Villa del Carbón, un municipio mágico desde el año 2015, es conocido por su cercanía al área metropolitana, por sus riquezas naturales en las que puedes practicar: biking, cabalgata, camping, canotaje, escalada, kayaking, pesca deportiva, motocross y tirolesa; además, destaca por sus artesanías de piel, chamarras, botas, botines, vestidos, cinturones, zapatos, bolsas y artículos de lana; sin embargo, en pleno siglo XXI, la demarcación arrastra un rezago histórico provocado por los altos indices de pobreza, la cual afecta a 34 mil 464 habitantes de una población total de 51,498 personas, de acuerdo al Coneval 2020.
La Falta de disposición política de las autoridades, tanto municipales como estatales y federales para resolver las problemáticas económicas y sociales ha provocado que la mayoría de sus 58 localidades se encuentren relegadas al padecer la falta de caminos, techumbres en las escuelas, alumbrado público, drenaje, agua potable, pavimentos, suministro de medicamentos en los centros de salud, apoyos a la vivienda y al campo.
Este municipio, de acuerdo a la Secretaría de Cultura y Turismo, fue creado el 10 de marzo de 1961 y, a pesar de su juventud, se ha convertido en uno de los destinos de mayor relevancia en el Estado de México; pero su notabilidad turística contrasta con la realidad que presenta el Informe general de la población: condición de pobreza, marginación y rezago social. En el informe del Coneval 2020 se expone que Villa del Carbón se encuentra en un grado medio de marginación y rezago social pues indica que 15 mil 700 personas se encuentran sin servicios básicos en su vivienda, 17 mil 400 habitantes no tienen acceso al agua potable, 7 mil 800 no cuentan con una red de drenaje público, mil no tienen servicio de electricidad y 800 cocinan con leña.
Además 9 mil 931 presentan rezago educativo, 18 mil 057 no tienen acceso a los servicios de salud, 45 mil 758 no tienen seguridad social, mil 300 personas habitan viviendas con pisos de tierra, 700 cuentan con techos de material endeble y 16 mil 705 no tienen acceso a una alimentación nutritiva y de calidad.
Conjuntamente, el Censo de Población y Vivienda 2020 reportó que la tasa de analfabetismo en Villa de Carbón es de 7.4 por ciento, del cual el 37.8 por ciento corresponde a hombres y el 62 por ciento a mujeres. Además, en la demarcación 856 habitantes hablan Otomí, 43 Náhuatl y 20 Mixteco.
Las localidades con mayor número de colonos al ser comunidades rurales son el centro de Villa del Carbón con 8 mil 029 habitantes, Loma Alta con 3 mil 990, Pueblo Nuevo con 3 mil 575 y San Luis Taxhimay con un mil 796, las demás cuentan con una población de entre 300 a 800 personas. Del Total de su Población Económicamente Activa (59%) el 25.78 por ciento se encuentra ubicado en el sector primario (industria), el 30.35 en el sector secundario (agricultura) y el 42.82 por ciento en el sector terciario (comercio y servicios).
Pero la divergencia puede aumentar ya que la demarcación cuenta, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, con una superficie de 32,051 hectáreas, de las cuales para uso agrícola se destinan 9,379.2 hectáreas que representan el 29.26 por ciento del territorio municipal y este se distribuye en dos conceptos: a) de temporal, con una superficie de 8,880.6 hectáreas que constituyen el 27.70 por ciento del total del uso agrícola, b) de riego, las cuales abarcan una zona de 498.622 hectáreas, lo que significa el 1.56 por ciento.
De las 9,379.2 hectáreas destinadas a la agricultura en la actualidad solo se siembran 7 mil 290 porque no hay subsidios al campo. Tal disminución implica, según la opinión del líder campesino del Movimiento Antorchista en la región, Luis Patricio Rivera, que miles de pequeños productores no tengan los recursos para sembrar, que pierdan sus cosechas y, como consecuencia, que vivan y aumente sus condiciones de pobreza.
Por ello, más de cuatro mil campesinos adheridos al Movimiento Antorchista, el pasado mes de febrero de este 2022, entregaron un oficio de petición al presidente municipal, Andri Guadalupe Correa Rodríguez, con el objetivo de que resuelva sus necesidades.
Los campesinos pertenecen a las comunidades de Las Golondrinas, San Luis Taxhimay, Loma Alta, Cruz y Carrizal, El Palomar, El Arenal, San Salvador La Laguna, La Cañada, Rancho Los Arana, Palo Hueco, La Esperanza, El Calvario, El Llano, El Cerrito, Las Vigas, San Isidro del Bosque, Barbechos, San Lucas, El Ocotal, La Centinela, Loma Alta Villa, Cruz del Arenal, San Martín Cachihuapan, El Varal, Piequiximo, Los Molinitos, Pueblo Nuevo, La Ciénaga, Plan Zacapexco, San Jerónimo y El Guajolote.
Entre las demandas que sobresalen en el documento se encuentran principalmente: el subsidio para fertilizante, la construcción de la casa de salud en Loma Alta, tres pavimentaciones en El Varal, construcción de un depósito que almacene 50 mil litros de agua potable, construcción de aulas para un tele bachillerato comunitario en La Cruz y Carrizal, rehabilitación de la casa de la salud en San Luis Taxhimay, entre otras obras más de pavimentación, mejoramiento de escuelas centros de salud y pequeñas electrificaciones.
A decir de Patricio Rivera, “La infraestructura solicitada, más el subsidio de fertilizante para los pequeños productores y los habitantes de este municipio, crearan las condiciones óptimas para mejorar el nivel de vida y hacer a un lado las carencias, marginación y desigualdad en el municipio”.
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