Como todos sabemos, el jueves 15 de junio liberaron a Gonzalo Martínez, que era un preso político originario de Coyomeapan.
Según los diálogos que se tuvo con gobernación, tras la liberación llegaron a unos puntos de acuerdo que se deben de cumplir. En caso de que no se cumplan, se vuelve a activar las órdenes de aprehensión de los cuatro compañeros y otras carpetas más de los ciudadanos de Coyomeapan.
Ahora bien, la pregunta es: ¿por qué tanta represión a un pueblo indígena que tiene la razón, por qué el gobierno del estado nos pone cartas en el asunto, en lugar de que resuelva de una vez este problema político? Recordemos que los cuatro luchadores sociales nunca cometieron los crímenes que les imputan, todos fueron fabricadas y es un crímen atroz hacia un pueblo indígena que se siga cometiendo este tipo de actos. Tratar a un indígena como delincuente y violar sus derechos está sobre la ley y es necesario poner cartas en el asunto y voltear hacia el municipio de Coyomeapan.
En Coyomeapan sigue igual como se inició; no hay nada resuelto. Porque la lucha se inició por el tema político de que ya no querían que siguiera gobernando la familia Celestino.
En el transcurso del tiempo fueron reprimidos y encarcelados, y las muertes que lamenta el municipio siguen igual, no hay gobierno para ellos. Y ahora va la pregunta ¿seguirá así?, ¿cuándo actuará el estado?, ¿hasta que haya más muertos? Es necesario que se analice la situación dé Coyomeapan y que se resuelva el tema político que están viviendo por qué el poder lo tiene el estado y tiene que aplicarlo.
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