**El clamor desde las casas de la gente pobre: "Nomás nos falta echar señales de humo.¿Qué más quieren el presidente López Obrador o el gobernador, los diputados o los municipios? ¿Ver a la gente muerta por el hambre, encerrada en sus casas?
Chihuahua, Chih. En El Orranteño y Las Varas, los testimonios son contundentes.Sólo hay que fijarse un poco en cómo son las condiciones de la gente, sus rostros y sus viviendas.En estas comunidades del municipio de Saucillo, quieren comida, solicitan despensas, exigen de los gobiernos federal y del estatal, un programa de abasto alimentario.
Acá, por segunda semana consecutiva, los pobladores sacaron cartulinas y trapos blancos, en señal de necesidad, de que hay hambre en las familias.En el municipio de Saucillo, la gente vive primordialmente del campo y del comercio, pero jornaleros y ambulantes, los albañiles y todos aquellos con trabajos inseguros, como los vendedores de chácharas, están encerrados por la cuarentena, ya no hay el poquito dinero que antes entraba, porque no hay trabajo.
En la capital del estado, igual.La señora Karla Teresa Terrazas, de la colonia Unidad Proletaria, da su testimonio: "Soy mamá de cinco hijos, estoy pidiendo el apoyo al gobierno federal, estatal y municipal, ya sea que nos apoyen con una despensa, con económico, ahorita estoy desempleada por la cosa está de la cuarentena, yo vendía tamales".
También en Granjas del Norte, salen niños y amas de casa a dar testimonio de lo que sienten.Ya les comienza a apretar la tripa, "ya queda poco arroz y tantitos frijoles, pero ya no se pueden comprar más a la semana, o a la quincena, o del diario", dice una de las manifestantes, porque así viven muchos en el México lastimoso, del diario.Otra vez, acá, la consigna que ya tiende a generalizarse: "No tenemos comida".
En La Noria, en la ciudad de Chihuahua, y en las meras faldas del majestuoso Cerro Grande, se ven los trapos blancos, ya famosos en el país, por lo que representan.Algunos salen con cartulinas.Pero en una de las casitas, ésta por demás humilde, prepararon una camisa en la puerta.
Otras llamadas del sur de la capital, dirigidas a quien corresponda."No tenemos comida", "Queremos despensas".
En la colonia Cuauhtémoc, pero también en las colonias Vistas Cerro Grande, Clara Córdova y Toribio Ortega, sacan las cartulinas reclamando atención.El reclamo se repite: "No tenemos comida".
"Acá, ni saliendo con un micrófono a pedir ayuda escucha el gobierno" dijo una de las doñas preocupadas por lo que ya está sucediendo y por lo que se vislumbra como una catástrofe social.Es éste un SOS desde las redes sociales."Esperemos que funcione", dicen las señoras.
En Granjas La Soledad, y desde las casas del pobrerío, "Nomás nos falta echar señales de humo.¿Qué más quieren el presidente o el gobernador, los diputados o el alcalde? ¿Ver a la gente muerta por el hambre, encerradas en sus casas?"
"X la comunidad, en casa y sin comida".
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