MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

La austeridad republicana y la pobreza franciscana matan

image

El presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador, desde que inició su gobierno dijo que la austeridad republicana sería el signo de su gobierno, es decir, nada de lujos ni gastos excesivos que, aparentemente, eso está muy bien, pero poco después lanzó el lema de la “pobreza franciscana”, es decir, nada de gastos superfluos, pero desafortunadamente las dependencias han llevado esto a extremos inimaginables, por ejemplo:

1. No hay dinero para mantenimiento de carreteras; los accidentes, los derrumbes son el pan nuestro de cada día.

2. En el Metro de la Ciudad de México, después de la tragedia de la Línea 12, los accidentes siguen cobrando vidas, acá deberían de dedicar las carretadas de dinero que se están utilizando en el Tren Maya y no allá donde no se necesita.

3. La peor parte la lleva el sector salud, ahora no hay servicio de vectores, no hay fumigaciones para detener la plaga de mosquitos y zancudos transmisores del dengue. Ahora estamos sufriendo una verdadera calamidad, pues muchas personas humildes, en la Mixteca Baja de Puebla, ya han sido contagiados, tanto en San Pablo Anicano como en Guadalupe Santa Anna.

Incluso hemos intentado que venga personal de la jurisdicción sanitaria, pero argumentan “estar muy ocupados en Acatlán”, donde según ellos, el contagio es más grave. Es verdaderamente lamentable lo que pasa con el abandono de algo tan importante que antes se realizaba: la campaña que realizaban casa por casa, donde se colocaba el abate para cada depósito de agua en las casas, con lo cual se evitaba la proliferación de los mosquitos transmisores del dengue.

Una vez que comienza la temporada de lluvias, y con ello los encharcamientos, se dan las condiciones necesarias para la reproducción de los mosquitos transmisores de dengue; antes se mandaban a fumigar y, sobre todo, cuando se detectaba un brote en alguna localidad, era seguro que se contara con la fumigación, pero ahora estas actividades brillan por su ausencia.

 La peor parte la lleva el sector salud, ahora no hay servicio de vectores, no hay fumigaciones para detener la plaga de mosquitos y zancudos transmisores del dengue. Ahora estamos sufriendo una verdadera calamidad, pues muchas personas humildes, en la Mixteca Baja de Puebla, ya han sido contagiados, tanto en San Pablo Anicano como en Guadalupe Santa Anna.

Otro ejemplo. Todos sabemos que faltan quimioterapias, insulina para diabéticos, médicos suficientes para atender a la gran cantidad de pacientes que reclaman una operación y las autoridades no han hecho nada por la gente que necesita operaciones de la vista, la lista es muy larga. Creo que con esto basta, pues ejemplos abundan.

Este ha sido un gobierno que enarbola la austeridad pero para gastos esenciales como: infraestructura carretera, médicos y medicinas, infraestructura de riego y de captación de agua de lluvias, infraestructura escolar, más apoyo a universidades, gasta inmensos recursos en sus programas de compra de conciencias, donde por migajas logra la adhesión de los más pobres, muchos de los cuales no saben que con esa política está matando a más gente de la que está salvando de no morir de hambre.

Aunque por un lado se le da a la gente dinero contante y sonante, por el otro les quita, con lo que el resultado es peor: más pobres. La estadística nacional ubica a 4 millones más, aunque la realidad es que la clase media baja perdió mucho su poder adquisitivo y eso ya la sitúa entre las clases bajas.

La violencia crece, aunque en sus mañaneras nos presenta una tendencia a la baja según sus datos, la realidad espanta, por la gran cantidad de asesinatos que hay cada día; muchos gobiernos crean este tipo de datos para crear falsas percepciones.

¿Qué podemos y debemos hacer ante esta situación? En primer lugar, educarnos, estudiar ahora es más urgente que nunca, la juventud debe prepararse, debe dejar de lado el celular como un instrumento de distracción y usarlo para prepararse.

Por eso los eventos de cierre de ciclo escolar y de graduación de las escuelas antorchistas, a lo largo y ancho de nuestro país, son un ejemplo de desarrollo cultural y científico de los jóvenes, que nos da un poco de esperanza para que en el futuro tengamos ciudadanos críticos, más preparados, sobre todo que no se dejen manipular.

Estudiar ahora un pequeño libro realizado por Martha Harnecker que se titula ¿Qué es la sociedad?, sería de gran utilidad para entender que es necesario la unión de todo el pueblo, que si queremos cambiar la situación en que vivimos tenemos que organizarnos, que un hombre solo, por muy inteligente que sea, no podrá realizar los cambios profundos que necesita la sociedad.

Los antorchistas sabemos que la sociedad puede cambiar para bien, que unidos hemos ya cambiado el rostro de pueblos y colonias donde se tienen mejores condiciones de vida, ejemplo de ello son los municipios de Tecomatlán y Huitzilan de Serdán en Puebla.

Si queremos cambiar esta situación organicémonos y formemos un nuevo partido, un partido del pueblo y para él pueblo. Por eso te invitamos a organizarte y unirte para formar parte del Movimiento Antorchista, que es la organización que busca un mejor futuro para todos.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más