Sin duda alguna, uno de los tan trillados "ataques" en contra del Movimiento Antorchista –sin que se aporten pruebas de tal acusación- es aquella que nos señala de robarnos recursos públicos. Acusación que han repetido muchos de nuestros detractores, si no es que todos, una y otra vez; hoy sí y mañana también. Acusación que no va más allá de la chapucería, poniendo de relieve la tan desgastada credibilidad de quien lo hace. Sin embargo, me complace que, después de los diversos problemas que se han presentado en Ocoyucan -como consecuencia del viejo clamor de cierto grupo de poder que se abate en plañideras por ver al antorchismo usar la presidencia municipal como una herramienta para llevar progreso y desarrollo a las familias de este municipio, afectando así sus intereses mezquinos al no poder, ellos, enriquecerse a costa de un cargo público que creían parte de su patrimonio-, hoy tenemos buenas noticias como muestra del buen trabajo que ha realizado esta administración antorchista encabezada por el alcalde José Santos Técuatl Mejía.
En primer lugar, el Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (INAFED) y la Secretaría de Gobierno entregaron al gobierno del Ocoyucan un reconocimiento por su "eficacia municipal" luego de acreditar su participación en el Programa "Agenda para el desarrollo municipal". Dicho programa evalúa el nivel de gestión y desarrollo municipal en el último año a través del Instituto Tecnológico Superior de México, quien se encarga de realizar dicha investigación en los municipios participantes.
En segundo lugar, pocos días después del reconocimiento del INAFED, este mismo ayuntamiento le fue otorgado por parte del Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO) un reconocimiento "por haber obtenido el 1er lugar en el índice de Información Presupuestal Municipal 2017" tras obtener el 100 por ciento de aprobación de los criterios que fueron evaluados.
De ambos hechos los medios informativos fueron testigos y dieron prueba de ello; varios de ellos sin ser, ni de lejos, simpatizantes del Movimiento Antorchista, pero en esta ocasión, haciendo justicia al sentido estricto de ejercer el periodismo, como el caso del portal periodicocentral.mx, El Sol de Puebla, economiahoy.mx, entre otros. Destaco esto para que no se preste a malas interpretaciones de algún despistado que nos acuse de distorsionar los hechos; esta situación con los medios es la misma con las instituciones (IMCO e INAFED) que realizan la respectiva investigación bajo sus parámetros científicamente establecidos y posteriormente entregan los resultados reconociendo a quienes más se apegan a sus lineamientos.
Este logro es digno de resaltarse en un contexto donde, de acuerdo con el índice de Información Presupuestal Municipal (IIPM), publicado por el IMCO, al menos uno de cada 10 municipios de Puebla, 22 de 217, cumple al 100 por ciento con la transparencia presupuestal municipal. El estudio antes referido mide la calidad de la información presupuestal de los municipios del país, entre los aspectos considerados se encuentran deuda pública, ley de ingresos, recursos públicos, armonización contable, reasignaciones, excedentes, rubros específicos, tabuladores y plazas; para la evaluación fueron elegidas las demarcaciones con ingresos promedio mayores a 500 millones de pesos, que son parte de una zona metropolitana, capital de una entidad federativa o que solicitaron expresamente su examinación. De acuerdo con el portal economiahoy.mx los municipios con más avance en la revelación de información presupuestal fueron Ocoyucan, al pasar del lugar 337 al primer lugar.
Esto demuestra que un gobierno antorchista, que es encabezado por una persona humilde, buena y honesta, hace bien las cosas, sigue el camino del progreso y desarrollo y por ese mismo guía a su pueblo. Las pruebas al canto. Y no es que lo diga yo, u otro antorchista: lo dice la realidad, instituciones oficiales que no tienen interés particular en destacar las bondades y cualidades de este ayuntamiento.
Actuar, pues, con transparencia, refleja la honorabilidad de quien así lo hace. Pero esto no es suficiente, es bueno y hay que hacerlo, pero también se debe ir más allá. Esos recursos se deben aplicar correctamente en beneficio de la población, puesto que los servidores públicos, en este caso el ayuntamiento antorchista de Ocoyucan, es simple y llanamente el administrador de los recursos de la ciudadanía, mismos que se han invertido en el fortalecimiento de la infraestructura de servicios básicos, educación, salud, entre otros. Y una vez que se aplican estos recursos correctamente, en consecuencia, se transparentan todos y cada uno de los gastos.
Esto manifiesta el verdadero sentido de ser servidor público, trabajo por el que muchos pelean incansablemente y muy pocos logran realizar con efectividad. De entre esos pocos están los antorchistas, que día a día trabajamos en la construcción de una patria más justa y equitativa teniendo siempre nítido el objetivo y la forma de cómo hacerlo: a través de un proyecto de nación estructurado científicamente y basado en cuatro ejes; uno de ellos la reorientación del gasto social, lo que permite que familias depauperadas tengan mejores condiciones de vida, acción plenamente viable. Ocoyucan es la muestra.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario