Nos tocó vivir el día del niño y el día del trabajo durante esta cuarenta, por eso quisiera iniciar felicitando a todos los pequeños en su día, esto a pesar de conocer los datos rojos en los que se encuentra nuestra niñez, empezando por ejemplo que En Baja California la desnutrición severa y modera presenta un notable aumento en relación a las cifras del año 2018 del Sistema de Vigilancia Epidemiológica, en la más grave, llega a un incremento del 79 por ciento; la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en su último informe de índice Estatal de Riesgo de Violencia Asociada con el Crimen Organizado, Baja California aparece en el tercer lugar como uno de los estados con mayor violencia hacia la infancia.
Los datos rojos no terminan aquí, y es que a pesar de que existe una política de que los niños no deben de trabajar en los campos jornaleros, en el Valle de San Quintín y en el Valle de Mexicali todavía se ven a pequeño piscando la fresa o la cebolla, esta particularidad no es solo del estado, ni del país, pues los últimos datos señalan que 152 millones de niños trabajan en el mundo; 3.2 millones en México. En México, 13.6 por ciento de los niños y 8.4 por ciento de las niñas trabajan, y la ocupación infantil tiende a darse con mayor frecuencia en zonas menos urbanizadas, por lo que la agenda de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas planteó erradicar el trabajo infantil en todas sus formas para 2025.
Sin embargo, vuelvo a felicitar a los pequeños, por los que luchamos todos los días los antorchistas para dejarles un México justo, equitativo, por que como el sueño de muchos, nosotros soñamos con una infancia bien alimentada, educada, cultivada, pero sobre todo, feliz.
No quiero dejar de lado, porque lo mencioné al inicio, las felicitaciones a todos los trabajadores del país, a quienes día con día se levantan para sostener a esta grande patria, para mantener a sus familias llevándoles un pan a casa; estos que, en muchos de los casos, trabajan más de 8 horas y que en varias ocasiones no tienen las prestaciones o un salario digno, también se merecen reconocimiento.
Los últimos datos el desempleo en Baja California registraba un alza en el tercer trimestre de 2019, revelaban datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Según las estadísticas oficiales, la tasa de desocupación pasó de 2.5 a 2.9 por ciento, en sólo tres meses, desde la anterior medición hecha por el organismo autónomo. En agosto de 2018, se reportaba que en Baja California había 44 mil 443 desempleadas, de un universo de 1 millón 714 mil 771 personas económicamente activas.
Hoy las condiciones pocos han cambiado y en estos momentos han empeorado, a pesar de que todavía no se dan a conocer los datos oficiales de los despedidos debido a la pandemia que nos aqueja, hoy miles de bajacalifornianos se encuentran en casa, sin empleo y sin un ingreso económico.
Ejemplo de ello son las miles de familias que protestaron hace unos días en ciudades de Tijuana, Mexicali y en comunidades de San Quintín, donde con un trapo blanco y con una cartulina en la puerta de los hogares exigieron al gobierno federal, implemente un programa nacional de distribución de alimentos, pues aseguraron "no han llegado las despensas y las que entrega el gobierno estatal no alcanzan a llegar a todas las familias"; el reclamo es corto y directo, no tienen qué comer; a muchos de ellos se les ha catalogado de flojos, pero cualquiera que tenga dos dedos de frente, se dará cuenta que son familias humildes, trabajadoras, que lo único que exigen son apoyos para salir de esta pandemia vivos, donde se les ha pedido quedarse en casa, donde se les pide no salir y aunque salgan no hay trabajo, pues las fuentes de empleo están cerradas y pocos voltean a ver al necesitados.
Esta pandemia está dejando mucho al descubierto, por ejemplo, nada capacidad que tiene el gobierno federal para afrentar esta situación, ni con apoyos a médicos, que tanto lo piden, ni con un programa de alimentos para que lleguen a los más necesitados; deja al descubierto y agudiza la situación de pobreza en la que se enfrentan los mexicanos; esta pandemia nos demuestra que hemos elegido mal y que la única solución es la organización y la lucha por un mundo mejor, y eso es lo que propone Antorcha.
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