La mañana de este miércoles 20 de abril, la SSPyC dio a conocer que de 2018 a 2021, los Ceresos que operan en los municipios de Cárdenas, Comalcalco, Cunduacán, Huimanguillo, Macuspana, Tacotalpa y Tenosique del estado de Tabasco, han ejercido con mil 73 millones 233 pesos, lo que significa que han reducido su presupuesto.
En 2018, con la llegada de Carlos Merino y Morena a la gubernatura, varios programas sufrieron recortes, entre ellos, el sistema penitenciario. Además de quitarle dinero a los Ceresos, también se redujo la inversión en la reinserción social al 0.02%, limitando considerablemente las condiciones de vida al interior de los penales y después de ellos.
Se sabe que el recurso es destinado a cubrir tanto las necesidades de los presos como el mantenimiento y las condiciones laborales de los que ahí trabajan, es decir, se usa para pago de salarios de guardias, medicinas, alimentación, limpieza y atención médica.
El descuido a las cárceles es un problema grave pues fomenta que el ciclo de violencia no termine, que el preso no se reforme y adquiera nuevas destrezas para el crimen. En México, la desatención al sistema carcelario es vieja y es una de las causas de la ola de inseguridad que se ha desatado en el último año.
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