Casi 50 años después del nacimiento nuestra organización como Movimiento Antorchista Nacional, seguimos educando y concientizando al pueblo mediante la cultura a través de las distintas expresiones artísticas.
Por eso incentivamos a nuestros agremiados para que practiquen poesía, canto, danza, oratoria y teatro, y así conozcan, sientan y disfruten de las bellas artes.
Con este objetivo, la organización social, con presencia en los 32 estados de la república, ha organizado diferentes eventos para dar espacio a los artistas de cada una de las expresiones culturales.
El teatro debe volver al pueblo y convertirse en una herramienta educativa que sensibilice y transforme a la sociedad para enfrentar los problemas que afectan a la nación mexicana.
Próximamente, se realizará el XXIII Encuentro Nacional de Teatro, los días 22, 23 y 24 de noviembre, en San Luis Potosí, con las categorías “semiprofesional” y “amateur”. Tendrá como sedes el Teatro de la Paz y el Centro de Difusión Cultural Raúl Gamboa, donde se ejecutarán las treinta y dos puestas en escena que podrán disfrutar todos los sectores de la sociedad, ya que la entrada será gratuita.
Nuestro estado, Zacatecas, se presentará con la obra de teatro Los perros, de Elena Garro, que transporta a una sociedad donde se vivía la opresión de la mujer en un contexto dominado por el hombre. Trata de una madre víctima del machismo tras su rapto para hacerla de su propiedad y de una hija cuyo destino ya está escrito, lo que la condena a sufrir el mismo patrón. Sin embargo, la madre hace lo posible para que pueda cambiar la historia de su hija.
Es una obra desoladora sobre el secuestro y robo de mujeres adolescentes, una costumbre establecida en comunidades campesinas de México, y constituye una denuncia social sobre un problema que persiste en la actualidad. De tal forma, el encuentro nacional será un espacio de exigencia de justicia para todas las víctimas de esta práctica.
Cabe señalar que, en este como en otros casos, Antorcha no cuenta con el apoyo gubernamental; todos los gastos corren por cuenta del movimiento. Consideramos que el gobierno no le apuesta a masificar la cultura, pues el papel del teatro se ha deformado: su objetivo de llegar al pueblo se perdió porque se ha privatizado y comercializado, dejando el acceso únicamente a las clases adineradas.
En general, vemos que quien puede disfrutar de las bellas artes es quien tiene la posibilidad de pagar para entrar a una ópera, una demostración de ballet o un museo. Por eso pugnamos para que el artista exprese lo que siente, lo entienda y lo dé a conocer al público, para que la sociedad lo aprecie como una creación producto de la realidad social de su tiempo.
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Antorcha cree y sostiene que, a través del arte, se puede lograr la transformación de la gente en un hombre nuevo, con distinta manera de pensar, que sea más sensible ante los problemas sociales. Así se modificará su ideología y forma de ver la realidad para que se involucre en la solución de los problemas complejos que atañen a la nación mexicana.
Pero para lograrlo es necesario devolver el teatro al pueblo, que deje de estar al servicio del poder político y de las clases poderosas, y que se convierta en una herramienta educativa para los trabajadores y las familias mexicanas, pues es expresión y alma del propio pueblo. Eso es lo que pretendemos con el próximo Encuentro Nacional de Teatro.
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