Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó la caída del Producto Interno Bruto (PIB) de México en un 18.9 por ciento, en el segundo trimestre de este año.Por su parte, el presidente de la República encara el problema afirmando en su mañanera que esta recesión en la economía no repercutirá en la población, "es posible tener un desplome del PIB sin incrementar el número de personas en pobreza", según él, porque ahora el actual gobierno en turno sí atiende a los pobres, y que en unos tres meses la economía se va a recuperar.
Con estas declaraciones, López Obrador demuestra que busca manipular mediáticamente a los mexicanos, mintiendo en sus mañaneras sobre los graves problemas del país que hasta el momento su gobierno ha mostrado ser incapaz de resolver.Hablar de recuperación ahora es faltar el respeto a la realidad de millones de mexicanos que perdieron su empleo o su negocio.Podremos hablar de recuperación, cuando la mayoría de ellos esté de regreso en actividades productivas.
Para los empleos formales, son 1.1 millones de empleos perdidos y en la informalidad podemos multiplicar esta cifra por dos, por cinco o por 10...Más o menos como pasa con las cifras de contagios y muertes por covid-19
Los economistas aseguran que lo económico depende del éxito en el control de la pandemia del SARS-CoV-2, en México y en el mundo.Porque mientras la pandemia siga viva, la economía no podrá recuperar la normalidad.En resumen, se puede entender que la crisis no ha terminado y el PIB de nuestro país seguirá cayendo.
Además, el Gobierno federal, a través del subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, anunció que no tomará acciones extraordinarias para aminorar el impacto económico de la crisis más allá de las que ya se han venido implementando, como los programas sociales que van dirigidas a sectores vulnerables y que operan con el único objetivo de asegurar votos a favor de los candidatos del partido de Morena, pero que, al final solo benefician a una minoría muy insignificante de toda la población mexicana.
La reacción al problema de la crisis económica: a lo largo y ancho del país miles de campesinos de San Luis Potosí, Estado de México, Hidalgo, Chiapas, por mencionar algunos estados, salen a las calles a denunciar la escasez de alimentos en sus hogares y la difícil situación por la falta de empleo, un sector de la sociedad que busca ser escuchada por el gobierno de la 4T, para que los dote de apoyos agrícolas como fertilizante, semillas de frijol, maíz, insumos que les permitan cosechar sus tierras para poder sobrevivir a esta emergencia sanitaria que se está extendiendo cada vez más.Ante este hecho tan trágico para los campesinos pobres, el gobierno parece no importarle: no resuelve esta demanda, ni a otras de igual urgencia en donde varios sectores han solicitado ayuda.
De acuerdo con un documento publicado en El Financiero se informa que "Los resultados del estudio PUED-UNAM, al igual que el del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), indican que, probablemente, las transferencias de la administración federal no estarían teniendo un impacto significativo en mitigar la crisis que vive la población".
En el análisis "La política social en el contexto de la pandemia por el virus SARS-CoV-2", realizado por Coneval se estima que para este segundo trimestre "10.7 millones de mexicanos podrían caer en pobreza laboral al cierre del 2020 ante la crisis sanitaria generada por el coronavirus, y otros sectores se harán más vulnerables".Entre abril y junio aumentará de 37.3 a 45.8 por ciento la población con salario menor al costo de la canasta básica.Además de la disminución en los ingresos, este estudio considera que la pérdida de empleos también traerá menos prestaciones laborales en el sector formal.Las personas más vulnerables en este sentido son las que se encuentran ocupadas en trabajos subordinados, por cuenta propia.
Otra investigación de la UNAM, publicada el 11 de julio, advierte que, entre febrero y mayo las personas en pobreza extrema podrían haber pasado de 22 a 38 millones, por la pérdida de sus fuentes de ingresos.
En el marco de una de las peores crisis de la historia de México y agravada por la pandemia, el mandatario mexicano persiste en su terca decisión de usar el presupuesto en las obras como el Tren Maya, la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, entre otras.López Obrador no acaba de entender que la prioridad del gobierno de la "Cuarta Transformación" debe ser un plan económico que ayude a los millones de desempleados a que sus familias no padezcan hambre y puedan seguir enclaustrados para no contagiarse del SARS-CoV-2 y al mismo tiempo poder disminuir ahora sí la curva de contagios que hasta el momento su gobierno no ha logrado reducir, pues acaban de anunciar que ya hemos rebasado los 46 mil 668 mexicanos fallecidos por coronavirus.
No es casualidad que por ese motivo alrededor de nueve gobernadores han pedido la renuncia del subsecretario de salud, Hugo López-Gatell, responsable del manejo de la pandemia.López-Gatell ya en innumerables ocasiones ha sido criticado por las cifras que presenta y los pésimos resultados que ha obtenido con su estrategia de frenar los contagios.
Lo que el pueblo mexicano necesita es que el Presidente de la República reconozca y corrija sus errores, que centre su atención y su tiempo en buscar soluciones que ayuden a recuperar los empleos formales e informales perdidos, garantizar el equipo y los insumos suficientes que brinden la protección al personal médico y que los doctores puedan ganar esta batalla de salvar la vida de los mexicanos.Y si no hace caso, lo cual es muy probable, el pueblo debe votar por otras opciones.
Mi reconocimiento a los campesinos, quienes por medio de cadenas humanas o protestas reclaman su derecho a recibir la atención debida.Ellos con el sudor de su frente y de sol a sol producen gran parte de la riqueza en México; merecen atención y respeto por parte de los gobernantes.
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