De nueva cuenta, el Movimiento Antorchista Nacional se abre paso en el corazón del pueblo mexicano gracias a su insistente lucha por mantener viva la cultura y el conocimiento en todos los rincones de la patria.
El anuncio del Encuentro Nacional de Teatro, que tiene lugar en Tecomatlán, Puebla, confirma que la organización continúa firme en su convicción de que sólo un pueblo culto es capaz de conquistar mejores caminos hacia el bienestar colectivo.
El teatro se convierte en educación, en conciencia, en politización; en una herramienta para construir un país más justo, equitativo y en paz.
Bajo la dirección del maestro Aquiles Córdova Morán, Antorcha ha sostenido durante décadas que la cultura no es un lujo ni un adorno, sino una herramienta de liberación. Por ello, ha hecho extensiva la invitación al público para ser partícipe de este magno evento que, como cada año, pretende acercar el arte a quienes históricamente han sido excluidos de él.
Los antorchistas han logrado crecer en todo México precisamente a través de la cultura. Han sembrado conciencia, han enseñado a la gente a pensar, a cuestionar, a luchar por una patria verdaderamente equitativa e igualitaria. Y es mediante el teatro, esa forma de arte que desnuda la condición humana y coloca al espectador frente a su propia realidad, que buscan eliminar los grandes males que aquejan al país.
En este contexto, el Movimiento Antorchista Nacional celebra del 28 al 30 de noviembre el XXIV Encuentro Nacional de Teatro 2025, un evento que reune a más de mil actores y presentará 32 puestas en escena en las categorías Semiprofesional, Amateur y, por primera vez, Popular, en el Teatro “Aquiles Córdova Morán” y el auditorio municipal “Clara Córdova Morán”.
Desde hace 24 años de esfuerzo ininterrumpido, Antorcha ha promovido un inmenso movimiento cultural que ha reunido a 26 mil actores en más de mil doscientas obras presentadas en las distintas ediciones.
Con la nueva categoría Popular, que integrará a amas de casa, campesinos, obreros, carpinteros, comerciantes y trabajadores del pueblo, el teatro regresa a su origen: a La Atenas de la Mixteca, Tecomatlán, donde nació el encuentro como parte de la Espartaqueada Cultural.
Lo verdaderamente valioso es que este movimiento no persigue fama ni reflectores. Quienes participan lo hacen porque creen que el arte debe despertar al pueblo, convertirse en motor de conciencia y arma de lucha.
Por eso, el encuentro es totalmente gratuito y se sostiene gracias al esfuerzo colectivo de Antorcha y los grupos teatrales participantes. En un país donde los espacios culturales son inaccesibles para la mayoría, este hecho adquiere un valor político y moral incalculable.
Porque en México, y hay que decirlo con toda claridad, el arte se ha convertido en un negocio o en un instrumento de dominación cultural. Las clases poderosas se apropiaron del teatro para comercializarlo o para usarlo como distractor, alejándolo del pueblo que lo vio nacer.
Mientras tanto, el gobierno federal sigue recortando presupuesto: el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026 asignó apenas 15 mil 80 millones de pesos, lo que representa una disminución real del 4.57 %. En un país donde el arte es un privilegio, ¿cómo se espera que el pueblo acceda a una formación estética que lo haga libre?
Las familias mexicanas no pueden pagar boletos de cientos o miles de pesos para ver una obra en el Palacio de Bellas Artes. ¿Por qué el arte debería ser inaccesible si pertenece, desde su origen, al pueblo?
El teatro que promueve Antorcha es, precisamente, un arte que transforma. Los espectadores se encuentran con obras profundas, de calidad, que los confrontan con su realidad y los impulsan a cambiarla. El teatro se convierte así en educación, en conciencia, en politización; en una herramienta para construir un país más justo, equitativo y en paz.
Mientras el gobierno abandona la cultura, Antorcha insiste en devolverla al pueblo. Y en tiempos de crisis y desigualdad, esa insistencia es un acto de resistencia, pero también de esperanza.
La invitación está abierta. La convocatoria del Encuentro Nacional de Teatro ya puede consultarse en el portal del Movimiento Antorchista y en sus redes sociales. Tres días donde el arte, lejos de los reflectores comerciales, volverá a ser lo que siempre debió ser: un derecho del pueblo y un arma para su liberación.
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