El pasado 10 de abril miles de antorchistas del estado de Hidalgo, muchos de ellos campesinos, le dieron una lección al fascista que gobierna esta entidad, al demostrar que confían en el Movimiento Antorchista, marchando por varias horas por diferentes carreteras desde donde, a través del uso de la fuerza pública y violando flagrantemente el derecho de manifestación, de petición y de libre tránsito, fueron detenidos y bajados de sus autobuses que se dirigían a la gran concentración de 40 mil ciudadanos que el autoritarismo y la falta de atención del gobernador de Hidalgo, Omar Fayad obligó a alzar la voz.
En esta travesía se suscitó una volcadura de un autobús con 35 indígenas a bordo, que trajo como consecuencia 20 heridos de gravedad, por la culpa de las autoridades policiacas enviadas por Fayad Meneses, quienes los obligaron a detenerse en una curva, ocasionando con esto este accidente, claramente provocado.
Para Omar Fayad es más grande su ira y odio a todo aquel que se atreve a exigirle que trabaje, que cumpla con sus obligaciones de gobernar para todos en Hidalgo, recordándole sus promesas de campaña en las que prometió mejores condiciones de vida una vez de que ganara las pasadas elecciones. Pero en cambio de promesas cumplidas, en esta entidad hay solo evidencia clara de que existe una profunda necesidad.
Ahora el señor gobernador ha sido atacado por una profunda amnesia porque todo lo ha olvidado, y se burla de que en Hidalgo, sólo 6 de cada 10 viviendas tienen agua entubada, 2 de cada 10 no tienen drenaje, el 54% de la población está en pobreza, el 72% de la población en la entidad carece de seguridad social; y hay más de 350 mil hidalguenses en pobreza extrema; el 63% de la población que trabaja gana menos de dos salarios mínimos.
A Fayad se le solicitan servicios básicos como: agua, luz, drenaje, caminos, clínicas, albergues y becas para que estudien los niños y jóvenes de escasos recursos, e incluso, en muchos lugares serranos, la gente necesita con urgencia maíz para comer.
Pero para colmo: No conforme con la represión emprendida contra humildes manifestantes, ¡sus propios gobernados señor Fayad! A 10 días de cumplir la instalación del plantón antorchista en la Plaza Juárez, dos sujetos, acompañados por un grupo de porros y malandros armados con navajas y enviados por el secretario de Gobierno de Hidalgo, Simón Vargas Aguilar, acudieron al plantón de Antorcha instalado a las afueras del Palacio de Gobierno para quitar con lujo de violencia la propaganda de denuncia, donde se evidencia que el gobernador Omar Fayad reprime y no resuelve las demandas del pueblo.
Esta es la forma de "razonar" y actuar de Fayad Meneses, quien cree que tapándose los ojos y reprimiendo al pueblo va a lograr que este se calle y ya no exprese su decepción por este mal gobierno, no señor el pueblo ya despertó de su engaño y ahora exige soluciones verdaderas.
Todos los antorchistas de todo el país que ya sumamos más de 3 millones, exigimos cese a la represión en Hidalgo por parte del dictador que gobierna ese estado y por supuesto solución a todas y cada una de las demandas de obras y servicios para todos los que lo necesiten. No olvide señor gobernador que usted está para servir, por eso fue elegido, no para aplastarse en una silla de gobierno y preguntarle al dedito que es lo que quiere hacer y que no, por lo tanto, ¡haga su trabajo!
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