Los mexicanos ya vamos en el 4º año bajo el mandato de López Obrador, un gobierno que llegó al poder con un número de votos que no se había visto nunca en ningún proceso electoral en nuestro país: 30 millones. Esto fue posible a dos cosas fundamentalmente: la primera, el hartazgo que teníamos los mexicanos hacia los gobernantes anteriores emanados, sobre todo del PRI y un poco después del PAN; mismos que habían tomado al país como botín para robar a manos llenas y la segunda, por el discurso de López Obrador que denunciaba con índice de fuego la situación de corrupción de esos gobiernos anteriores y sobre todo la promesa, ya como candidato, de que si llegaba a la presidencia de la república, traería para los mexicanos, prosperidad, bienestar y felicidad; desde luego que esto sería posible, decía él, eliminando de raíz la corrupción y haciendo justicia encarcelando a los expresidentes y muchas promesas más que a estas alturas todo mundo conoce en sus resultados, pero sobre todo, la promesa por excelencia de su gobierno, que el destinatario principal de su política serían “Primero los pobres”.
¿Qué está pasando a estas alturas con su gobierno? ¿Cómo caracterizar los resultados de la política de López Obrador? Sin duda alguna, que es un mal gobierno, no con malos, sino con pésimos resultados.
Veamos someramente algunas cosas, en la economía estamos viviendo la peor crisis de los últimos tiempos, la elevada inflación de 7.36% con la que cerro México en 2021, si bien es cierto que tuvo un impacto sobre los ahorros de los clientes en los bancos, también es cierto que está teniendo un impacto directo en la economía de millones de mexicanos de escasos recursos que no son cuentahabientes, están viviendo a diario la experiencia de que el poco dinero que logran conseguir se les hace nada en las manos, porque los precios de las mercancías han subido criminalmente: Sube la gasolina y todas las mercancías.
Por el mal manejo de la pandemia, de la economía en general y por la política asistencialista, hoy hay más pobreza y pobres y aumentó la pobreza extrema. Según los datos de la Coneval, basado en el ultimo censo de población y vivienda 2020, en México, entre 2018 y 2020, dos años de gobierno de López Obrador, los mexicanos en condiciones de pobreza aumentaron en 7.3% al pasar de 51.9 a 55.7 millones, o sea, hubo un aumento de 3 millones 600 mil mexicanos más de pobres; en este lapso de tiempo también aumentó el número de mexicanos que están en situación de pobreza extrema, es decir, los mexicanos que ya no encuentran ni siquiera para comer; en este período pues, pasamos de 8.7 a 10. 8 millones de personas en pobreza extrema o alimentaria, como la llaman algunos. Se ve pues, que hubo un aumento de 2 millones 100 mil mexicanos en pobreza extrema para dar un total general de 10 millones 800 mil que viven esta situación; acentuándose este fenómeno en tres estados del país y en orden de gravedad: Chiapas, Guerrero y Oaxaca. Esta realidad es lastimosa y ofensiva para los mexicanos y pone en entre dicho el enunciado de López Obrador de “Primero los pobres”.
En la salud, todo mundo es testigo de la irresponsabilidad criminal de López Obrador en el trato de la pandemia de la covid-19, misma que ha llevado a que varios centenares de mexicanos hayan perdido la vida y en su gran mayoría han sido pobres. Según el reporte que presentó la Secretaría de Salud, al 2 de febrero de 2022, sobre el fenómeno de la pandemia en México, está de la siguiente manera: 5,027,870 el numero total de casos positivos confirmados, 42,181 casos positivos por día en todo el país, 573 defunciones confirmadas por día y 307,493 el total de defunciones en lo que va de la pandemia. Estos datos distan mucho de la verdadera realidad ya que los contagios son muchos mas y la mortalidad está atropellando a la cantidad de 600 mil o mas muertes. Aquí este contagio también se ensañó, y se sigue ensañando en un porcentaje mayor, sobre todo en las familias de escasos recursos y trabajadores en general. Hay una atención pésima a la salud, escases de medicamentos en general, los del cáncer en particular y millones de mexicanos que aún no se han vacunado, etc. ¿Dónde quedó el sistema de salud a la altura de los que hay en Dinamarca como lo prometió López Obrador? Aquí está otro fracaso.
En cuanto a la educación, México encabeza en la lista el peor lugar, pues solo el 25.9% de los jóvenes siguen estudiando después de la secundaria; muchos no terminan la primaria y si la terminan, no ingresan a la secundaria. Este fenómeno está íntimamente relacionado con la situación de la pobreza que hay en México. La firma australiana Asher & Liric dice que México ocupa los peores lugares en educación, salud y seguridad entre los 35 países que conforman la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)
Además, México según el censo de población y vivienda 2020, todavía tiene 4,450,431 personas que no saben leer ni escribir y 10 millones que no concluyeron su educación primaria y a nivel nacional se destacan por su alto número de analfabetas, con relación al total general, Chiapas con el 13.7 % que equivale a 610,531 personas; Guerrero con el 12.5% que en números absolutos equivale a 557,053 y Oaxaca con un honroso 11.8% que equivale a 525,868 personas que no saben leer ni escribir. Aquí no solo se refleja la poca preocupación de los gobernantes anteriores para superar este rezago educativo. El gobierno de López Obrador no solo no se preocupa por esta situación, al contrario, hace recortes al presupuesto y muestra una actitud desdeñosa hacia la educación, ataca a científicos, a la UNAM, al CONACYT y reprime a estudiantes de la FNERRR; pone de secretaria de educación a una señora a la que se le ha comprobado su corrupción y que todo México conoce, aun así, Obrador la sostiene en su gabinete.
En cuanto a la seguridad, México tiene el lugar número doce entre los países mas violentos del mundo, lo que quiere decir que es una de las problemáticas mas alarmantes para la población mexicana; en México también se encuentran las seis ciudades mas violentas a nivel mundial que son Celaya, Tijuana, Ciudad Juárez, Ciudad Obregón, Irapuato y Ensenada; se dice por algunos estudiosos que actualmente nuestro país se ha convertido en el epicentro de la violencia mundial homicida: feminicidios diarios, asesinatos de periodistas, masacres, desaparecidos, secuestros, asaltos, cadáveres embolsados y decapitados, trafico de drogas, trata de blancas, etc.; todo esto ha aumentado en el gobierno de López Obrador porque su política de “abrazos, no balazos” no ha dado resultados.
Por otro lado, en respuesta a las demandas y exigencias de la sociedad civil, ahí donde gobierna la 4T (Veracruz, CDMX, Puebla, Tabasco, etc.) en vez de atenderlas reprimen, persiguen y encarcelan a los movimientos y a sus lideres.
Estando así las cosas, o peor tantito, ¿Cómo se explica que López Obrador siga teniendo respaldo popular? ¿Cómo es esto posible, cuando a luces vemos que por donde se le busque nada está bien? Pienso que el primer factor que influye para que esto esté así, es el rezago educativo en el que están muchos millones de mexicanos y se agrava mas por el hecho de que actualmente hay casi 5 millones de analfabetas y 10 millones que prácticamente apenas si saben leer y escribir; y también porque muchos millones de mexicanos solo han terminado la educación secundaria. Esta situación tiene relación directa con la pobreza de las familias. Un pueblo atrasado culturalmente con este rezago educativo es fácilmente manipulable porque no tiene la capacidad de analizar su situación personal y menos para entender el fondo de las políticas de los gobernantes y se deja llevar por las promesas y dádivas que ellos les dan. López Obrador sabe esto y por eso la prioridad de su política social son los programas asistencialistas, de darles dinero, sin que el pueblo se dé cuenta de que con esa política no saldrá de su pobreza, ni habrá desarrollo para su país. Muchos mexicanos, aunque en el fondo no estén de acuerdo con la política de López Obrador, lo apoyan por conveniencia, es decir, porque algún favor, contratos millonarios o algún empleo tienen dentro de su gobierno; también muchos funcionarios de la 4T apoyan a López Obrador porque en su gobierno han encontrado protección a su enriquecimiento por sus corruptelas.
Mientras el rezago educativo del pueblo, la conveniencia y la corrupción imperen en nuestro país, los gobernantes en turno tendrán las condiciones a su favor, para que en los tiempos electorales, aunque sus resultados sean pésimos e incluso agresivos para el pueblo, sigan teniendo respaldo a su gobierno; en otras palabras se podría decir que en este momento las condiciones son favorables para que López Obrador las manipule y pretenda reelegirse para 2024.
Los mexicanos en general, la sociedad civil y las organizaciones sociales tienen que trabajar mucho para lograr que el pueblo supere esta situación, se concientice y pueda elegir de una manera distinta, libre y consciente a sus gobernantes.
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