En México se está viviendo una crisis económica y de salud, en medio de la pandemia del SARS-CoV-19 -también conocido como coronavirus- lo que ha puesto en evidencia a un gobierno federal que se autonombra de la cuarta transformación, ante los ojos de los mexicanos.
Es la ambición desmedida por perpetuarse en el poder de la patria a costa de lo que sea, lo que ha llevado a la manipulación de ideas y compra de conciencias, olvidando el motivo principal que está asfixiando en estos momentos al pueblo, tomando como prioridad su proyecto de nación, el que le acomoda, no el que les conviene a los ciudadanos.
Son los constantes ataques esgrimidos en contra de quienes han osado pensar diferente en México, que como Antorcha ejercen demandas serias y congruentes, urgiendo al gobierno federal a brindar la atención urgente que se requiere en estos momentos para poder enfrentar esta epidemia.
Es la mentira y el engaño aderezados con el poder del mandatario lo que mantiene a los mexicanos en un verdadero dilema, por una parte, al no presentar la realidad de lo que está sucediendo con la covid-19, en un descarado ocultamiento de muertos, para tratar de mantener aguas tranquilas a pesar de saber que esas falsedades lejos de tranquilizar a la gente, la colocan en mayor riesgo, en el umbral de la muerte.
Aunado a ello, se ha derrumbado estrepitosamente la esperanza de un pueblo que hoy se siente engañado y traicionado, que solo ha mirado estupidez tras estupidez, cometidas por quien dijo transformaría a la patria entera.
Se han engolosinado tanto con el poder que entre ellos mismos se hacen la guerra, llevándose entre las patas a quienes ¿confiaron en ellos? para edificar una patria justa y verdadera, plena de oportunidades para las nuevas y futuras generaciones.
Es la pobreza que en tan poco tiempo se ha agudizado y que hoy mantiene de rodillas a quienes viven en esa difícil circunstancia, sin opciones de desarrollo, sin alimento y lo peor, sin poder acceder a recibir atención médica.
No se puede pasar por alto la respuesta lapidaria de quienes detentan el poder político de la patria actualmente, hacia quienes desde hace más de cuarenta años han luchado por desterrar la miseria de México, por eso lanzan calumnias, inventan cosas, mienten y se revuelcan en sus falsedades cuando ven que éstas no surten efecto, porque no es con eso como lograrán resolver la pobreza de la patria, ni es con ello como habrán de frenar el avance de los antorchistas.
Porque la explicación inmediata de los ataques y triquiñuelas provenientes del gobierno de la "cuarta transformación" en contra de Antorcha y sus liderazgos, es el miedo, ese terrible temor que tienen de ser destronados de su reinado, el que están edificando para seguir manipulando a los mexicanos como sus súbditos, como sus criados, como sus subordinados, cuando el pueblo es quien verdaderamente los coloca en esas encomiendas.
El mal llamado Movimiento de Regeneración Nacional, con su propietario, se ha olvidado de la gente, la ha abandonado a su suerte, en medio de esta pandemia mundial le ha esquilmado recursos a los médicos y enfermeras, está matando de hambre y necesidad a sus compatriotas, pero no cede en hablar de politiquería futurista y barata.
Por eso aseguramos que la estupidez en México tiene nombre, pero no una estupidez cualquiera, sino la de mayor gravedad, la que es igual de terrible que el coronavirus, la de Andrés Manuel López Obrador.
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