MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

En el cuidado de nuestra salud, no bajemos la guardia

image

Hace unos días, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ha hecho la recomendación de usar nuevamente el cubrebocas ante el aumento de casos positivos de Covid-19 que se presentaron durante junio y los cambios en el comportamiento del virus. Aunque la Universidad considera que la situación está en relativa calma, señala importante continuar con las medidas generales de prevención de contagios, sobre todo, las personas más vulnerables. 

El uso del cubrebocas fue recomendado para los lugares cerrados y muy concurridos, así como, el aislamiento de tres a siete días en caso de presentarse síntomas. No se debe perder de vista que, dicha medida se propone como respuesta a los datos publicados por el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave) y a que en breve iniciará el próximo ciclo escolar en todo el territorio nacional y también a que, la llegada del frío, en unas semanas, disparará las enfermedades respiratorias, ya que, durante este periodo, hay mayor transmisión porque las gotas de secreciones duran más tiempo en el aire y lo que se busca es evitar que haya nuevamente contagios colectivos.

En marzo pasado, se cumplieron tres años de pandemia y las consecuencias han sido terroríficas en todo el mundo y en particular para México, como consecuencia de una política de salud sumamente deficiente implementada por el gobierno federal. Datos de especialistas de la salud señalan que son más de 700 mil mexicanos los que han perdido la vida, más de 200 mil niños quedaron en la orfandad, que miles de hombres y mujeres sufren de los daños a su salud provocados por el postcovid-19 y que miles de familias aumentaron su nivel de pobreza en todo el territorio nacional. De tal manera que la recomendación no debe ser considerada como una exageración.

Es de llamar la atención el comentario hecho por el petista y aspirante a la coordinación de los Comités en Defensa de la Cuarta Transformación, Gerardo Fernández Noroña, quien recrimino a la UNAM por alertar sobre el Covid-19, llamándolos cretinos. “Son unos cretinos los de la UNAM. Espero que las autoridades sanitarias ya paren las ocurrencias”. 

A su vez, el subsecretario de la Salud, Hugo López Gatell, minimizó el llamado de la UNAM y pidió no exagerar ni sobredimensionar el problema. En la conferencia mañanera de Palacio Nacional señaló que las autoridades sanitarias no recomiendan actualmente retomar el uso masivo de las mascarillas, tal y como lo ha venido haciendo durante toda la pandemia, sin importarle en lo más mínimo que sus irresponsables declaraciones han costado la vida de miles de mexicanos.

El 27 de abril de 2020, el subsecretario Gatell, aseguró que el uso del cubrebocas no tenía razón de ser por su nula utilidad, cuando en el mundo se utilizaba para evitar los contagios y para el 4 de junio, del mismo año, señaló que, “un escenario muy catastrófico sería llegar a 60 mil muertes por covid-19”.

Pero no son los únicos. El propio presidente Andrés Manuel López Obrador y el secretario de Salud, Jorge Alcocer, han hecho declaraciones que van desde negar que el coronavirus fuera una enfermedad preocupante, desestimar la sana distancia o el uso del cubrebocas, hasta acusar a niños y jóvenes de quitar vacunas a los adultos mayores. Por ejemplo, el titular del ejecutivo dijo el 2 de abril del 2020 que la pandemia le había caído a su gobierno como “anillo al dedo” para afianzarlo. “Por eso vamos a salir fortalecidos, o sea, que nos vino como anillo al dedo para afianzar el propósito de la transformación” y el 31 de julio de 2020, al negarse a utilizar el cubrebocas, dijo que lo utilizaría cuando se terminará la corrupción. 

En marzo pasado, se cumplieron tres años de pandemia y las consecuencias han sido terroríficas en todo el mundo y en particular para México, como consecuencia de una política de salud sumamente deficiente implementada por el gobierno federal. Datos de especialistas de la salud señalan que son más de 700 mil mexicanos los que han perdido la vida, más de 200 mil niños quedaron en la orfandad.

Y para colmo, la “corcholata favorita”, Claudia Sheinbaum, propone dar continuidad, en el próximo sexenio, a la política de salud de la Cuarta Transformación, ¿qué significa eso? Continuar sin la más mínima preocupación por nuestras vidas. ¿Qué nos queda por hacer? Mientras no tengamos a un gobierno que trabaje en favor de los más pobres, aprender a cuidarnos y cuidar a nuestras familias.

La experiencia que nos ha dejado esta pandemia es que, el uso del cubrebocas salva vidas y, por tanto, debemos seguir usándolo, aunque las autoridades digan lo contrario. Mientras tanto, nuestra apuesta sigue siendo la organización del pueblo trabajador, arropado de una educación científica, que le permita ubicar y desechar a redentores, mesías y siervos de la nación, que hoy lo utilizan para saciar sus ambiciones de poder. 

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más