"No todo lo que brilla es oro", reza el refrán popular. Viene a cuento esta prédica acuñada por la sabiduría popular, porque llama la atención que de acuerdo con la declaración de objetivos de la CONADE contenidas en el decreto publicado el 24 de febrero de 2003 en el diario oficial de la federación, se afirme y acepte que el deporte es para el gobierno de México una prioridad fundamental, pues es "una de las expresiones culturales que más vinculan a los seres humanos"; al mismo tiempo que se reconoce como problemas o insuficiencias más importantes la falta de hábitos en la práctica del deporte, la limitada capacitación de entrenadores voluntarios y profesionales, así como resultados deportivos limitados de acuerdo con el potencial del país, entre algunos otros. De acuerdo con estas declaraciones y reconocimiento expreso del propio gobierno, uno esperaría encontrar una política más congruente no sólo para superar problemas y deficiencias como las ya mencionadas líneas arriba, sino sobre todo para cumplir con los objetivos para los que fue creada la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte y por esa vía, hacer de México una verdadera potencia deportiva.
Además de los diversos conflictos protagonizados por los directivos y varias de las federaciones deportivas, destacan los recortes al presupuesto en este rubro que alcanzan hasta un 60% en los últimos años, la cancelación de apoyos y becas a los deportistas de alto rendimiento ejecutadas por una destacada atleta que funge ahora como responsable de la CONADE, Ana Gabriela Guevara.
En contrapartida, el Movimiento Antorchista Nacional trabaja los 365 días del año en la dura y complicadísima tarea de educar y organizar a las masas más empobrecidas de nuestra patria, con el propósito declarado de volverlas protagonistas en la lucha por su liberación definitiva de la explotación, el sometimiento e ignorancia en que por siglos las han mantenido las clases dominantes de ahora y del pasado.
Para lograr este noble y edificante propósito, cientos de activistas recorren a diario miles de comunidades rurales, escuelas, colonias populares y centros fabriles, convocando a través de reuniones, asambleas y estudio, a organizarse y luchar, a unir fuerzas y voluntades para mejorar nuestras condiciones materiales y espirituales de vida, pero sobre todo, a construir una fuerza social de por lo menos diez millones de mexicanos, y luego entonces, luchar por la vía democrática por la conquista del poder político para construir un México más justo y equitativo, pero sobre todo más generoso con las grandes mayorías empobrecidas que con su trabajo diario producen la riqueza social pero de la que han sido privados desde siempre.
A esta labor tesonera, permanente y sistemática, se agrega el trabajo cultural y deportivo materializado en miles de grupos artísticos de: danza, poesía, oratoria, música, etc., así como miles de equipos deportivos prácticamente en todas las disciplinas y categorías. De todo este trabajo es beneficiario y protagonista el pueblo pobre, quien a través de eventos culturales, conciertos, torneos deportivos, muestras, concursos y las espartaqueadas culturales y deportivas que se celebran año con año en la cuna del Antorchismo Nacional, Tecomatlán, enclavado en la baja mixteca poblana, elevan su nivel cultural, acrecientan su sensibilidad y se forjan un verdadero espíritu de lucha.
En este contexto, del 1 al 9 de febrero del presente, se realizará la vigésima Espartaqueada Deportiva Nacional que congregará a por lo menos 21 mil deportistas quienes en una competencia fraterna, se disputarán los primeros tres lugares en cada una de las disciplinas deportivas y categorías de ambas ramas. Durante nueve días, los majestuosos y bien conservados espacios deportivos que se han construido en la llamada "Atenas de la Mixteca", gracias a la gestión y lucha del antorchismo, serán testigos del bullicio, la energía, el entusiasmo y la fraternidad antorchista de los deportistas venidos de todo el territorio nacional, con un objetivo: seguir forjando al hombre nuevo, al mexicano recio, capaz de tomar decisiones rápidas, trabajar en equipo, diseñar estrategias para ganar, fortalecer el cuerpo y la mente y preparase para construir una patria nueva.
A este evento, que es quizá uno de los más destacados en el ámbito deportivo sin apoyo oficial, están invitados los hombres y mujeres de bien que sueñan con construir una patria con oportunidades para todos a través de un impulso masivo a la actividad cultural y deportiva.
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