El jueves 2 de septiembre pasado, fue presentada virtualmente la investigación titulada: “Ranking de pobreza en Primera infancia: un análisis del Pacto por la Primera Infancia a partir de los datos de Coneval” (página oficial). Alberto Sotomayor Avilés, coordinador de investigación, informó las tristes y vergonzosas cifras que a continuación enumeramos:
1) “A nivel nacional 1 de cada 2 niñas y niños menores de seis años se encuentra en condición de pobreza multidimensional”. Sotomayor reveló que la población afectada creció de 52.5% a 54.3%, en los dos primeros años del gobierno de López Obrador; aumentando en un total de 6 millones 593 mil pequeños que “no van a la escuela, no se alimentan bien y carecen de servicios de salud”.
2) “La proporción de menores que sobrevive en pobreza extrema (la más terrible de todas) aumentó en un 2 %, en la Cuarta Transformación y sigue creciendo; esto se traduce en 1 millón 432 mil niños más que ¡pasan hambre! y enfrentan carencias múltiples”.
3) “Se duplicó prácticamente la población de primera infancia de 0 a 6 años que no tiene acceso a servicios de salud”, al pasar de 12.6 millones de niños a 22.3 millones, un alza de 9.7 millones de infantes desprotegidos totalmente por “el Gobierno de los Pobres”.
Estos datos estremecedores se convierten en sufrimiento real, crudo, en las familias trabajadoras que ven a sus hijos padecer lo descrito sin poder hacer sino muy poco y en algunas veces nada para remediarlo. Indiscutiblemente, esta situación social es responsabilidad directa y absoluta del presidente de la república Andrés Manuel López Obrador y de sus funcionarios de la Cuarta Transformación que conociendo la realidad la ignoran criminalmente.
Otro aspecto de la vida infantil de estos tiempos y tan injusta como la anterior, lo analiza la especialista en asuntos de la infancia Isabel Pérez Solís. Ella señala que durante la pandemia en pleno Gobierno morenista y según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 5.2 millones de niños, adolescentes y jóvenes entre los 3 y los 29 años de edad, no se inscribieron al ciclo escolar 2020-2021 por motivos económicos y por causas de la covid-19.
Ahora bien, de esos 5.2 millones de niños, 3 millones pertenecen a educación básica y de estos, 1.3 millones abandonó la escuela a causa de covid-19 y 1.6 millones de por falta de recursos económicos. Además, de esos 5.2 millones que tampoco terminaron el ciclo escolar 2019-2020, 3.6 millones de pequeños no se inscribieron al ciclo siguiente porque tenían que trabajar. (Ciencia UNAM-DGDC, revista de divulgación de la UNAM).
Estos ejemplos demuestran que la pobreza y la falta de educación están hundiendo a una generación completa, están hundiendo a millones de mexicanos en un atraso total que tendrá muy graves repercusiones humanas, económicas y sociales para el país. Cuando estos pequeños alcancen la mayoría de edad, su condición física y cultural se convertirá en una problema personal y social, pues tendrán una desventaja notable para conseguir empleo y ser competitivos en el mercado laboral, tendrán un cúmulo de enfermedades derivadas de la mala alimentación y las malas condiciones sociales donde se desarrollaron, les será más difícil integrarse a una sociedad ordenada y serán sujetos del crimen y los vicios que ya campean en México. Su atraso múltiple cobrará forma de gran problemática económico-social para millones de mexicanos, será un peso doloroso de llevar en nuestra tierra tan golpeada ya por la pobreza y el trabajo reparador de esa desventaja, requerirá gigantesco esfuerzos y recursos y desde luego está significando hoy y significará después, más sufrimiento para las clases trabajadoras, sufrimiento que el pérfido Gobierno obradorista deja pasar conscientemente.
Otro fenómeno social más, que prueba que se está hundiendo a toda esta generación de infantes, es que, 250 mil niñas, niños y adolescentes, están en riesgo de ser reclutados o utilizados por grupos delictivos a nivel nacional (Reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes por grupos delictivos en México”, (Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), página oficial, sept.8. 2021).
“Por ejemplo, se han reportado algunos casos en los cuales son tratadas como esclavas sexuales”. “Mientras niñas y adolescentes reclutadas por grupos ligados al narcotráfico, forman células de halcones (vigilando los movimientos de las autoridades) o sicarias, encargadas de ejecutar a integrantes de grupos rivales”. Nunca en la vida del país se habían manifestado condiciones de crisis sociales como las que existen hoy y que se profundizan en silencio y con rapidez, ante los ojos cómplices de los profetas de la transformación. Sigamos denunciando sus crímenes.
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