Hoy 6 de octubre se cumplen ocho años de la desaparición forzada y política de Manuel Serrano, ocho años sin que la presidenta municipal de Ixtapaluca, Estado de México, la antorchista Maricela Serrano Hernández, haya recibido una respuesta clara acerca de los restos mortales de su padre.
Desde su secuestro el 6 de octubre de 2013, la alcaldesa denunció innumerables veces ante todos los niveles de gobierno el delito del que había sido víctima su padre; sin embargo, no se hizo nada para dar con su paradero ni con los responsables intelectuales del secuestro político.
“Concluimos, pues (y está por escrito), que el secuestro era político y que su filo estaba dirigido contra la licenciada Maricela Serrano Hernández, en ese momento presidenta en funciones de Ixtapaluca, Estado de México, e hija de don Manuel. El desenlace de esta brutal tragedia confirma plenamente que se trató de un asesinato político y, por tanto, cometido por políticos”, afirmó el secretario general del Movimiento Antorchista, Aquiles Córdova Morán.
En 2015 la luchadora social, siendo diputada presentó un punto de acuerdo en el que demandó justicia. "Continuaremos buscando sus restos y exigiendo castigo a los asesinos", aseguró.
La Procuraduría General de la República (PGR), en coordinación con la Fiscalía mexiquense, encargadas del caso, para salir al paso, en septiembre de 2014, presentaron a los supuestos secuestradores.
A ocho años de la desaparición de don Manuel, el caso sigue sin resolverse.
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