Chetumal, Quintana Roo.- Con gran indignación y enojo, vecinos de la Colonia Fraternidad Antorchista, conocieron la noticia por los medios de comunicación, de que el alcalde, Otoniel Segovia Martínez, devolvió recursos federales por no haberlos ejercido en tiempo y forma para el financiamiento de obra pública que beneficiara a las comunidades.
Con ese dinero público ya etiquetado el Gobierno municipal puedo resolver antiguas demandas sociales de zonas urbanas y rurales; sin embargo, no lo hizo.
"Durante dos años hemos acudido innumerables veces a las oficinas de la presidencia municipal, exponiendo la urgencia de que se pavimente el camino de acceso a la colonia Fraternidad Antorchista", dijo Bertha Portilla Díaz, vecina.
Son 3 kilómetros que separan a esta colonia de la carretera principal; un camino intransitable para todo tipo de vehícu donde tanto automovilistas como motociclistas se ven expuestos a descomposturas mecánicas o a quedarse atascados, sobre todo en época de lluvias.
Y para quienes no tiene ninguno de esos vehículos y recurren al transporte público, sufren doblemente, porque los taxis que acceden a entrar les cobran una tarifa más alta o de plano les niegan el servicio.
"Al presidente municipal, personalmente le hemos dado estas y otras razones, incluso sostuvimos una reunión donde Otoniel Segovia y el dueño de la quebradora, de apellido Mercader, acordaron que desde 2019 iniciarían trabajos para pavimentar los tres kilómetros, por su parte el municipio elaboraría el proyecto de la obra y pondría recursos económicos, mientras que la empresa pondría maquinaria y material&rdquo, comentó Portillo Díaz.
Empero, llegó 2021 y ninguna autoridad ha cumplido la promesa que hizo; por el contrario, dejaron perder los recursos.
"Da coraje enterarse que Otoniel Segovia, tanto en 2019 como 2020, ha regresado recursos federales que incluían el rubro de pavimentaciones, los ha tenido que devolver por no utilizarlos para lo que estaban programados&rdquo, asentó la ama de casa.
Subrayó que es más indignante que todas las veces que acudieron, en comunidad, en busca de una respuesta del Gobierno municipal, la respuesta siempre fue que no había recursos para obra pública.
Acentuó que, si en tiempos normales los habitantes de la colonia Fraternidad sufren porque su camino de acceso no está pavimentado, con la pandemia de covid-19, es para ellos un calvario sobre todo para quienes enferman y tiene que acudir a los hospitales.
Doña Bertha remarcó que, si la incapacidad del alcalde morenista fuera un virus, no es exagerado decir que él está enfermo de su propio virus que es más dañino que la covid-19.
"El virus de la incapacidad que padece el alcalde no le causa daño a él, sino a sus gobernados, sobre todo los más pobres, como quienes habitan la Fraternidad Antorchista. Está claro, como la luz del día, que el antídoto contra el virus de la incapacidad es no volver a votar por los candidatos de la llamada 4T, porque no rinde buenas cuentas cuando ya son gobierno&rdquo, acotó.
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