Recientemente, la CEPAL (Comisión Económica para América Latina) estimó que la economía mexicana se desplomará un 9 por ciento y que esto provocará que 9.6 millones de habitantes pase a situación de pobreza en el país.En el mismo sentido considera que la contracción del Producto Interno Bruto (PIB) tendrá un descenso de 6.5 por ciento, lo que significa que México será uno de los países que sufrirán mayor caída económica a consecuencia de la pandemia.
Y en una nota aparecida en expansión.mx se señala que, los retiros de las afores por desempleo se dispararon en un 101 por ciento, ya que, en el mes de junio, las personas desempleadas recogieron 1,856 millones de pesos de su cuenta para el retiro, siendo este, el monto más alto que se tiene registro.Mientras la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro (CONSAR) dio a conocer que, en los primeros seis meses del año, los retiros de los trabajadores sumaron 8,569.9 millones de pesos.Dichos datos son una muestra de cómo están viviendo los mexicanos la crisis de desempleo.
Y por si faltara, el Bank of América, señaló que, ante la débil recuperación económica de México, la deuda gubernamental perderá en 2021 la categoría de grado de inversión.Puede ser que la 4T se mantenga optimista sobre la recuperación económica, sin embargo, para el segundo banco más poderoso de Estados Unidos, la crisis se agudizará y traerá graves consecuencias para los mexicanos, el hambre y la covid-19 están golpeando duramente a todos.
Mientras hay gobiernos, que han adoptado medidas económicas para proteger a sus trabajadores, por ejemplo, están pagando temporalmente la nómina los empleados de aquellas empresas que están en problemas; otros han implementado el seguro de desempleo, o bien, realizan ayudas directas a todos ellos que no tienen empleo, además de impulsar los apoyos a las PYMES, cancelando o postergando el pago de diversas contribuciones fiscales.Pero Andrés Manuel López Obrador ha hecho oídos sordos a estas peticiones que se le han hecho por millones de mexicanos argumentando que dichas medidas son neoliberales y que, en el país, este modelo económico ya ha sido desterrado.
Es por ello que, todos los días nos enteramos de verdaderas tragedias que están viviendo millones de familias ante la falta de recursos económicos para sostenerse.Es verdaderamente desgarrador saber que además diariamente se incrementa el número de muertes en el país, muchos mexicanos se ven obligados a salir a las calles, porque el hambre los está matando y no les queda otro remedio que ir en busca del alimento para sus familias.Así vemos como el propio Gobierno federal alienta, por un lado, a que la gente salga en esta nueva normalidad y por el otro, aunque de manera muy contradictoria nos hace el llamado a quedarnos en casa, mientras su insensibilidad lo lleva a negarse a implementar un plan nacional de distribución de alimentos que tanto está urgiendo.
Como una forma de ocultar su detestable política en detrimento de la población, se pone a crear shows mediáticos como la detención de Emilio Lozoya o la del exgobernador de Chihuahua, para distraer la atención de los mexicanos, haciéndonos creer que ahora si se está combatiendo la corrupción en nuestro país y que ello nos traerá progreso y bienestar.Pero bastaría ver que un 70 por ciento de la asignación de contratos que ha realizado este gobierno, son de manera directa, para darnos cuenta que esto no es así, se está persiguiendo y encarcelando a los opositores políticos, mientras se favorece y privilegia a todos los que se alinean del lado del poder.
Y finalmente para cerrar la pinza, pretenden apoderarse del INE y en algunos estados como en el caso de Puebla, que pretende ser un laboratorio para luego replicarse en todo el país, los diputados morenistas preparan reformas a las constituciones locales con el objetivo de asegurarse su permanencia en el poder, en las elecciones que se realizarán el año entrante.Todas estas no son más que maniobras electorales que buscan perpetuar en el poder a quienes con su slogan de "primeros los pobres" engatusaron al pueblo trabajador sediento de justicia y bienestar.
Es necesario que todos aquellos que vemos con indignación y coraje cómo se está destruyendo el país, tomemos conciencia de ello y no permitamos que ahora una nueva camarilla de pillos siga destruyendo a nuestra nación.Hoy, se hace necesario más urgente aún, la educación y organización del pueblo trabajador, que como un solo hombre se levante y diga basta a esta situación.La construcción de un mundo mejor es posible pero sólo a condición de verdaderamente hacer un cambio de modelo económico que atienda las necesidades más apremiantes de quienes hoy son ignorados y llevados a la muerte, si no por covid-19 sí por el hambre.
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