México no estaba preparado para una crisis sanitaria ni económica como la que está atravesando, miles de personas se encuentran endeudadas con familiares, amigos y algunas instituciones bancarias, miles de negocios de comida y ambulantaje han cerrado, en Jalisco, el gobierno estatal dice que se destinan nueve mil millones de pesos para distribuir entre los tapatíos para aminorar esta crisis, sin embargo, es aún insuficiente para solventar las demandas de la mayoría.
Sin lugar a dudas estamos ante un problema que requiere medidas de fortalecimiento económico pues de acuerdo a diversos estudios realizados por expertos en la materia, esta emergencia sanitaria podría poner en jaque a 12 millones de personas, tal vez a muchos nos parezca poco comparado a los cerca de 120 millones de mexicanos, hablaríamos de que es solo un diez por ciento, y en efecto no sería alarmante si no existieran una gran masa de pobres en nuestro país.
Se cree que solo en estos días de pandemia se perderán más de 17 mil empleos, solo en lo que va de la cuarentena y hasta el mes de septiembre, estamos hablando de que solamente entre agosto y septiembre se perderían 140 mil empleos.
Salir es exponerte al contagio para evitar que miles de empresas cierren o sigan teniendo pérdidas millonarias por la falta de la mano de obra de quienes se encuentran en casa, y sin comida.
Esto es responsabilidad total y absoluta del poder del gobierno federal, pues es en esa esfera en donde se posee el recurso extraído de nuestros impuestos, son ellos los trabajadores de todo el pueblo que es quien les dio ese trabajo y del cual deben dar cuentas, vivir en confinamiento implica muchas cosas, entre ellas la escasez de alimento, y es por ello que la gente se arriesga a salir a trabajar, esperando poder llevar a casa un poco de comida.
Urge un plan sólido para una distribución del recurso a través de despensas, además de equipamiento para el personal médico que valientemente combate en las trincheras y a quienes el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha acusado de querer enriquecerse en esta pandemia, tema que bien da para hablar en otro momento, pero ¡señor presidente! Mientras ellos combaten en sus centros y la gente intenta levantar su precaria economía para no morir de hambre usted hace giras por el país, ¿busca probar su inmunidad o solo recuperar la aceptación pública de quienes ya ha defraudado?
El Gobierno federal deja sus obligaciones para andar en campaña por el país, los mexicanos que se encuentran en pobreza extrema exigen que el presidente se comporte como tal, que gobierne y vele por el pueblo, de manera que nadie se valla a dormir con hambre, que ningún niño no pueda hacer sus tareas por no tener internet. Se requieren mejores condiciones de vida y un cambio verdadero, que de no encontrarlo en este gobierno el pueblo debe crear.
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