciones necesarias y dé seguimiento oportuno a los acuerdos tomados con los antorchistas. Yo creo que este gobierno puede ser recordado como uno diferente, cercano a la gente, que luchó para sacar del atraso y de la injusticia social a los othonenses, el tiempo pasa y es poco para cambiar las cosas. Hacemos votos para que no seamos ignorados y se resuelvan nuestras demandas más sentidas. Vale.
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