Se acaba algún producto esencial en casa y aunque acabas de cobrar tu quincena y vas a la tiendita de don Juan, resulta que no te alcanza para adquirir todos los productos que necesitas, pues los precios de los productos subieron y ya no puedes comprar lo mismo, pero ¿por qué subieron los precios?, el mal manejo de la economía nacional está detrás de este gran problema: la inflación.
El 9 de agosto del año en curso, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) informó que la inflación se aceleró un 8.15 por ciento en el país, alcanzando niveles mayores que no se veían desde hace 20 años, cuando en diciembre del año 2000 los precios se incrementaron en 8.96 por ciento. Pero amable lector, ¿sabe qué es la tan famosa inflación? ¿Cómo nos afecta la inflación a los pobres?
La inflación es un proceso provocado por el desequilibrio entre la producción y la demanda de productos, disminuyendo así el poder adquisitivo, suben los precios y el dinero vale menos. Por tanto, no permite adquirir los mismos bienes o servicios en un periodo de tiempo en su comparativo con el promedio del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), esto refleja en primer lugar el mal manejo de la economía por parte del gobierno en turno, en este caso hoy vemos el pésimo manejo de la 4T en los casi cuatro años que llevan en el poder.
Pongo cuatro ejemplos que están a nuestra vista, de acuerdo a datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en los municipios del oriente mexiquense en el mes de enero de este año, el kilogramo de huevo oscilaba entre los 34-38 pesos, hoy está entre los 42-47 pesos; el litro de aceite estaba entre los 4550 pesos, hoy está entre los 58-65 pesos; la tortilla en enero estaba en 16 pesos, hoy está entre los 20-25 pesos; el pastelillo conocido como gansito que se llevó la nota hace unos días, en enero costaba 12 pesos y hoy oscila entre los 15-23 pesos dependiendo del establecimiento, similar a lo que cuesta un kilogramo de tortilla. Cada vez el dinero rinde menos, el salario ya no alcanza para comprar los productos básicos para sobrevivir, lo que demuestra que el gobierno de la 4T es un verdadero fracaso.
Es importante que conozcamos que hay dos índices generales en la inflación, una es la inflación subyacente, que consiste en los indicadores de los precios de la gasolina, el gas, la electricidad, costos del transporte público, las frutas o verduras entre otros, que tuvo un avance de 7,65 por ciento en comparación con julio del año pasado, su nivel más alto desde julio del año 2000. El otro índice es la inflación no subyacente, que consiste en los indicadores de los precios, por factores externos como el clima o los problemas en el mundo, y que tuvo un incremento de 1,09 por ciento en el mes de julio, llegando a 9,65 por ciento a tasa anual. En síntesis, los precios de los productos agropecuarios son los que más incremento tuvieron, con una escalada de 1,64 por ciento, mientras que las tarifas de los energéticos y las autorizadas por el gobierno se incrementaron 0,63 por ciento a tasa mensual, según el INEGI afectando de esta manera a los más pobres, en este caso, a los habitantes del oriente mexiquense que padecen los males de la inflación por el mal manejo de la economía.
En México, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador puso en marcha un supuesto programa para controlar los precios, el llamado Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), en donde a través de diversas medidas esperaba estabilizar el precio de productos que fueron considerados en una canasta básica, como el huevo, pollo, naranja entre otros. Sin embargo, muchos analistas han informado que el impacto del PACIC fue limitado, no ayudó en nada, la inflación sigue en aumento y aún no llega a su punto más alto.
Evidentemente necesitamos un nuevo modelo económico, donde se ejecute una reforma fiscal progresiva que recaude impuestos de manera equitativa y paguen más los que tiene más y no se siga lacerando a los más pobres, ese modelo debe contener un plan de acción para orientar el presupuesto público en el gasto social que favorezca el desarrollo de las comunidades y empresas con una visión amable con el medio ambiente, este modelo debe generar empleos suficientes y con salarios bien pagados, que a la gente sí le alcance para comprar los productos de la canasta básica y que el poder adquisitivo se mantenga estable, que la inflación se controle correctamente estimulando la economía. Estas propuestas son del Movimiento Antorchista Nacional, y se pugna para que el pueblo se atreva a tomar el poder político para echar a andar este ambicioso proyecto de nación. Te invito a sumarte.
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