Vemos cómo la clase trabajadora se ha mantenido en una lucha muy rígida por la supervivencia de sí misma (como clase explotada). Bien sabemos que, así como la alimentación y la salud, agobia de manera criminal no solo nuestros miserables bolsillos, sino también nuestra tranquilidad mental, la educación escolar, juega el mismo nivel de importancia y preocupación. Como bien sabemos, las familias salen día con día a buscar el progreso de los suyos, tratando de alimentar y curar a los dependientes del estas. Entonces, ¿en dónde entra la educación? ¿Quién se preocupa por educar a nuestros jóvenes? La clase trabajadora, por su tarea principal, se ocupa de los dos problemas ya mencionados, por lo que depende de terceros para que pueda enviar a sus hijos a recibir la educación que ellos no les pueden ofrecer. En este caso, el que tiene la responsabilidad de ofrecer la educación, es, el estado de la mano de sus dependencias correspondientes.
Una vez que sabemos quién responde por esta necesidad, analicemos más detalladamente si este medio, se desarrolla con éxito.
Veamos, el 18 de enero de 1919, “en un discurso en el II Congreso de toda Rusia, de maestros internacionalistas”, Lenin dijo: “La burguesía [...] hizo que su propia política burguesa fuera la piedra angular del sistema educacional y trató de reducir la enseñanza a la formación de sirvientes dóciles y eficientes de la burguesía, de reducir incluso toda la educación, de arriba abajo, a la formación de sirvientes dóciles y eficientes de la burguesía, de esclavos e instrumentos del capital. Jamás pensó (la clase poderosa) en hacer de la escuela un medio para desarrollar la personalidad humana”.
El gran Lenin, desde ese entonces, ya nos afirmaba que la educación estaba al servicio de la clase dominante, es decir, históricamente el sector educativo nunca ha respondido a los intereses de la clase trabajadora. Este discurso pues, nos dice cuál es la verdadera cara de la educación en nuestro país. He aquí, el meollo del problema.
Bien, ante esta afirmación, lo único que podemos concluir es que, la educación es un instrumento de dominación de clase al servicio de la burguesía, es decir, la educación cumple la función de dominación política de una clase sobre otra. Y es esta simple razón, la que explica el rezago educativo, el nulo respaldo que recibe el alumnado al presentar problemas económicos que le impidan continuar con su desarrollo educativo, o, por otro lado, se presenta que dentro del centro escolar no se cuenta con las herramientas necesarias para obtener el desarrollo esperado.
Sigamos rascando el hoyo. Han sido más de ocho ocasiones, en las que los estudiantes adheridos a la FNERRR se han manifestado en contra de las políticas del Gobierno morenista de Amozoc, encabezado por Mario de la Rosa, en casi todos nuestros desfiles de protesta, el ayuntamiento ha mostrado oídos sordos ante nuestra petición principal; la donación del terreno para la construcción del bachillerato No. 283, petición que, por su naturaleza es urgente, pues hablamos de la educación de los jóvenes, y repito nuevamente, así como a las familias les preocupa el alimento y la salud para los suyos, la educación juega el mismo nivel de importancia. Finalmente, después de la última movilización del 8 de diciembre con alrededor de 2 mil estudiantes se agendó para el 28 de enero del 2022 una reunión con la dirigencia estatal y nacional de nuestra federación con el presidente, pero a dicha reunión nunca llegó el edil. De acuerdo con los integrantes de la FNERRR, al ver la ausencia de Mario de la Rosa, le llamaron por vía telefónica a Brenda León Gómez, quien es comisionada de la dirección general de Gobernación, la cual solo respondió con amenazas diciendo textualmente: “Al gobierno del estado no le temblará la mano y que toda acción tiene una reacción”, amenazando directamente con reprimir a los estudiantes de la FNERRR. He aquí, el verdadero problema, pues no solo se ve a leguas la ignorancia de los funcionarios del ayuntamiento, pues el simple hecho de negar el desarrollo de la educación demuestra ignorancia, sino que también, representa una actitud prepotente, soberbia, insensible, en una palabra; represores al advertir que, si existe una próxima manifestación, el gobierno no dudará en reprimirnos.
Ante esto y más se enfrenta no solo el alumno, sino también, su familia. Una vez entendido esto, podemos continuar. Decíamos que lo grave de este asunto no está en la calidad educativa que reciben los niños y jóvenes de nuestro país, la gravedad se encuentra en no permitir que gente de este calibre (prepotente, soberbia, insensible, en una palabra; represores, repito de nuevo) siga gobernando para servir a intereses particulares que desde luego no son los del pueblo. La nula preocupación por parte de las autoridades correspondientes no es casual, ellos responden a otros intereses. Y es responsabilidad nuestra manifestar las inconformidades que agobian, a todo el sector estudiantil, no solo los alumnos y docentes se ven afectados por el rezago educativo, sino también, los padres de familia, la ciudadanía en general, por esta sencilla razón, el alumnado debe entender que la lucha estudiantil no encierra a estos dos personajes, sino que también se ve obligado a invitar al pueblo a ser partícipe de esta lucha.
Estudiantes de todo el país, sepan que los gobernantes de este linaje (de la 4T) nunca representarán los intereses del alumnado nacional. Para frenar esta desigualdad sangrienta, solo hay una solución; la organización estudiantil. Jóvenes de Amozoc, cuentan con el respaldo del alumnado atlixquense, porque queda más que claro que en este municipio gobierna un enemigo radical de la educación. Nos espera una lucha intensa. La solución está en nosotros. En la FNERRR. ¿Vale?
0 Comentarios:
Dejar un Comentario