Hace aproximadamente dos años, un grupo de profesionistas, empresarios hoteleros, personas de la sociedad civil reconocidos de diversas universidades y centros educativos, se congregaron, y en mesas de trabajo discutieron la viabilidad del rescate del lago de Pátzcuaro.Las opiniones fueron encontradas en el sentido de que el lago es un organismo vivo y que en gran medida depende del cuidado y la atención que el ser humano le dé al vaso acuífero, y que, por consiguiente, de allí depende que viva o que muera.Aparentemente así de sencillo se ve el problema.
En la práctica, desde hace muchos años los habitantes de la rivera del lago tienen la sensación de que se han invertido millones de pesos por parte de los diferentes gobiernos municipales, estales y federales, pero en los hechos no se ven resultados, el Lago de Pátzcuaro se sigue muriendo a la vista de millones de personas que a diario pasan por la ribera, el lugar donde se asentó por primera vez el pueblo purépecha, nuestros antepasados se sintieron orgullosos y la cuidaron con valor, inteligencia y como verdaderos guerreros defendieron los territorios que los Aztecas en varias ocasiones quisieron dominar, pero mordieron el polvo gracias a la pericia de nuestros antepasados.
Los purépechas son un grupo étnico del estado de Michoacán, demográfica y territorialmente mayoritario.En la porción lacustre habita el 16.2 por ciento del total de 102 mil 195 hablantes de lengua purépecha que se distribuyen en los 23 municipios de la región. La zona lacustre abarca los municipios de Pátzcuaro, Erongarícuaro, Tzintzuntzan y Quiroga.En el conjunto de estos municipios se distribuye un total de 127,340 habitantes, de los cuales cerca de 14 % declaró hablar lengua indígena.
Tomando en cuenta que estamos ante un gran reto, se han hecho varias reuniones en diferentes comunidades como Quiroga, Tzintzuntzan, Erongarícuaro, Pátzcuaro, Cucuchucho, San Pedro Pareo, Ajuno, entre otras comunidades y colonias populares de Pátzcuaro, con el fin de medir varios aspectos que son vitales para el propósito que nos hemos echado a cuestas. Sabedores de que es de vital importancia la participación de la población en el problema del rescate del lago, tiene que estar relacionado con la forma de vivir de todos los pobladores, su situación económica, sus tradiciones y un plan a futuro que vaya acorde con los usos y costumbres de las comunidades, sin dejar de lado los avances de la ciencia y la tecnología con el fin de mejorar su desabollo material y espiritual.
El grupo del rescate el Lago Pátzcuaro, está encabezado por el ingeniero Omar Carreón Abud, nuestro líder estatal del Movimiento Antorchista, el arquitecto Carlos Delgado Villareal, presidente de hoteles y moteles de Pátzcuaro y el Ing.Mariano Días Delgado, empresario de la región de Pátzcuaro, todos ellos, hombres comprometidos con el medio ambiente y en especial con el rescate del lago, a pesar de que el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador se comprometió en campaña rescatarlo, a dos años de estar en la silla presidencial no se ha hecho nada y no ha destinado ni un peso; este grupo sigue en pie de lucha y se han hecho una serie de actividades, como reforestaciones de más de 100 mil pinos en diferentes comunidades, así como faenas de limpieza en prácticamente todas las comunidades, además de que el ingeniero Omar Carreón, en su calidad de diputado local, plateó en el Congreso del estado un punto de acuerdo donde se exhortaba al presidente de la república apoyar el rescate del lago de Pátzcuaro, sin que hasta la fecha haya alguna respuesta.
Hace falta un proyecto integral que abarque todas las aristas del fenómeno y en ese aspecto se requiere de la intervención del gobierno federal con los recursos necesarios para contratar a los mejores científicos, investigadores e instituciones que auxilien para que hagan el mejor diagnóstico y así darle la medicina necesaria para salvar el lago que ha inspirado a artistas, pintores, poetas, escritores, y que les ha dado vida y felicidad a millones de seres humanos de todo el mundo.
El diagnóstico debe de tomar en cuenta a las poblaciones ribereñas, ya que nunca han sido partícipes de un diagnóstico bien estructurado, cada comunidad es un mundo con sus usos y costumbres propios, cada comunidad tiene una visión diferente a las demás, con iniciativa propia, y con la aportación de una asamblea general que siempre es superior a la individualidad.No se han complementado aún las investigaciones que muestran la información de mediciones e indicadores físicos y biológicos tantos del lago como de su entorno terrestre, todo esto tiene que ver con la profundidad del lago, calidad del agua, estado de erosión de los suelos, volumen de pesca etc.
El Movimiento Antorchista en estos dos años ha sido partícipe de esta importante tarea y de concientizar a la población de tan importante proyecto, por eso estamos convencidos de que el lago de Pátzcuaro se puede rescatar, se requiere voluntad política de las autoridades y que destinen los recursos necesarios, que ellos lo apliquen y la población seguro que estará vigilante de que tenga un buen fin.Estamos a tiempo de hacer algo, mañana puede ser demasiado tarde.
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