MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Los “daños colaterales” de la lucha contra la corrupción

image

En días pasados, las declaraciones de la diputada federal Patricia Armendáriz causaron gran revuelo en las redes sociales, pero no por los mejores motivos, y es que la también integrante del partido Morena ha demostrado hasta el cansancio la “fe ciega” que le tiene a su proyecto de nación y al presidente, Andrés Manuel López Obrador, al punto de contradecir hechos tan trágicos y atroces como la falta de medicamentos en nuestro país, provocadas por las mismas acciones insensatas del líder de su partido: “Pues pedí a papás, mamás, enfermer@s que me dieran evidencia de desabasto de medicamentos principalmente de nuestros queridos niños y no me dieron ni una sola evidencia”, dijo a través de un mensaje en Twitter.

A los pocos minutos de la publicación de dicho tuit, la diputada se llenó de críticas y respuestas, principalmente de padres de familia que han sufrido en carne propia el desabasto de medicamentos para tratar el cáncer en menores de edad. Ante esto y las declaraciones de varias ONG y expertos en el sector salud, a Armendáriz no le quedó otra que recular y excusarse en señalar que solamente repetía las declaraciones del secretario de Salud, aceptando en entrevista con la periodista Denise Maerker que, efectivamente se paró el abasto para “luchar contra la corrupción” y que lamentaba “los daños colaterales” que esto había traído (entiéndase “daño colateral” como la muerte de miles de enfermos que no tuvieron acceso a sus medicamentos).

Lejos de las declaraciones de Patricia Armendáriz, que demuestran el servilismo y falta de raciocinio con la que se guía el morenismo, la “lucha a la corrupción” en el sector de los medicamentos, se ha convertido en un problema mortal para millones de mexicanos, que, progresivamente se ha vuelto cada vez más grave. En un artículo de la revista The Lancet, titulado "Falta de Medicinas en México" del periodista David Agren, se dan los verdaderos motivos y consecuencias detrás de estas medidas adoptadas por el presidente desde hace dos años, que van, desde el desconocimiento del área y falta de planificación, hasta el puro capricho de desaparecer proyectos por desaparecer: "El Presidente López Obrador ha culpado a la corrupción, pero los analistas dicen lo contrario (...) los analistas atribuyen la escasez a la falta de planificación, al no apreciar las complejidades de la adquisición de productos farmacéuticos y al pasar por alto las dificultades de distribución".

El estudio también habla de una escasez generalizada, más allá de medicamentos contra el cáncer: “El desabasto más allá de solo medicamentos oncológicos. De acuerdo con la información del Colectivo Cero Desabasto, actualmente el desabasto de medicamentos incluye a medicamentos como metformina, insulinas y vacunas contra la tuberculosis, tétanos y papiloma humano”.

“La lucha contra la corrupción”, dicen, se tradujo en una destrucción del ecosistema de compras públicas, ya que, “desde el 2013 y hasta 2018, en México las compras de medicamentos se realizaban a través de un proceso denominado “Compras Consolidadas” que era organizado por el Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS), la institución de seguridad social más grande de Latinoamérica y, por ende, la mayor consumidora de medicamentos e insumos para la salud”. 

La prueba clara está en que durante estos años de desabasto no hay ningún acusado por corrupción o enriquecimiento en esta área, las acusaciones se remiten a suposiciones, o a discursos repetidos sin sustento alguno, algo parecido a lo dicho por Octavio Gómez Dantés, investigador en sistemas de salud del Instituto Nacional de Salud pública al periódico Reforma en julio de este año: "Pasamos de una situación donde había medicinas y seguramente hubo corrupción a una situación donde no hay medicinas y no sabemos si hay corrupción".

Según estadísticas del mismo Gobierno federal, el abasto de medicamentos no ha alcanzado a llegar al 95 por ciento prometido a nivel nacional, con casos como San Luis Potosí, que presenta un 78.59 por ciento y aunque lo coloca en números rojos, se ubica por encima de la media nacional. En el caso del IMSS, persiste en un 54 por ciento la escasez de medicamentos (quadratin.com 23 de octubre).

Ante las constantes manifestaciones, el gobierno morenista no ha hecho más que atacar a los movimientos tildándolos de meros golpistas o mentirosos, como lo demuestra la investigación de Alejandro Melgoza Rocha, recogida por el Washington Post: “Lo que han recibido por parte de funcionarios públicos, de todos los niveles, ha sido una estrategia para ningunear la falta de medicamentos y atacar a quienes se manifiestan por ello. El más reciente y resonado ataque fue el del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, quien en un programa de televisión pública calificó de mentira el desabasto de medicamentos y a los padres que lo denuncian como -las mismas 20 personas- que surgen durante los periodos de contrataciones con la industria farmacéutica”. Declaraciones como estás, han ninguneado la muerte de mil 600 niños y ha perjudicado a los más de 19 mil pacientes infantiles que se atienden en hospitales públicos, según cifras del Movimiento Nacional por la Salud Papás de Niños con Cáncer.

He ahí la respuesta de un gobierno “humano”, un gobierno que a partir de la ignorancia y el berrinche de su líder, ha condenado fatalmente a millones de mexicanos -en especial a niños- a los que no se les puede garantizar un servicio básico al que tienen derecho. Sin embargo, ellos no lo ven así, para la 4T y sus allegados, son más que “daños colaterales”, cifras, números, sin ver el verdadero dolor y sufrimiento de los mismos que los pusieron en el poder.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más

FOTO DEL DÍA