*Festejarán más de 15 mil antorchistas 26 años de lucha y progreso el 17 de julio.
*Antorcha, dirigida a nivel nacional por Aquiles Córdova Morán, cuenta con más de 1 millón 500 mil agremiados en todo el país.
De entre los casi nueve millones de capitalinos, miles han sido beneficiados con alguna obra de infraestructura, servicios o programa social gestionado por el Movimiento Antorchista, organización política que inició sus cimientos hace 34 años y que hoy ilumina más que nunca a la Ciudad.Con un proyecto claro de trabajo, los dirigentes concientizan a la gente de las delegaciones donde trabajan para que llegado el momento, también se lancen a la conquista del poder político.
Durante más de tres décadas, la lucha no ha sido fácil, pues se ha tenido que lidiar con la era del priismo de oídos sordos, y la de los gobiernos perredistas de represión y agresión, aunado a los delegados desentendidos ante las demandas de miles de familias. Ante esta situación no hubo marcha atrás y hoy los resultados son palpables en varias delegaciones con: vivienda, regularización de predios, servicios públicos, escuelas, lecherías, calles pavimentadas, entre otros.
Los iniciadores del trabajo antorchista traen a su memoria los momentos difíciles, pero eso no los hace retroceder, al contrario dicen,han sido una motivación para la lucha que sigue."Me casé con la organización y seguiré con ella", "Antorcha es mi familia", "aquí seguimos, en pie de lucha", "lo que logramos nos motiva para decir a los demás que Antorcha sí cumple", afirman vecinos que dieron los primeros pasos al lado de esta importante organización.
En julio de 1984, más de una decena de habitantes de la colonia Ampliación Benito Juárez, asentada sobre las laderas del Cerro del Chiquihuite, en la delegación Gustavo A.Madero, se organizaron en el Movimiento Antorchista, a invitación de Angélica Villa, Darío Candelas, Mario Núñez, Carmen Velázquez, María de la Luz Sifuentes, Guadalupe Villalobos y Humberto Gutiérrez.El primer acercamiento fue para hacerles la invitación a que se alfabetizaran, posteriormente para atender las demandas de la colonia, que eran muchas.
Seis años después de hacer trabajo en la zona, el 19 de septiembre de 1990 se forma la colonia "6 de Junio".La primera creada formalmente, pues la necesidad de vivienda por parte de cientos de familias de aquella región era evidente.Un grupo de solicitantes adquirió un predio para edificar las viviendas, posteriormente vendría la introducción de servicios básicos, escuelas y demás beneficios, todos gracias a la lucha organizada por parte de los vecinos y dirigida por Humberto Gutiérrez y María de la Luz Sifuentes.
Las primeras luces
Entre calles empinadas, callejones y escaleras que conectan la avenida principal con las viviendas asentadas en las laderas del Cerro del Chiquihuite, viven cientos de familias, algunas fueron las pioneras en la construcción y desarrollo de las mismas.Provenientes de San Luis Potosí, Estado de México, entre otras entidades en los años ochentas, arribaron hasta este punto de la ciudad, don Félix Martínez, que ahora tiene 70 años, pero llegó muy joven; doña Pascuala Ramírez con 80 años tiene muchos recuerdos sobre el desarrollo de la colonia Ampliación Benito Juárez.
El matrimonio integrado por Dionisio Cervantes Hernández y Felicitas Cruz Bautista, con 54 años de casados llegaron hasta la delegación GAM con una hija pequeña; con otros más, son quienes tuvieron el primer acercamiento con Antorcha, que en esos años iniciaba la ardua tarea de luchar por mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.
"Un año después de los primeros encuentros con los maestros de Antorcha, iniciamos de manera abierta con los trabajos.Entre los primeros logros se encuentran la pavimentación de calles, la introducción de drenaje y agua potable, así poco a poco se fue sumando la gente", explica don Félix Martínez.
Quien también refleja años de lucha, es doña Pascuala Ramírez, originaria de Guanajuato, "nada fue fácil, hubo agresiones por parte del Gobierno de la CDMX, pero desde el primer momento decidí sumarme a la lucha, porque era necesario.No teníamos nada, cargábamos agua en burros, fuimos criticados y se nos decía que hasta aquí nunca subirían vehículos, vivíamos marginados.Gracias a la lucha y gestiones, unas seis mil familias se beneficiaron", puntualiza.
Eduardo González Carmona se integró al trabajo de la organización en 1985, y a partir de ese momento integraron el Pleno (Comité) de la colonia para continuar con las gestiones."La necesidad de varios servicios llevó a la gente a organizarse, empezamos con la compostura de calles para que pudiera acceder el transporte, luego seguimos en 1988 con el servicio de electricidad, después con el agua potable y continuamos con la construcción de un kínder y una lechería", refiere entre gratos recuerdos acerca del desarrollo de la colonia.
En todos los años de lucha en aquella zona de la Gustavo A.Madero y en lo que fue primero Departamento de la CDMX y ahora Jefatura de Gobierno, el trabajo fue encabezado inicialmente por Everardo Lara Covarrubias, Rodolfo de la Cruz, Estanislao López, Omar Carreón Abud, y en años recientes por Homero Aguirre Enríquez y Gloria Brito Nájera y hasta la fecha ha estado orientado, a nivel nacional, por Aquiles Córdova Morán; en la ciudad influyó el trabajo de Rosa María Dávila y Javier Montaño.
Poco a poco el trabajo organizado hizo eco en los alrededores y se fueron sumando más familias.No fue nada sencillo, explican, pues los dirigentes sufrieron amenazas de muerte, agresiones verbales y corretizas a balazos por parte de personas que se oponían al progreso, pero con el apoyo de la gente lograron avanzar.
Una vez que se iban consolidando los servicios públicos e infraestructura para los habitantes de la colonia Ampliación Benito Juárez, surgieron más necesidades, las principales en esos momentos e incluso en la actualidad- fue de vivienda.Un grupo de solicitantes recurrió al apoyo del antorchismo para tener una vivienda, después de búsqueda y gestiones encontraron un predio en la zona y tras realizar los trámites legales, cerca de 400 familias lograron un terreno para edificar sus hogares.
El 19 de septiembre de 1990 se inició la creación de la primera colonia antorchista en la Ciudad de México, la "6 de Junio", a partir de ese momento entre los vecinos y bajo la dirección local de Humberto Gutiérrez, María de la Luz Sifuentes y Guadalupe Villalobos, iniciaría la lucha por los servicios básicos.
La escuela primaria "Wenceslao Victoria Soto", abrió sus aulas de manera provisional en 1991 actualmente atiende a casi 800 alumnos,fue resultado de la lucha.Guadalupe Villalobos, fue la gestora y junto con los padres lograron que tuviera las condiciones para los niños.Pendiente, está la construcción de la escuela secundaria "Wenceslao Victoria Soto", que a pesar de que hay recursos aprobados por seis millones de pesos, las autoridades actuales de la Ciudad se niegan a realizarla, cuenta con clave oficial y predio.
Poco a poco la gente veía que con Antorcha sí hay resultado, por lo que se agremiaron más personas.En 1994 se forma la colonia Tlacaélel, a iniciativa de un grupo de trabajadores de una empresa galletera quienes se organizaron ante la necesidad de vivienda.Ya en 1997 se inicia la gestión para la construcción de una unidad habitacional, misma que fue inaugurada en 2002 con el nombre de "Jorge Obispo" con casi 200 departamentos.
"Siempre era un no, no hay dinero, no habrá nada, ponían muchas trabas para que no se nos construyera la unidad habitacional", recuerda doña Leonor Macías Naranjo sobre la respuesta que les daba el gobierno de la CDMX, encabezado en ese momento por Cuauhtémoc Cárdenas.
Agrega que ese periodo, fue de los más difíciles, entre 1997 y 1999 pues la autoridad local a cargo del PRD mostró su verdadero rostro, de agresión, represión y calumnias.Precisamente por encabezar esa demanda, fue agredido brutalmente Everardo Lara Covarrubias y varios compañeros más, además el plantón que mantenían en el Zócalo fue desalojado violentamente la madrugada del día 17 de septiembre de 1998, previo al informe del jefe de Gobierno, los antorchistas fueron "sacados" de la ciudad.
"A las tres de la mañana fue, estaba lloviendo y llegaron los policías, quitaron todo, golpearon a las compañeras, las tiraron al piso y las arrastraban, los compañeros ayudaban pero también fueron golpeados, 20 resultaron con heridas más graves y varios de nuestros dirigentes que estaban ahí.Los policías nos sacaron, de la ciudad, si nos agarraban nos madreaban y así nos iban llevando hasta el Metro La Paz", recuerda doña Leonor, que ese día se encontraba en el plantón, quien agrega que a 20 años de gobierno de izquierda, la situación no ha cambiado, continúan las agresiones y no se atienden las demandas de la ciudadanía.
El trabajo de aquellos años en GAM, fue el arranque para que después se extendiera a otras delegaciones."Poco interés tendría si nos hubiésemos quedado en una sola colonia, el trabajo se amplió a otras delegaciones, fue una lucha larga e intensa, pero había un ideal, mucho entusiasmo y veíamos una ciudad colmada de problemas, a pesar de las carencias que teníamos como grupo naciente", puntualizó Everardo Lara Covarrubias, dirigente del antorchismo en la década de los 90.
La lucha del antorchismo en la Ciudad de México, el semillero nacional
Después de que el Ejército expulsara a un grupo de estudiantes y profesores de la Escuela Nacional de Agricultura hoy Universidad Autónoma Chapingo,en el otoño de 1976, por encabezar la lucha para que la Escuela se transformara en Universidad, la capital del país fue uno de los espacios donde varios empezaron a realizar trabajo de organización, Everardo Lara Covarrubias uno de ellos.Otros más se dirigieron a sus estados para educar y organizar a la gente, como ocurrió con Tecomatlán, en Puebla, lugar de nacimiento del iniciador del movimiento, Aquiles Córdova Morán; esos fueron los primeros pasos que dio el naciente Movimiento Antorchista.
En 1985 fue creada la Preparatoria Lázaro Cárdenas (PLC), plantel Balderas, una escisión de la Prepa Tacuba, después el proyecto se ampliaría a Cuautitlán Izcalli, Aragón, Tláhuac, Azcapotzalco, Nexquipayac y GAM.La PLC surge cuando un grupo de estudiantes encabezados por Jesús Tolentino Román Bojórquez y Maricela Serrano Hernández, buscaban mejores condiciones para estudiar, ya que en la Preparatoria Popular Tacuba perteneciente a la UNAM,abundaban grupos radicales que se hacían llamar "anarquistas", quienes controlaban los turnos matutino y vespertino, pero que no estudiaban.
El proyecto de preparatoria popular surgió después del movimiento del 68, y tenía como finalidad brindar educación gratuita a los jóvenes más pobres del país, al egresar tenían el pase directo a la UNAM.Pero en el caso de la prepa Tacuba, se había olvidado este principio.El propósito de la PLC era recuperar las banderas originales y así fue, enseñó a miles de jóvenes, hijos de trabajadores, obreros y campesinos.Hasta 1990 también los egresados de la PLC ingresaban a la máxima casa de estudios del país, pero con la reforma universitaria, se retiró la incorporación.
A 33 años de existencia, la institución continúa con su proyecto de impulsar una educación democrática, crítica, científica y popular.Son ya 30 generaciones, es decir, más de 35 mil mexicanos han pasado por sus aulas.Como resultado del trabajo que se impulsó en varias escuelas, como los CCH, la UNAM, las FES y desde luego en la PLC surgieron líderes sociales que hoy encabezan luchas a lo largo y ancho del país."Después de la lucha en Chapingo, impulsamos la educación para los hijos de las clases populares, para el pueblo; la PLC fue ese proyecto, la lucha del antorchismo de la capital ha contribuido al desarrollo nacional", recalca Lara Covarrubias.
A 26 años de lucha en el corazón del país
De una decena de antorchistas que iniciaron el trabajo en la colonia Ampliación Benito Juárez, y quienes también formaron la primer colonia "6 de Junio" en la delegación Gustavo A.Madero, hace 26 años, ahora se ha multiplicado a más de 20 mil en la ciudad, con presencia en diez delegaciones.
En retrospectiva, la dirigente en la Ciudad, Gloria Brito Nájera da cuenta de los logros, entre los que destaca vivienda y servicios públicos: sobresalen cinco unidades habitacionales que son el hogar de mil 500 familias o más de 20 mil mexicanos.En programas sociales, miles de ellas se han beneficiado, igualmente en servicios educativos y vías de comunicación, todo ello suma una inversión gestionada de más de 600 millones de pesos.
Pero también en deporte y cultura ha trabajado el antorchismo, además de haber conseguido empleo y servicios de salud por una cantidad que supera los 25 millones de pesos.La labor continúa, para que los gobiernos no se desentiendan de sus obligaciones y que inviertan en los ciudadanos los recursos que se obtienen a través de los impuestos y los etiquetados por la Federación, señala la dirigente.
En estos años, la organización antorchista ha crecido a nivel nacional, impulsando el amor por las bellas artes y el deporte.Dicho trabajo también se ha reflejado en la Ciudad, al formar equipos deportivos y culturales que incluso han alcanzado profesionalismo de talla nacional.
Víctor Roldán Hernández, ex arbitro profesional y ahora responsable del trabajo deportivo del antorchismo en la capital, explica que en el país la situación para el deporte es deplorable, pues no se tiene un verdadero plan rector para que las autoridades desarrollen el deporte en forma masiva, incluso se sienten ajenos al tema y no se invierten los recursos necesarios.
Por lo que Antorcha, para mejorar esta situación ha implementado que entrenadores profesionales acudan a las colonias de las distintas delegaciones con jóvenes de bajos recursos a quienes se les enseñan los deportes populares como el futbol, basquetbol, voleibol y atletismo y se les inscriben en ligas para que practiquen deporte de alto rendimiento, logrando con esto jóvenes más sanos, además de que se alejan de los vicios.
La realidad social y económica del país hace que se acerquen cada vez más personas a la organización, Gloria Brito reitera que a través de la gestión y lucha se avanzará, superando incluso la represión gubernamental; como la que sufrieron el pasado 5 de abril varios de sus compañeros, quienes fueron golpeados por cientos de granaderos cuando exigían en las afueras de las oficinas de Miguel ángel Mancera solución para las 300 familias del predio conocido como La Ciénega, ubicado en la delegación Tláhuac, a las que el gobierno de la ciudad mandó a demoler sus casas para favorecer a la transnacional Walmart.
"Fieles a nuestros principios desde que nació nuestra organización hace 42 años, buscamos la justa distribución de la riqueza y el crecimiento en nuestras filas, para llevar al pueblo pobre a tomar el poder y con éste hacer un cambio en el modelo económico para el bienestar de los que menos tienen", puntualiza la dirigente social.
El 17 de julio, miles de antorchistas festejarán un año más de lucha y "estamos ampliamente convencidos de los ideales de nuestra organización, nos sentimos orgullosos de ser los únicos que no hemos abandonado nuestros principios, porque desde que nacimos buscamos el reparto equitativo de la riqueza y combatir la pobreza", concluye la dirigente.
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