MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Campesinos, víctimas de la indiferencia de AMLO

image

Después de más de 100 días, el Gobierno federal autorizó el retorno a las actividades que llama esenciales, decretando así una "nueva normalidad", que muchos no entienden pues la pandemia se encuentra en lo más alto, tan así que México entero se encuentra en semáforo rojo, pero lo más lamentable es que esas autoridades tienen en el abandono a millones de familias que resultaron afectadas por la paralización de toda actividad productiva a consecuencia de covid-19, pero especialmente las familias más pobres.

Los cerca de 12.5 millones de mexicanos que perdieron sus empleos son quienes, alentados por la "nueva normalidad", saldrán a las calles a buscar una fuente laboral que les permita llevar el alimento a sus hogares, y sin duda, si no se guardan las condiciones de protección, se dará lamentablemente un rebrote del mortal virus.Por desgracia seguirán siendo los pobres quienes, desprovistos de protección, resultarán contagiados de coronavirus.

Nos encontramos pues, con un sistema donde lo único que interesa es acumular ganancias a costa de lo que sea.La necesidad obliga a la clase trabajadora a moldearse a las exigencias que se les impone, lamentablemente los derechos laborales de la clase trabajadora son arrollados con salarios injustos, lo que conlleva a que no alcance para adquirir los alimentos, en muchos casos vivir hacinado, con un pésimo servicio de salud, entre otros muchos males.

La Oxfam señala que la crisis del coronavirus ha desnudado la desigualdad en México, pues casi la mitad de la población vive al día, en la precariedad laboral y no cuenta con los recursos suficientes para cubrir sus necesidades básicas.Además, señala que el 40 por ciento de la población vive con ingresos laborales insuficientes, para satisfacer las necesidades alimentarias básicas, asimismo los efectos negativos de la crisis podrían permanecer en nuestro país tras haber superado la pandemia de covid-19, ya que los empleos no regresarán de forma inmediata, lo que conlleva a un aumento considerable de la pobreza extrema.

sa

En reciente visita al sureste del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador mencionó que "regresar al confinamiento no es lo recomendable, es imposible pues muchas familias viven en el hacinamiento y en pobreza", sin embargo, en ningún momento lo escuchamos decir que el Gobierno federal implementaría algún plan destinado a ayudar a los más pobres y desprotegidos del país.Así pues, al presidente López Orador no le importó las reiteradas recomendaciones de expertos en la materia.

Derivado de lo anterior, la Oxfam vuelve a advertir que si el Gobierno federal no atiende la crisis económica derivada de la pandemia, cerca de "tres millones de empresas se verán afectadas en el corto plazo y se pondrán en riesgo a 28 millones de trabajadores, lo cual agudizaría los problemas de desigualdad y pobreza en el país", la misma recomendación realizó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, quien estimó que debido a los efectos de covid-19, la economía de México podría caer entre el 3.8 y 6 por ciento.

Pero para el presidente de la 4T, fue más importante reiniciar sus giras en el sureste, no para preguntarle al pueblo sabio la magnitud de la crisis económica que está ocasionado el confinamiento por la pandemia, y tampoco para atender a los miles de familias que lo perdieron todo por el desastre que ocasionó la tormenta tropical "Cristóbal, si no para poner en marcha su ambicioso proyecto electorero del Tren Maya.

Desde el 1 de junio, en Quintana Roo, los trabajadores que laboran en la informalidad y que abarca a cerca de 400 mil personas hasta antes de la pandemia,volvieron a la "nueva normalidad", es el caso de los albañiles, carpinteros, taxistas, vendedores ambulantes, tianguistas y pequeños comerciantes quienes vuelven a sus labores en medio de un panorama nada favorable, porque aún estamos en semáforo rojo, así como en el resto del país.

Sin duda, el obscuro panorama ahonda la brecha de desigualdad y pobreza; así pues, la necesidad de los mexicanos y la necedad del presidente de la República son una prueba más de que el pueblo trabajador debe educarse y organizarse para exigir condiciones laborales justas y al mismo tiempo mejores servicios de salud, pero para ello se necesita realizar un frente común, entre todos los sectores de población para que cambiemos por la vía democrática, a los que hoy dirigen el país, porque han demostrado incapacidad y retroceso, el Movimiento Antorchista está listo para iluminar y dirigir a la clase trabajadora de México.

  • Etiquetas:

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más