El Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) se concibió como un instrumento financiero enfocado en proporcionar suministros de auxilio y asistencia ante situaciones de emergencia con el objetivo de responder de manera inmediata a las necesidades de la población afectada por fenómenos naturales como sismos, huracanes, ciclones, lluvias, etc.
Andrés Manuel López Obrador junto con los diputados de Morena fueron los encargados de que este programa desapareciera, así como otros 109 fondos y fideicomisos. Contaba el año en que desapareció, 2020, con 3,800 millones de pesos destinados única y exclusivamente para los desastres naturales. Estamos en temporada de huracanes y vemos lo que está pasando en Veracruz, Puebla y en la Huasteca Potosina que fueron afectados por los desastres naturales por el huracán "Grace".
El Gobierno de López Obrador sólo se limitó a decir que lamenta mucho las pérdidas sufridas por las familias por el paso del Huracán “Grace” y que están junto con el “gobernador” de Veracruz, el también morenista, Cuitláhuac García. Y ponemos entre comillas gobernador en sentido irónico, porque este señor ha demostrado una total falta de capacidad para resolver los problemas que aquejan a esa entidad federativa, como lo son en materia de seguridad, salud, vivienda, y otros muchos otros que son de su responsabilidad.
Con relación a la devastación provocada en muchas comunidades por el huracán, sólo se ha limitado a “lamentarse” por la pérdida de víctimas humanas y las de los hogares de cientos y miles de familias. No ha querido hacer nada porque sus diputados morenistas, y él, no están verdaderamente del lado del pueblo. Más bien la su prioridad son sus propios intereses mezquinos de grupo en el poder, así están de “perdidos” los de la 4T; son un verdadero desastre más que el natural, porque se han perdido más vidas que por los desastres naturales, cito algunos ejemplos: En la pandemia van más de 500 mil muertos según expertos, la tasa de desempleo es cada vez más alta por la falta de inversión privada, y la tasa mensual de desocupación 2019-2021 alcanzó el 3,96% de Población Económicamente Activa (PEA) en junio de 2021. Actualmente hay más de 15.5 millones de desempleados en nuestro país y sin ninguna esperanza de encontrar algún empleo formal.
En conclusión: El impacto de los desastres naturales en el país es dañino “por partida doble” como dicen los contadores: una por lo que causan de manera natural por su violencia, y dos por la incapacidad de los gobiernos estatales y particularmente del Federal para atender a los damnificados, resultado de la desaparición del Fonden. La situación se torna, por tanto, más difícil para las familias damnificadas.
Por eso necesitamos un cambio verdadero. Un gobierno que vea y le dé prioridad a los problemas de la clase trabajadora, que es la única generadora de la riqueza material en cualquier sociedad. No queremos un gobierno que siga promoviendo la concentración desmedida de la riqueza en unas cuantas manos, sino que haya un reparto más equitativo de ésta. Esto es lo que ha venido promoviendo el Movimiento Antorchista: un modelo económico que beneficie a las clases sociales más vulnerables y con mayor necesidad, cómo son los más de 100 millones de mexicanos que apenas y sobreviven. Actualmente el 70% de la población está en pobreza extrema, esas son las cifras y los números que arroja actualmente el gobierno de la 4T. Y que conste; no lo digo yo, lo dicen las instituciones como el Inegi y el Coneval, este último estima que actualmente el aumento de la pobreza se debe a la pandemia por covid-19. Nosotros agregamos que es por el mal manejo de la pandemia por la 4T.
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