MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

China y Rusia: un muro contra la hegemonía gringa

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Desde la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos (EE. UU.) empezaba a crear ya algunas estrategias para controlar a cada uno de los países, luego de haber distribuido armamento y con eso hizo que se endeudaran y no les quedara otra más que someterse a lo que dijera la hegemonía norteamericana imperialista.

Hasta hace algunos años su hegemonía seguía creciendo, pero se ha topado con dos grandes muros, los cuales no le han permitido avanzar con sus planes: China le ha quitado el puesto como la primera potencia mundial, además de que, como país, ha realizado en verdad cosas impresionantes. A inicio de año, el Partido Comunista Chino (PCC) anunció que China había superado la extrema pobreza, lo que es un hecho significativo, pues tan solo la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, declaró que 201 millones de personas están en la pobreza, de las cuales 86 millones se encuentran en pobreza extrema.

El otro muro que también representa una amenaza a los planes de EE. UU., es Rusia, pues su economía también tiene buena presencia, a pesar de los diferentes bloqueos que han llegado a tener han sabido como superarlo; pero no solo eso, sino que representa una gran amenaza por su desarrollo en armamento nuclear. 

En una nota de BBC NEWS se dice que Rusia tiene 5.977 ojivas nucleares, los dispositivos que desencadenan una explosión nuclear, aunque esto incluye alrededor de 1 mil 500 que están retiradas y listas para ser desmanteladas, y de los aproximadamente 4 mil 500 restantes, la mayoría se consideran armas nucleares estratégicas que generalmente se asocian con la guerra nuclear porque pueden ser dirigidas a largas distancias.

Ante esto, EE. UU., ha buscado la manera de atacar y derrocar a estos países, actualmente ha lanzado una campaña en contra de Rusia, que al parecer es su primer objetivo, pero se ha respaldado por la OTAN y Ucrania para embestirla de manera indirecta y con pretexto para que no se vea un ataque directo y no se repudie a este país, sino a Rusia, y que EE. UU., quede como el salvador; además de que se sabe que la OTAN le sirve realmente a Estados Unidos solo para continuar con su hegemonia y ahora el asunto con Ucrania es solo una estrategia más para que su ataque tenga mayor eficacia. 

Pero para lograr sus fines han lanzado una campaña mediática en contra de Rusia, tachándolos de unos invasores y dictadores, además de causar un bloqueo, pues las principales organizaciones europeas, mundiales y autoridades de algunos países están imponiendo sanciones drásticas, principalmente bloqueos económicos, y hasta los han bloqueado en el deporte, como es el caso de que les negaron el poder acoger la carrera de Fórmula 1, la final de la Champions League en San Petersburgo, la celebración del próximo Mundial de voleibol, les han negado a los equipos que participen en competiciones de la UEFA, FIFA y Euroliga y hasta de que participe en el próximo Mundial.

Esto también es una muestra de cómo la desigualdad dentro del mundo es muy grande: cada vez son más los pobres y menos los ricos; son muy pocos los hombres que concentran la riqueza del mundo existen guerras por mercados, por territorios, pues la ambición por aumentar sus riquezas es muy grande y terminan haciendo hasta lo imposible por adueñarse de nuevo territorio. Eso es lo que estamos viendo ahorita con este conflicto.

Como se ha visto a lo largo de la historia, durante las guerras, pandemias o crisis sociales o económicas, los únicos beneficiados son los millonarios y los perjudicados son los miembros de la clase pobre, utilizan a la clase pobre para lograr sus objetivos, se aprovechan de sus necesidades y los terminan convenciendo que son situaciones que se dan naturalmente y que son necesarias para el bien del país; pero esto no es así, en realidad es para satisfacer sus intereses de los millonarios, para satisfacer su ambición que día con día crece. Así es, pues, como utilizan al pueblo de Ucrania.

Es en verdad tan sorprendentes las declaraciones que muchos de ellos llegan a dar, tan ruines y descaradas, por ejemplo, Warren Buffett, quien está en la lista de los 10 hombres más ricos, dijo lo siguiente: “claro que sí hay una guerra de clases, pero es mi clase, la clase rica, la que está haciendo esa guerra, y la estamos ganando”.

Se entiende claramente cómo están utilizando a los pobres, a los que menos tienen para poder ganar sus objetivos y seguir siendo la clase poderosa dentro del mundo y del país, por eso su riqueza sigue creciendo sin importar la situación de su alrededor. Es algo que no debemos dejar al olvido, que además que como clase debemos entender perfectamente y ver cómo poner un alto a esta situación, dejar de servirle a los ricos para cubrir sus ambiciones, dejar de ser sus meros instrumentos y que demostremos que como clase podemos lograr cosas muy grandes.

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